Capítulo 14 - Parte 1/2

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Solo en contadísimas ocasiones encontramos a alguien a quien podamos transmitir nuestro estado de ánimo con exactitud, alguien con quien podamos comunicarnos a la perfección. Es casi todo un milagro, o una suerte inesperada, hallar a esa persona. - Haruki Murakami.

***

La pareja accedió al "Destiny". Como cada noche, el lugar estaba a rebosar de personas que buscaban disfrutar y pasar una noche llena de sexo y diversión. Mirarán donde mirasen, solamente había deseo, lujuria y control, mucho control, pues en esa parte del club no se podía atravesar ciertos límites. Dorian la parapetó con su cuerpo y la dirigió a la esquina de la barra. Esa en la que se vieron por primera vez. Ella lamió sus labios nerviosa y ansiosa por subir a las termas y dejarse llevar por aquella nueva experiencia. Con la copa en la mano, sintió como él la arrinconaba, pegando la erección a su espalda. A continuación, fue la lengua la que recorrió la longitud de su cuello produciéndola un escalofrío.

—Creo que no te he dado permiso para que puedas tocarme, soldado —dijo con voz ronca mientras rebozaba su trasero contra la tela del pantalón.

—Yo no la necesito, morbosa, pero si tú quieres puedo parar...

Ella a modo de respuesta gruñó y se pegó más al cuerpo de su pareja, que inmediatamente rompió a reír. Dorian movió con lentitud la palma de la mano sobre el vientre femenino y trazo un sendero hasta la base de los pechos, para palparlos y pellizcar los pezones que se marcaban en la tela del vestido. Metió con sutileza la pierna entre sus muslos y los abrió con premura.

—Tu cuerpo me pertenece —ronroneó en su oído —. Respondes a mis caricias, a mis besos, a mis atenciones... Date la vuelta.

Melanie instantáneamente obedeció. Se giró y él clavó sus manos en la barra. Encerrándola entre sus brazos. Arrinconándola con su cuerpo. Dejando claras sus intenciones con la transparencia de su mirada.

—Cariño, tengo algo para ti en el bolsillo interior de la chaqueta.

—¿Puedo? —preguntó avanzando con dedos trémulos.

—Por favor...

Melanie introdujo las manos por la solapa de la chaqueta, tanteó el bolsillo y metió la mano en el interior. Rápidamente dio con dos retales que parecían de cuero y los encerró en su mano para hacerse con ellos. Abrió la palma y entonces visualizó dos pulseras trenzadas de cuero negro. Dorian cogió una, la más pequeña y la pasó alrededor de la muñeca femenina para anudarla, después subió la manga de su camisa y se la ofreció a ella invitándola a colocársela.

—En el mundo de la dominación, se suelen utilizar accesorios, como el collar de sumisión o de esclavo. Sirve para sellar el compromiso entre ambos, denotando que existe una relación profunda y que el sumiso tiene un amo. No se trata de un accesorio únicamente para el juego, sino que además es símbolo de una unión importante. Quiero que esta pulsera simbolice nuestra relación. No quería que fuese nada extravagante y...

—¡Perfecto! —musitó sonriente — ¡Me parece perfecto!

Melanie realizó un fuerte nudo en la pulsera de cuero y lo besó. Primero con cuidado y delicadeza, para finalmente devorarlo con urgencia. Ambas lenguas se enzarzaron en una lucha frenética de mandato y autoridad que ninguno estaba dispuesto a perder. Contento, la asió con fuerza porque ella no hubiese puesto ninguna pega al detalle, pues se había visto tentado a comprar dos esclavas de oro blanco, pero conociendo a la bailarina sentía que era capaz de tirárselas a la cara.

—Vamos, Cariño, las termas nos esperan.

Los dos subieron, accedieron al vestuario y a las duchas de las termas donde inevitablemente comenzaron a tocarse. Dorian la lavó con el jabón neutro y permitió que ella hiciese lo propio con él. Una vez fuera, los dos avanzaron, cogidos de la mano, por el estrecho pasillo hasta acceder al balneario. Los dos estaban desnudos, luciendo únicamente aquel cordón de cuero en sus muñecas que acarreaba un gran significado para ellos y también para aquellos que lo veían, pues no pasaba desapercibido ante los presentes.

Bailando con el perdón | Erótica + 18 | Parte 2/4 Completa ✅Donde viven las historias. Descúbrelo ahora