Subo las escaleras del jet privado que nos llevará hoy mismo a Singapur junto a Charles.
Trato de que en mi rostro no se note lo afectada que estoy, que mis ojos no muestren todo el miedo que tengo ahora mismo dentro de mí.
Hemos decidido no dar ninguna declaración a la prensa hasta que lo hablemos, la CM de Charles nos dijo que era lo mejor y aún más el mantener a Anne alejada de todo este estrés y ambiente agobiante en el que estamos.
Pascale no ha dejado de enviar textos preguntando qué ocurrió y a Charles por supuesto recriminando por llevarlo a Maldivas y aunque esa idea pasó por mi cabeza para yo también hacerlo, me retuvo. Si tan solo no lo hubiera llevado para hablar...
Apenas fui capaz de dejar en visto a Ana cuando me pregunto que demonios era lo que había sucedido.
¡Yo soy la que tendría que estar haciendo esa pregunta!
Pronto, el miedo es reemplazado por sorpresa cuando las maldiciones, malas palabras y gruñidos de mi novio me sacan de mis pensamientos, apenas y alcanzo a darle mi Tote Bag a la azafata para tratar de detener a Charles cuando este se acerca al español que está parado entre los asientos del mismo avión en el que viajaremos nosotros.
Todo sucede tan rápido e inesperado que no soy capaz de llegar al lado de mi novio y evitar que de un puñetazo le voltee la cara a Carlos.
Un jadeo se escapa de mis labios cuando lo toma de la sudadera blanca y lo obliga a que lo mire.
—¡Charles! —desesperada tiró de su playera de Ferrari para que lo suelte.
La azafata que nos acompañará en este viaje está estupefacta y la CM de Carlos ni siquiera sabe qué decir. Me imagino que Joris está igual que yo detrás de mí sin saber qué decir.
¡Yo no sé qué decir!
—Mierda Charles —gruñó al ver que sus ojos no se apartan de él.
Ni siquiera me atrevo a mirar a Carlos, no soy capaz de hacerlo. Escuchó los gruñidos de Charles pero no logró comprender qué es lo que está diciéndole porque caminó deprisa evitando esto.
¿Era necesario hacerlo de esa forma?
¡Habíamos quedado en hablarlo tranquilamente!
En discutirlo con Carlos y llegar a un maldito acuerdo de una vez por todas de lo que sucederá en un futuro. Eso era lo que habíamos dicho, ¡no voltearle la cara de un puñetazo!
Charles suelta un gruñido y le da un empujón a Carlos haciendo que se choque con uno de los asientos, el español ni siquiera dice nada cuando Leclerc pasa a su lado ni tampoco protesta cuando sus cosas caen al piso provocando un gran estruendo cuando Charles las tira del asiento donde estaban.
Simplemente acomoda la hoodie y baja la mirada para sentarse al lado de Susana e inclinarse a recoger su mochila para echar de nuevo sus pertenencias dentro.
Puedo escuchar los murmullos de todos los que están aquí. Mi novio se gira y pasa su brazo por arriba de mis hombros para que tomemos asiento en los sillones de enfrente que para colmo queda justo enfrente de Carlos.
Recargo mi cabeza en su hombro después de abrocharnos el cinturón esperando el despegue, Charles se ha puesto sus audífonos y cerrado los ojos sin embargo su respiración sigue tratando de controlarla.
Trato de que las lágrimas nuevas no escurran por mis mejillas cuando el español no aparta la mirada de mí, sus ojos avellana parecidos a los de Anne me miran suplicandome algo pero justo hora no tengo ganas de hacer esto.
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TWO GHOSTS
FanfictionLIBRO DEL ONE SHOT -CARLOS SAINZ- Para Amelia Morgan dejar atrás todo le resulto más facil que pedir explicaciones. Pero todos sabiamos que en algun punto, en algun momento el presente la iba a alzancar. Traicion: La palabra traición se refiere al a...