Él necesitó pararse en la mesa de bebidas brevemente y beberse de golpe dos vasos generosos de ginebra con lima.
Haciéndose a la idea de que quizás, tendría que matar a su abuelo.
-Dime que no te has tirado a mi hermana en algún pasillo- Dijo Regulus de broma alcanzándole.
-No, estábamos hablando con mi abuelo- Dijo bebiendo.
Regulus no parpadeó, asintió varias veces seguidas- Ohm... No sabía yo que tenías un abuelo.
Él imitó su cara- Ni yo...- Ambos se rieron con fuertes carcajadas que tuvieron que opacar con los codos. Menos mal que no había nadie cerca. Luego, cogió a su amigo del hombro y le atrajo, el otro le imitó- Lo malo que tiene es que esta noche va a intentar matar a mi padre.
El chico paró de golpe y le miró- Vaya mierda de cuñado que me ha tocado, eres todo problemas...- Entrecerró los ojos- Pero te quiero, no se por qué, pero te quiero.
Le miró igual- Me enterneces el corazón Reggie- Le pellizcó la mejilla y puso una vocecilla- Yo también te quiero, mi pequeña doxye- Caminaron por un pasillo, buscando a su suegro.
-Retiro lo dicho, te odio.
Le abrazó y le dio un beso en la mejilla- Mentirosooooo...- Dijo sin despegar sus labios de la mejilla del sangrepura- Me quiereeeeees... Y me vas a echar de menos estos dos años que te quedaaaaaaan...
El chico se sonrojó con fuerza porque había dado en el clavo- Cállate subnormal. ¡Mierda de mejor amigo! ¡Severus! ¡Sev, me cago en la puta!- Se empezó a reír y se dejó abrazar- Eres un imbécil, un cuñado de mierda y un mejor amigo de poca monta.
Lo cogió por el pelo, revolviéndoselo. Luego, puso su frente contra la de él agachando la cabeza para ello- Y tú eres un cuñado gilipollas y un amigo de mierda. Pero también te voy a echar de menos- El chico sonrió con un ligero sonrojo y unos colmillos asomando, siendo así un Sirius masculino.
Unos tacones resonaron de repente a un metro de ellos- Cuando acabéis de follar, tenemos reunión familiar- Sirius los adelantó por un lateral caminando levantando ligeramente su falda con sus dos manos, como toda una dama.
Regulus se rió, se soltó de él y caminó junto a su hermana- Tienes envidia porque, si quisiera, podría quitarte a Severus.
-¡Por supuesto! Si no pudieras quitármelo, estaría profundamente decepcionada contigo, hermanito.
Él caminó detrás de ellos dos, tan iguales, con ese andar regio y arrogante- ¿No creéis que yo tengo algo que decir al respecto con respecto a mi sexualidad?
Ambos hermanos frenaron, se giraron, le miraron- ¡No!- Dijeron a la vez y continuaron caminando.
Suspiró sin ganas ni de enfadarse por irreverentes. Vaya par de hermanos.
Llegaron a una habitación de invitados. Era de techos altos, todo color crema y blanco suave, con muebles delicados y alfombras muy finas. Había lámparas de araña mucho más finas y menos intrincadas a las de otras casas como la de los Black o la suya.
El matrimonio Lestrange estaba comiendo pastelistos sentados en los taburetes del tocador. Su suegro estaba en el balcón viendo el jardín, su suegra en los pies de la cama hablando con Narcisa y Lucius de pie, con una ligera sonrisa, contribuyendo a la conversación entre tía y sobrina.
Entraron los tres y Orión caminó hasta él- Sirius dice que hay algo que quieres decirnos.
-Así es- Regulus le tendió un cigarro encendido- Mi abuelo nos ha amenazado de muerte a todos. No lo ha dicho explícitamente, pero me apuesto 10 galeones a que es así.
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Puzzle De Fetiches
RomanceEl joven Severus Snape tiene un fetiche. No es un fetiche muy raro. Y tampoco le hubiera extrañado a nadie que lo tuviese dado que, al fin y al cabo, vivía en el límite de las Artes Oscuras. La jovencita Sirius Black tiene un fetiche que es absoluta...