capitulo 46

276 33 70
                                    

Se estaba retirando de ese lugar, definitivamente no quería hablar con Raijin luego de todo lo que pasó, le dijo demasiadas cosas durante tantos años y lo entrenó, cuidó hasta alimentó solamente para luego desecharlo.

Le daba rabia que en algún punto de su vida lo respetó y lo vió como alguien del cual se pudiera aprender cosas, incluso Isha resultó ser inhumana cuando tras esforzarse más de una vez en salvarlo, con ella hablaba casi todas las noches sobre él, su vida y sueños tontos...

— Tomoe — la voz de aquella mujer penetraba su cabeza cuando trataba de irse en silencio.

— ¿Que quieres Isha? No pienso ir con Raijin — cuando volteó a verla se sorprendió un poco, su expresión era... peculiar.

Normalmente ella siempre tenía una mirada inexpresiva o hasta fría a veces, en ese momento en cambio podía verla algo... ¿Triste? Él no encontraba una palabra exacta para describirla, ella tiró ligeramente de la manga izquierda de su uniforme, justamente dónde no tenía brazo.

— se que no lo harás pero... es que estuve trabajando en algo que si no te lo entregó lo habré hecho en vano — estaba algo indecisa sobre ese tema, buscaba algo entre su kimono para entregarle.

A los pocos segundos terminó por mostrar una máscara de madera, recordaba que ella cada noche siempre tallaba máscaras por gusto, incluso la que tiene Raijin la hizo ella.

La máscara era negra, tenía detalles en dorado en los bordes, estaba hecha solamente para cubrir de la nariz hasta la frente, la mitad superior del rostro prácticamente, normalmente suelen ser de animales y lo usual es de zorros o gatos, aunque la de Raijin era de un dragón.

— es de un lobo — ella se percató de que el muchacho estaba debatiendo mentalmente para saberlo — simplemente me pareció curiosa tu historia con aquél "lobo protector" normalmente los lobos protectores suelen ser blancos y protegen a los viajeros en las montañas de peligros, lo raro es que a tí te salvó un lobo negro que normalmente son ligados al "peligro" incluso dijiste que los lobos blancos eran los que te intentaron atacar, me resultó extraño pero supuse que lo preferirías en negro — en un preciso segundo, en solo un momento creía haberla visto sonreír pero se percató ella también.

Tomoe vió la máscara, fue realmente hecha a mano de una profesional, la vió unos momentos a ella y luego a la máscara nuevamente...

¿Por qué?

¿Por qué le costaba tanto decirle algo feo? Simplemente desquitar su rabia con palabras por como le hizo sentir, después de todo mucha gente lo hace y le salen las cosas mejor que a él...

Se maldijo a si mismo antes de tomar el obsequio de la mujer e irse sin decirle nada, si fuera Raijin pues si le hubiera dicho mil cosas pero... no es Raijin.
____________________________________

Tomoe caminaba por el pueblo totalmente destruido, estaba buscando a dos personas, su maestro Ryoma quien se recuperó antes y fue echado por Isha de la residencia de Raijin, ahora seguramente estaba ayudando a las personas afectadas por lo ocurrido aquella noche.

Y también buscaba a aquella niña de cabello no muy largo y ojos azules, le había prometido ayudarla luego de la muerte de su padre, tenía una ligera idea de a dónde podía llevarla.

Llegó hasta donde recordaba estar la casa se esa joven así que buscó a los alrededores, a unos metros sobre una zona despejada encontró un bulto pequeño en la tierra con unas flores sueltas, de rodillas y con los hombros bajos estaba la muchacha.

Tomoe se acercó y en silencio se arrodillo a su lado para apretar el puño sobre su frente, quería demostrarle el máximo respeto al hombre fallecido, después de todo él trajo a ese demonio a ese pueblo.

Relámpago Azul [Kimetsu no Yaiba]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora