Capitulo 25

22 2 0
                                    


Portada 🔞

—¡Lo harás bien, winter! 

—¡Hazlo como en la imagen!

—¡Sonríe un poco más!

Escucho las voces de mis amigos y mis nervios parecen aumentar a cada minuto. Por fin llegó el momento que temía. 

Mi primera sesión fotográfica. 

Hace unos días zack me llamó junto a mila para avisarme de la sesión en grupo que tendríamos en una revista para promocionar la película y ahora estoy en la sala de mi apartamento practicando tantas poses como puedo para mañana. Pero nada parece funcionar. 

¡No soy una persona fotogénica por dios! 

—No puedo hacerlo. 

Me dejo caer en el piso con un suspiro derrotado y siento que asher se acerca para tomarme de la mano y ayudarme a ponerme de pie. 

—Si puedes. 

—No puedo. 

—¡Si puedes! —Corean lucy y logan frente a mi y me río cuando lucy toma mi lugar. 

—Solo mírame, winter. Fija tus ojos en mi. 

Me siento en el sofá con asher y en cuanto lucy empieza a posar llevo mis manos a mi boca. Aparentemente puede haber alguien peor que yo en este tema, pero su sonrisa genuina enmascara un poco sus gestos. 

—Debí ser modelo en otra vida. 

—Me encantaría sonreír así. 

—Tu sonríes así, winter —Contesta lucy. 

—Pero no en cámara. 

—Son los nervios. A todos nos pasa alguna vez. Solo relájate e imagínate en tu lugar feliz. 

Pienso por un momento. No se si tenga un lugar feliz, pero la sensación más cercana es cuando estoy con mis amigos o cuando grabo una escena. 

—Está bien. Lo intentaré otra vez. 

Y así es como pasamos el resto de la noche. Asher, lucy y logan no dejan de darme consejos y para cuando anochece mis mejillas me duelen de tanto intentar sonreír. 

Asher parece notarlo cuando se acerca a mi en la cama y me da una mirada comprensiva antes de atraerme a su pecho. 

—¿Te encuentras bien? 

—Ahora si. Eres bueno abrazando. 

—Soy un experto en abrazos. 

Me río y me separo para que podamos cubrirnos con las sábanas. Asher se acuesta de lado y sus dedos juegan con los míos mirándome atentamente en silencio. 

—Estoy muy nerviosa. 

—Lo sé. 

—No quiero arruinarlo todo. 

—No lo harás. 

—Desearía no ser tan fría en ocasiones. 

Eso hace que el movimiento de sus dedos se detenga y me mira con completa estupefacción. 

—¿Quién dijo que eras fría? 

Me encojo de hombros y mantengo mi mirada en el techo. 

—No sé. Lo he escuchado algunas veces. 

—Eso es una mierda. 

—Es verdad. 

—No es verdad. Si fueras tan fría como piensas no te pondrías roja cada vez que te hacen un cumplido. No te preocupas tanto por los que amas, no te emocionarías por una película y no sonreirías mirando un guion. 

Bajo Los Reflectores [TERMINADA]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora