Ceniza de luna

Capítulo 22: Tan fácil que aterra

El aire se tensó, Sett no podía dejar de mirarla, incapaz decir una palabra. Camille estaba igual, incluso peor, incrédula de oír aquella afirmación escandalosa, perturbando la seguridad de sus semblante con molestia.

Pero Caitlyn estaba firme, impasible en su mirada severa ante la directora.

El día anterior había empezado temprano, fue Akali la encargada de despertar al prisionero, si iban Caitlyn o Kayn perderían el miedo que le enfundaban y Vi debía parecer la más neutral de los 4, dejando a Akali el papel de la buena policía.

—. ¿... Qué van a hacer conmigo? — preguntó después que Akali le permitiera darse una ducha, solo si dejaba la puerta abierta, mientras ella jugaban con sus shurikens a modo de advertencia.

—. Seguir con el plan. — contestó ella, acercándole la comida que le traía —, después de eso te dejaran ir.

—. ¿Vivo...? — le flaqueo la voz al sentarse frente a ella a comer.

Hubo un tenso silencio antes de oír su respuesta.

—. Si todo sale bien. — Yusari tuvo miedo de preguntar qué pasaría si todo fallaba.

La idea de Caitlyn era simple, tan sencilla que asustaba: La única forma que encontró de sacar a Sett de ese lío, era metiendo el prestigio de Labrys a juego.

—. ¿A qué se refiere, joven Kiramman? — la juzgó Camille con severidad, obligándola sin decirlo a retractarse de sus palabras, pero Caitlyn no se amedrentaba por ello.

—. Justo lo que he dicho, directora. — afirmó con voz clara. — Supe que el maestro Jhin estaba recolectando pruebas sobre los rumores de un coliseo clandestino, así que preferí venir a explicarme yo misma antes de escalar más la situación. — Caminó con paso seguro hacía Camille, sosteniendo lo que parecía una pequeña tableta en las manos y se la acercó, dejándola sobre la mesa. 

Camille la miró enojada, para justo después tomar el objeto en sus manos y reproducir lo que contenía. Caitlyn aprovechó el momento de distracción de la directora y mientras caminaba hacia Sett le dijo en lengua de señas.

—. Sígueme la corriente. — le vio fijamente con los ojos ligeramente ensombrecidos, gesticuló en pequeños movimientos, lo suficientemente claros para darse a entender. Sett arqueó la ceja confundido, pero asintió con la cabeza. A diferencia de él, Caitlyn parecía tener un plan, y de todas formas, ya sabía todo lo que podía perder.

—. Estás jugando con fuego, Cait. — fue lo que dijo Kayn al oír la idea, pero la sonrisa en su rostro no parecía ir contra de ella.

—. Quien no arriesga, no gana. — contestó, mientras veía el reloj en su muñeca. — Ve con Aphelios, necesita tu energía— cambio de tema —, Shen dice que aguantará tu carga, usar la energía de Neeko a funcionado bien hasta ahora.

Kayn asintió y se dirijo al cuarto de Aphelios, siguiendo las indicaciones de Caitlyn.

—. Si no encuentran a Sett antes de mañana, no aseguro que su amigo pueda aguantar por mucho más tiempo. — fue la parte de la conversación que le oculto a Kayn. Era suficiente que uno de los dos llevará esa carga.

—. ¿Qué hay de mi energía? — preguntó con cautela, procurando no gritarle como había hecho antes.

—. Si responde bien a la de Kayn puede que esté listo para recibir la tuya. — contestó, pero su voz no sonaba alentadora. —, pero puede que no sea suficiente.