La favorita del guitarrista

8. Tuya por veinticuatro horas.

Vanessa

La heladería donde estamos es simplemente preciosa y no solo por su color rosa pastel. Tiene mesas redondas que parecen esos caramelitos duros de menta con espirales rojos a lo largo y ancho de todo el local. Ellos desembocan en un perfecto tronquito que los hace lucir hermosos y a juego con sus sillas de madera caoba las cuales no rechinan incluso si te mueves mucho lo cual me fascina. Justo para el fondo, hay mesas de este tipo de diseño, pero en forma rectangulares con unos sillones de piel también color caoba. No hay cuadros, pero sí un grande letrero neón con el nombre de la heladería que es Flour Delight. Las palabras están en cursiva lo cual hace que luzca elegante y si fuera por mí, me lo robo para mi habitación.

Tienen aire acondicionado el cual embotella todo el olor de los helados, panes y pasteles provocando una mezcla tan intensa que tiene mi boca babeando.

Adrik eligió una mesa redonda, y no pude estar más de acuerdo. Una de las meseras levantó nuestro pedido apenas ingresamos por lo cual ahora cada uno tiene su aperitivo. Él eligió un vasito de nieve de chocolate con M&M'S mientras yo elegí un elote y unos fritos con queso. Le digo que si no le molesta que fotografíe sus manos tomando su helado a lo que él responde que no y es así como hago una mini sesión de nuestra pequeña cita.

-¿Te gusta la fotografía, Ness? -cuestiona, llevándose una cucharada de nieve a la boca y el gesto que hace al degustarla me resulta tan familiar que mi corazón se aplasta reviviendo a ese hombre que últimamente aparece hasta en mis sueños. Sin embargo, no permito que el recuerdo de Jassiel me atormente, no cuando estoy con Adrik.

Así que respiro hondo, llevo un frito a mi boca, mastico, trago y luego hablo.

-Amo la fotografía -respondo con una pequeña sonrisa-. De hecho, mi primera cámara fue una desechable y me acabé el rollo captando imágenes de toda mi casa. Recuerdo que mamá me regañó porque se supone que la usaríamos para el cumpleaños de mi hermano menor, pero me la terminé.

Adrik suelta una risita ante mi anécdota lo cual me hace sonreír en vergüenza.

-Imagino entonces que estudias algo relacionada a ello, ¿no? -indaga otro poco a lo que me veo negando con un poco de decepción.

-Lamentablemente las fotografías no pagan las deudas así que... estoy estudiando algo básico en el colegio para después tomar una licenciatura relacionada con el área de salud. Actualmente eso deja más dinero.

Aquí en Estados Unidos, tras terminar la escuela básica que es la High School, tienes la opción de ingresar al Colegio Comunitario donde puedes cursar un Currículo Básico el cual te otorga diplomados y certificados, estos regularmente duran entre seis meses a dos años mientras que la Universidad ya abarca un campo más amplio siendo aquí donde hay licenciaturas, maestrías y doctorados que van desde los cuatro hasta los ocho años de estudio.

En mi caso elegí Colegio Comunitario pues es mucho más económico considerando nuestra situación, pero he estado ahorrando porque deseo una licenciatura que me dé un trabajo estable con buenos ingresos. Obviamente he descartado medicina, odontología y enfermería ya que son licenciaturas carísimas, pero tal vez fisioterapia o nutrición me vendrían bien. Aunque ninguna de ellas me gusta, pero al menos he visto que tienen un buen campo laboral y eso está bien, ¿no?

Es triste no pensar en la fotografía como un trabajo a tiempo completo, yo amaría estudiar una licenciatura relacionada con eso, pero seamos sinceros, ese trabajo soñado solamente puede ser para alguien que ya venga de una familia con una buena estabilidad económica o alguien a quien no le importe pasar hambre ya que no siempre hay personas que te contraten para eventos o cosas por el estilo. Y en caso de querer estudiarlo, no cuento con los recursos necesarios para mudarme a París que es donde está la academia de mis sueños. Además, tampoco sé francés así que soy un caso perdido.