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꧁ᴥ︎︎︎Amenazadoᴥ︎︎︎꧂








N

o esperaba que se repitiera lo mismo que hace 8 años.

No esperaba sentir el mismo vacío que sintió cuando estuvo perdido.

No esperaba volver a aquel tiempo en el que tuvo que luchar para sobrevivir.

No esperaba que su corazón latiera tan rápido por el miedo de estar en un lugar desconocido y solitario.

No quería volver a pasar por eso otra vez. No quería sentir otra vez lo que sintió cuando quedó completamente solo en aquella isla.

"Por favor, no... no otra vez".

Estaba asustado, le dolía tanto la cabeza que tuvo que cerrar los ojos para intentar aclarar sus ideas y averiguar dónde diablos estaba.

Miró a su alrededor aún aturdido, intentando enfocar mejor su visión para poder ver si había una salida en ese lugar tétrico en el que se encontraba.

Sintió que sus muñecas dolían, bajó la vista y vio que estaba amarrado a una silla de madera, al igual que sus pies. Intentó forcejear para liberarse, pero era inútil.  Las cuerdas estaban bien amarradas y su boca estaba cubierta con cinta adhesiva que le impedía hablar o, en estos momentos, gritar pidiendo ayuda.


La puerta del lugar sucio, maloliente y en ruinas se abrió frente a él. Levantó la mirada y vio a un hombre de unos 35 años parado en el umbral, mirándolo fijamente con una sonrisa ladina, como burlándose.

Jimin mantuvo la mirada a pesar de estar muerto de miedo. Su respiración estaba agitada y sus manos estaban en puños mientras sentía sus muñecas y tobillos arder por los intentos de liberarse.

El hombre se atrevió a darle una mirada de arriba abajo, lo que hizo que la piel de Jimin se pusiera de gallina.

El hombre alzó una ceja al regresar su mirada a los ojos de Jimin.

"¿Por qué este mocoso no quieres estar conmigo?".

Sonrió al mirarlo, una sonrisa tan malévola que hizo que Jimin sintiera aún más miedo. No sabía qué pasaba por la mente de ese hombre.

—Hola... Park Jimin.

Jimin simplemente cerró sus ojos cuando el hombre se acercó y subió sus manos a su rostro. Pero no esperaba que le quitara la cinta sin delicadeza, causándole un ardor en toda la zona.

"Hijo de perra"

—¿Quién eres? —preguntó lo primero que se le vino a la cabeza. El hombre sonrió y comenzó a caminar alrededor de él—. ¿Qué es lo que quieres?

—Oh, eso es muy fácil —canturreó en respuesta a la última pregunta, pasando su mano por su mejilla. Jimin intentó evitar que lo tocara—. Mi nombre no es importante en este momento, cariño.

—No me llame así —dijo enojado. El hombre rió divertido—. ¿Por qué está haciendo esto?

—¡Por la mierda! Esa típica pregunta me artá—rió mientras negaba con la cabeza—. El porqué es más significativo de lo que piensas, niño.

—Escuche, no entiendo por qué está haciendo esto y tampoco quiero saberlo —interrumpió—. Pero por favor, déjame ir. Yo no le hice nada para que actúe así...

—¿No has hecho nada dices? —dijo, cambiando su actitud a una más seria. Jimin tragó saliva asustado—. Te entrometiste en mi camino, te interpusiste en mis planes y tomaste lo que era mío. Y eso... me lo pagarás, Park Jimin.

—Por favor... —susurró Jimin sumamente asustado, sintiendo que sus piernas temblaban y sus lágrimas querían salir—. Por favor...no..

—¡Cállate! —gritó, arrojando un banco y asustándolo.

Jimin sintió las lágrimas brotar cuando el hombre lo tomó con fuerza por las mejillas.

—Escúchame bien, mocoso. Jeon Jungkook es mío. Haré lo que sea por tenerlo a mi lado y ni tú ni nadie lo impedirá.

—¿Jungkook...? —preguntó confundido, soltando un quejido al ser soltado con fuerza—. ¿Qué tiene que ver Jungkook en esto?

Seulgri lo miró y sonrió divertido. Al parecer, el niño no sabía nada. Le habían ocultado todo con respecto a él. Vaya, esto será más divertido de lo que pensé.

Se paró frente a Jimin, mirándolo fijamente. Jimin tuvo que levantar la cabeza debido a la diferencia de altura entre ambos.

