You, forever you.

Capítulo 7

Mientras andamos por los pasillos del polideportivo, no paro de mirar de un lado a otro en su busca.
- Leah, ¿se puede saber por qué estas tan despistada? - No entiendo como esta pequeña sabe siempre cuando me pasa algo.
- Nada, solo estaba pensando en los examenes que tengo que hacer esta semana.- Miento.
- Sabes que a mí no me puedes mentir... Tu secreto sera nuestro secreto, ¿vale?
Suelto una carcajada: - De verdad que no me pasa nada enana. Vamos, vé, que tu profesora te está esperando en la puerta.
Mi hermana se va y cuando me vuelvo, Cameron viene andando hacia mi. Veo como sus musculos se mueven bajo su camiseta blanca y me quedo petrificada.
- Hola de nuevo. - Está mojado y lleva una bolsa de deporte en la mano, vendrá seguramente del gimnasio
- Hola. - Digo esforzandome por no mirarle tanto tiempo fijamente a los ojos. Esos ojos... Ese brillo en esos ojos marrones. Son increibles.
- ¿Has decidido venir a verme, no? - Me dice con una sonrisa de oreja a oreja.
- Sabes que he venido a traer a mi hermana. - Digo señalandola. Aún sigue en la puerta hablando con la profesora. - ¿Cómo lo supiste?
- ¿Tu hermana no es un poquito mayor para tener que venir acompañada? - Se que se refiere a la profesora.
- Es la pequeña, idiota. - Suelto una carcajada.
- Lo sé... Perdona, ¿me has llamado idiota?
- No cambies de tema.
- Te vi con ella, y me supuse que lo era.
- Ah.
- Eh... Me preguntaba, si... en fin, si no haces nada esta tarde.
- Me iba a casa, tengo que estudiar.
- Bueno, digo yo que pasar la tarde conmigo sería mas divertido, ¿no crees?
No puedo creer que me haya dicho esto. Esto no es verdad. Me pellizco la mano sin que se de cuenta. No, es real. Este chico tan maravilloso me ha pedido una cita, y ¿no la voy a aceptar?