Esa noche, no pudo ni cerrar un ojo para dormir.
Miraba el techo de su habitación escuchando la pesada respiración de pareja totalmente dormido. Estaba un tanto preocupado por la confesión de la madre del menor y pensó que Riki estaría también algo inquieto, más después de hablar del tema, el menor se quedó totalmente dormido sobre su regazo.
Riki dijo que no se daría mala vida sobre las decisiones o lo que dijera su madre, tampoco le creía todo aquel teatro bochornoso que creó. Ella le había ocasionado mucho daño durante su infancia y adolescencia con el tema de su sexualidad, y aunque la había perdonado, eso no aplicaba que la quisiera en su vida.
Al fin y al cabo el perdón era para su paz mental, para seguir adelante con su vida, el perdón no significaba abrirle las puertas de su casa ni mucho menos de su vida. Y aunque su padre daba voto de confianza, no estaba del todo seguro.
Jake respetaba su decisión, tampoco es como que él pudiera decir algo referente a aquella situación u opinar, después de todo Riki tampoco opinaba sobre la situación con su madre y él tampoco debería hacerlo más allá de un consejo. Al final el que tomaba las decisiones era su ricitos, él podría decir y decir un centenar de cosas, pero todo queda a criterio del menor.
Y él iba a respetar su criterio pese a todo.
Pasó un brazo por la cintura del menor y dejó un beso en su fino cuello, aspirando su delicioso aroma. Aún tenía el cabello mojado por la ducha que tomó y como estaba tan cansado no lo secó antes de dormir como siempre hacía, para no despertar como un maíz explotado en las mañanas. Acarició sus mechones rizados cortos y dejó otro beso sobre su sien.
Riki pegó su espalda a su pecho entre su inconsciencia y permitió que lo abrazará mejor. Sonrió de medio lado y dejó otro beso sobre el hombro desnudo del menor, sintiendo su calor común tan adictivo y conforme a su cuerpo, aunque deteniéndose porque no quería despertar al rizado.
Más amaba a su ricitos y le era tan difícil no tocarlo.
Pasó sus manos por su abdomen y tocó su bonito ombligo, recordando que esa era una zona en especial que le daban profundas cosquillas. Frotó su nariz contra la nuca del menor y mordió el lunar que había en el centro de esta y luego a un lado, buscando fastidiarlo aunque tenía el sueño bastante pesado.
A veces, cuando dormía en mala posición, roncaba, y cuando tenía gripe usualmente su nariz silbaba tiernamente. Otras era sonámbulo, y otras pocas hablaba cosas inteligibles. Conocía todas sus facetas y a veces solía responder a las incoherencias que entre dormido decía, le entretenía.
¿Se podía amar a alguien mucho más de lo que él amaba a Riki? Porque lo dudaba mucho.
Más la respiración de Riki empezó a ser menos tranquila por sus juegos y escuchó sus quejidos, por lo cual se detuvo para no despertarlo. Pero, al parecer, el sonámbulo del menor no quería que se detuviera.
Alzó una ceja cuando las calientes manos de Riki tomaron las suyas y se escabulleron entre su pantalón de pijama, viendo que el cuerpo de su menor reaccionó de otra forma a sus juegos tontos.
Quiso alejar sus manos de esa zona pero el rizado se removió y soltó un pequeño quejido, obligándolo a permanecer ahí.
Subió su cabeza buscando ver que el menor estuviese aún dormido o algo, más encontró que apretaba sus ojos con fuerza al darse cuenta que no era un sonámbulo cualquiera pidiendo toques indecentes.
Soltó una pequeña risa.
—¿Te desperté? —susurró a un lado de su oído, su aliento chocando contra la piel detrás de su oreja.

ESTÁS LEYENDO
Ocean Eyes 『Jakeki』
Fanfiction"Más allá del bien y del mal hay un jardín, yo te veré ahí". ¿Qué pasa cuando un amor es incluso más fuerte que la muerte? Existen personas que desearían tener un amor como ese, por lo cual impiden que sean felices. ❗Continuación de The Bathroom❗ ❗S...