Capítulo 11

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POV NARRADOR

Ei: Eso es todo — dijo para luego tomar un poco de té.

Le había terminado de contar a Yuki todas las cosas que hizo durante su paseo por las calles.

Yuki estaba un poco pensativo sobre las acciones de la Shogun. Quiso decir varias cosas mientras Ei le contaba todo, pero quiso dejarlas al final del relato.

Yuki: ¿Y no sabes si esos tipos a los que golpeaste están vivos? — preguntó con cierta preocupación ya que sabía muy bien lo fuerte que era la Arconte.

Ei: Ciertamente no esperé a que se levantarán, pero no te preocupes, estoy casi segura que están vivos, aunque eso no significa que estén bien — respondió sin remordimiento alguna.

Yuki: Bueno… creo que eso es algo — dijo no muy seguro, pero no podría hacer nada en este momento.

Ei: ¿Estás molesto por haberme involucrado en una pelea? — preguntó curiosa ya que notó en varios momentos el semblante serio de Yuki cuando le contó sobre la paliza que le dió a aquellos chicos.

Yuki: No estoy molesto como tal, simplemente me preocupa que hayas sido imprudente al pelear con otros. Aunque tengas un cuerpo humano sigues siendo una Arconte, y tienes una fuerza que ninguna persona de este mundo podría aguantar.

Ei: Cómo dije, no te preocupes; me contuve por completo — comentó agarrando otra rebanada de pastel.

Yuki: Al menos trata de no volver a involucrarte de nuevo en otra pelea, ¿de acuerdo?

Ei: Está bien — asintió levemente. Realmente estaba de acuerdo con lo que decía Yuki. El involucrarse en conflictos con mortales de este mundo podría ocasionarle problemas, y era lo que menos quería en este momento.

Yuki: Por cierto, mañana mis clases empiezan un poco más tarde, así que podríamos salir a desayunar, ¿qué dices?

Ei: ¿Estás de acuerdo en que salga de nuevo? ¿Aún después de lo que hice?

Yuki: Por supuesto — sonrió levemente — Además estaré contigo, por lo tanto no dejaré que te involucres en problemas ajenos. Ya pasaste siglos meditando en el Plano de la Eutimia, y creo que es bueno salir a conocer el mundo, aunque no sea el tuyo.

Ei: Está bien — dijo con una leve sonrisa — Salgamos a desayunar mañana.

Yuki: Sí.

Ei: Y por cierto, Yuki — lo llamó haciendo que la volteara a ver — Meditar en el Plano de la Eutimia no es cualquier cosa. Debes ser paciente y concentrarte en lo que deseas — le comentó con seriedad.

Yuki: No sé muy bien como funciona el Plano de la Eutimia, ni cómo fuiste capaz de estar siglos ahí solo meditando.

Ei: ¿Quieres que te lo explique? — preguntó sin problema alguna en hacerlo.

Yuki: Mejor otro día — respondió para luego sacar su celular al sentir que vibró.

Ei: ¿Qué sucede? — expresó confundida al ver a Yuki con ese extraño dispositivo electrónico en sus manos.

Yuki: Es Watanabe-san — respondió leyendo su mensaje.

Ei: ¿Quien es?

Yuki: Una compañera de la universidad y también del trabajo. De hecho es una de las que me invitó a beber anoche.

Ei: ¿Es por ella que llegaste tarde anoche? — preguntó con cierta curiosidad.

Yuki: Podría decirse que sí.

Ei: ¿Y te está escribiendo por ese extraño aparato?

Yuki: Sí — asintió levemente — Me está invitando a comer Sushi mañana después del trabajo — comentó mientras empezaba a redactar su respuesta.

Mi Encuentro con la EternidadDonde viven las historias. Descúbrelo ahora