—Jeon Jungkook... es mi pareja —soltó seguro de sí mismo—. Me gusta desde mucho antes de que ocurriera el accidente en su barco. Me gusta desde que era prácticamente un niño y por fin llegó el día en que sera mío.

Jimin abrió la boca y los ojos de par en par, abrumado por la fuerte noticia que obviamente no era del todo mentira. Sintió cómo su corazón dolía, pero debía confiar en Jungkook, debía mantenerse fuerte.

Debía confiar, aunque no entendiera nada de lo que estaba pasando.

—¿Por qué dices que es tu pareja? —preguntó en un murmullo que, incluso así, fue escuchado—. A Jungkook le gusta alguien más...

—¿Quién, tú? ¿Crees que Jungkook estaría con alguien como tú? —lo señaló, divertido, pero nada de esto era gracioso para Jimin—. ¿Por qué piensas que te alejó, huh? Porque se dio cuenta de que eras un estorbo. ¡Solo se acostaría contigo y después te desecharía como la basura que eres!.

Jimin ya no quería seguir escuchando. Su pecho le dolía y las lágrimas brotaban en cascada solo al imaginar que Jungkook solo quería acostarse con él y después...

¡No!

No debía pensar eso de Jungkook. Él no era ese tipo de chico. No debía desconfiar de él. Jungkook fue el único que estuvo ahí después de su pérdida en esa isla. No importaba lo que dijera ese tipo para hacerlo sentir débil, porque no lo lograría. No se dejaría enredar por esas palabras sin sentido.

Jungkook era una buena persona y vendría a salvarlo. Se lo prometió y confiaría en esa promesa, aunque deseaba que fuera ya. No quería seguir estando ahí con ese tipo que solo se burlaba de él y le decía todas esas cosas malas que afectaban su mente débil.

Cuando habló con Jungkook, deseaba gritarle que lo sacara de ahí, pero el teléfono fue apartado de su lado y le colocaron nuevamente la cinta en la boca.

"Jungkook... por favor, ven rápido".

Suplicó en su mente y, como si su súplica fuera escuchada, se escuchó un auto estacionarse afuera. Seulgri se puso de pie rápidamente, sacando una pistola calibre 40 de su cintura.

Jimin no sabía que tenía una pistola, y eso lo asustó aún más, al punto de hacerlo temblar en la silla.

—Escúchame bien, no hagas ningún ruido o juro que te dejaré un lindo agujero en medio de tus cejas. ¿Oíste? —amenazó, poniendo la pistola en dicho lugar. Jimin asintió sumamente asustado mientras cerraba los ojos—. Bien, ahora verás que lo que te dije es cierto. Jungkook es mío, y estaremos juntos a partir de ahora.

Jimin lo miró sin entender, y eso solo provocó más diversión en Seulgri.

—Nos iremos de este mugroso lugar para estar juntos, y nadie se meterá en mi camino —dijo feliz, colocándole la cinta nuevamente y alejándose hacia la puerta, dejando a Jimin con una ansiedad terrible y el miedo a flor de piel.

"Jungkook", susurró su nombre en su mente.

Estaba tan entristecido, llorando hasta que escuchó unos disparos a lo lejos, lo que lo hizo saltar en su lugar y aumentar su miedo al escuchar dos más.

"¿Qué ocurre?".

Se preguntaba mientras forcejeaba una vez más, pero como en intentos anteriores, no tuvo éxito. Solo logró que la silla se volcara y cayera al suelo, lo que le provocó un quejido de dolor.

Sin rendirse, Jimin intentó liberarse una vez más, pero casi tenía éxito cuando escuchó un último disparo. Luego de eso, la puerta se abrió y apareció una silueta negra que se acercaba rápidamente.

Jimin abrió los ojos y trató de enfocar bien su vista. Al hacerlo, se encontró con los ojos abiertos y las lágrimas fluían sin control.

—No te preocupes, te sacaré de aquí —dijo el chico frente a él. Lo levantó, cortó las cuerdas y le quitó la cinta de la boca. Jimin lo miraba con atención.

—¿Quien eres?.

—Mi nombre es Hyunjin y voy a ayudarte, ¿está bien?.





































Hyunjin será el héroe?🤔

Nos leemos luego 🐾

⚠︎𝐂ℎ𝑖𝑐𝑜 𝐏𝑒𝑟𝑑𝑖𝑑𝑜⚠︎  ꧁𝙺𝙾𝙾𝙺𝙼𝙸𝙽꧂Donde viven las historias. Descúbrelo ahora