Emilio y Niko se montaron en el auto del rizado porque era el sitio en el que consideraban que había más intimidad, ya que el bar estaba lleno de gente festejando y bailando. En cuánto entraron se formó un silencio tormentoso para ambos. Niko no paraba de mirarse las manos entrelazadas sin saber que decir mientras que Emilio se estaba debatiendo si él debería ser el primero en hablar, puesto que estaba viendo en qué situación se encontraba Niko.
- Niko - el rubio lo miró - No tienes porqué estar nervioso. No voy a recriminarte nada
- Éramos buenos amigos tú y yo ¿no?
- Sí, sí que lo éramos. Cuándo conocí a Joaquín siempre me ayudaste, incluso más que Eduardo
- Lo siento mucho Emilio, yo sólo quería mantener el orden. Has estado fuera 2 años y en éste tiempo han ocurrido muchas cosas, entiéndeme
- Nunca he dicho que no lo hiciese, de hecho Joaquín estuvo más enfadado que yo en algunas ocasiones
- Os he tratado muy mal y me arrepiento de ello
- Lo sé, lo veo en tus ojos. No tengo nada que perdonarte, lo hiciste por instinto y eso es de un buen padre y marido
Después de eso los 2 salieron del auto y lo primero que hizo Niko fué ir a abrazar a Emilio, éste lo sostuvo agradecido y sintiéndose al fin tranquilo por completo.
Tras abrazarse ambos volvieron a entrar al bar ya un poco más relajado. En cuánto Joaquín los vió fué corriendo a dónde ellos y los abrazó a los dos. Emilio y Niko rieron y después Joaquín dejó en libertad a su amigo para sólo abrazar a su marido.
- ¿Cómo ha ido? - le preguntó al oído
- Bien, muy bien. Todo solucionado - dijo para después darle un beso en la mejilla y separarse
Juntos se acercaron a Romina y a Emir que los miraban con una sonrisa. Emilio vió cómo Emir tenía la mano por los hombros de una chica y en cuánto la vió la reconoció perfectamente. Intentó decirle con la mirada a su hermano que le quitase el brazo de encima, pero Emir estaba perdido en los ojos azules de aquella morena.
El resto de las horas se las pasaron bebiendo y bailando y Emilio al fin se sentía completo, toda su familia estaba allí con él y no podía estar más feliz. Cuándo estaban a punto de irse alguien entró en el bar y apagó la música creando el desconcierto en toda la sala. Nadie sabía quién había sido, así que Emilio llamó a Joaquín para que se acercase dónde él y protegerlo tras su espalda.
- Emilio Osorio ha vuelto eh - dijo alguien - Y aquí se está celebrando su vuelta
Emilio vió cómo la gente se iba haciendo a un lado para dejar pasar a esa persona y cuándo los de delante de él se apartaron lo vió. Era Alan, jefe de la otra banda de carreras de Londres, eternos rivales desde que Emilio empezó en el mundo de las carreras, pero nunca se habían enfrentado, ya que en Clock Street su banda estaba completamente vetada. Cuándo lo tuvo enfrente su cuerpo se hizo más grande, algo que Joaquín notó así que coloco sus manos en su baja espalda para darle una pizca de protección, gesto que Emilio agradeció.
- No voy a hacerte nada Osorio, no tienes que proteger tanto a tu marido - corrió la vista hacía Eduardo que hacía lo mismo con Niko - Aunque igual sí que soy tan amenazante cómo para que los líderes de Clock resguarden tras ellos a sus maridos
- Deberías largarte de aquí - bramó Emir
- Vee no - susurró Emilio
- Vaya vaya, al fin conozco al hermanito de Emilio Osorio - Emir tragó saliva - ¿Cómo te llamas niño? - se acercó a él, pero Emilio se colocó en medio
- Ni se te ocurra Alan, ó te romperé las piernas - amenazó
- ¿Dónde has estado todo éste tiempo Salvaje? Me dejaste la competencia muy fácil, supongo que tus corredores ya ni se acordarán de cómo se compite
- No te metas en dónde no te llaman, éste no es tu territorio
- No lo es no, todo Londres ya es mi territorio así que me temo que has perdido. Lo que algún día el desgraciado de tu padre te dejó, ahora en mío - rió
Emilio iba a abalanzarse contra él, pero Joaquín lo sostuvo de la muñeca impidiéndoselo. El rizado lo miró y Joaquín se encontraba mirando a Alan con la mirada cristalina.
- Es muy fácil proclamarse líder de un territorio cuándo el líder de éste no está presente - habló Joaquín - Clock Street no es tuyo, es de Salvaje y te lo puede demostrar - Emilio lo seguía mirando
- Tu marido tiene agallas Osorio - Emilio miró a Alan ésta vez - Pero he creído entender que acaba de crear una carrera para ver si Clock es en realidad tuyo ó definitivamente mío. ¿A qué estamos esperando? - se dió la vuelta y se marchó
- ¿Joaquín que acabas de hacer? - Eduardo se dirigió amenazante hacía él, pero Emilio lo detuvom- Emilio lleva años sin competir, vá a dejarle en ridículo joder
- Creo que el competir en una carrera de autos no se olvida tan fácilmente - la multitud comenzó a murmurar que tenía razón - Emilio es el mejor, puede ganarle fácilmente
Dicho y hecho, todo el mundo se subió en sus vehículos y pusieron rumbo a Clock Street. Emilio antes de dirigirse hacía allí miró a Joaquín y le preguntó si realmente estaba tan de acuerdo con lo que anteriormente había dicho a lo que Joaquín respondió que por supuesto. Por otro lado, Eduardo estaba demasiado nervioso, no había preparado su auto, ni ningún otro en caso de emergencia, para alguna competición, así que había que confiar que el motor de cualquier coche estuviese en las mejores condiciones. Emir, por otro lado, tuvo una idea, llamó a Joaquín y le pidió que se retrasasen un poco en llegar a Clock para que al pequeño le diese tiempo a ir hasta el taller dónde trabajaba con Eduardo y llevar un coche que estuviese en las mejores condiciones para una carrera. En cuánto entró en el taller supo a qué coche dirigirse así que le quitó la lona que lo cubría y a Emir se le puso la piel de gallina. Era un coche que llevaban meses restaurando y mejorando para uso expreso de carreras ilegales.
- Lo tienes que machacar pequeña - dijo montándose en el coche
Seguimos con el maraton..........
Se viene la carrera por el trono de Salvaje.......
Nos vemos AlbertXioW.
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Ravenous // Adaptación Emiliaco // 3° y 4° Temporadas de Clock Street
FanfictionTodo había cambiado, la desaparición de Emilio fué lo peor. Días, semanas, meses buscándolo, pero nunca lo encontraron, así que lo mejor fué darlo por perdido. A veces las personas desaparecen sin motivo alguno, sin embargo, otras veces desaparecen...