Capítulo 16

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LUHAN

Los sábados eran los peores.

En los domingos, Luhan podía pensar todo el día sobre lo cerca que estaba el lunes. Pero los sábados estaban a 10 años luz.

Ya había terminado la tarea. Algún asqueroso había escrito "¿Te pongo?" en su libro de geografía, por lo que pasó un tiempo muy largo cubriéndolo con una pluma de tinta negra. Trató de convertirlo en una especie de flor.

Observó dibujos animados con los niños pequeños hasta que llegó el golf, luego jugó doble solitario con Mei Ling hasta que se aburrieron hasta la estupidez.

Más tarde, escucharía música. Había guardado las dos últimas baterías que Sehun le había dado para poder escuchar su reproductor de cintas hoy cuando más lo echaba de menos.

Ahora tenía cinco cassettes de él; lo que significaba, si sus baterías duraban, que tenía cuatrocientos cincuenta minutos para pasar con Sehun en su cabeza, sosteniendo su mano.

Tal vez era estúpido, pero eso es lo que hacía con él, incluso en sus fantasías; incluso cuando todo era posible. En lo que se refiere a Luhan, eso sólo mostraba cuán maravilloso era sostener la mano de Sehun.

(Además no sólo se tomaban las manos. Sehun tocaba sus manos como si fueran algo excepcional y precioso, como si sus dedos estuvieran íntimamente conectados con el resto de su cuerpo. Lo cual, por supuesto, era verdad. Era difícil de explicar. Él lo hizo sentir como más que la suma de sus partes).

Lo único malo acerca de su nueva rutina del bus era que tenían serias disminuciones en sus conversaciones. No podía mirar a Sehun cuando lo estaba tocando. Y Sehun parecía tener un momento difícil terminando sus frases. (Lo que significaba que le gustaba. Ja).

Ayer, en el camino a casa desde la escuela, su autobús tuvo que dar un rodeo de quince minutos a causa de un tubo de drenaje roto. Kris había comenzado a maldecir sobre cómo tenía que llegar a su nuevo trabajo en la estación de gas. Y Sehun había dicho:

—Guau.

—¿Qué? —Luhan ahora se sentaba junto a la pared, porque lo hacía sentir más seguro, menos expuesto. Casi podía fingir que tenían el autobús para ellos solos.

—Ahora puedo reventar las alcantarillas con mi mente —dijo Sehun.

—Eso es una mutación muy limitada —dijo Luhan—. ¿Cómo te llaman?

—Me llaman... eh... —Y entonces él se había echado a reír y le toco el cabello.

(Eso fue un nuevo desarrollo impresionante, el tocar el cabello. A veces había ido por detrás de él después de la escuela, y tirado de su caballo o toqueteado los pelillos de su nuca).

—Yo... no sé cómo me llaman —dijo.

—Tal vez Obras Públicas —dijo poniendo su mano sobre la de él, dedo a dedo.

Sus dedos llegaron a su último nudillo. Puede ser que sea la única parte de él que era más pequeña que la de Sehun.

—Eres como un niño pequeño —dijo.

—¿Qué quieres decir?

—Tus manos. Sólo es que se ven... —Él tomó su mano entre las suyas—. No lo sé... vulnerables.

—MasterTubo —susurró él.

—¿Qué?

—Ese es tu nombre de superhéroe. No, espera, el Tubero. Como ¡allí viene El Tubero!

Luhan & Sehun [HunHan]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora