✹ SALEM ╱ a draco malfoy fanfiction
↳ ❛ ¡ 𝐘𝐨𝐮'𝐫𝐞 𝐥𝐢𝐤𝐞 a mystery
just waiting to 𝐛𝐞 𝐬𝐨𝐥𝐯𝐞𝐝. ! ❜ 𓂅‧₊˚
✩.*• ──► 𖤐 ⋮ En donde Margo Lovett tiene más poder del que ella alguna vez esperó o donde se...
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CUANDO REGRESÉ A MI DORMITORIO esa noche, una carta me estaba esperando encima de mi escritorio.
Inmediatamente supe que era de mamá y papá antes de recogerlo.
Estimada Margo,
Me alegra ver que estás viva y bien. ¡Tu madre y yo empezábamos a preocuparnos de si te habías ahogado y muerto por culpa de alguna tarea!... Solo bromeando, querida.
Ambos recibimos tu carta con respecto a cierta persona y te aseguro que estoy feliz de estar de acuerdo en que siento lo mismo. Nunca me gustó ese sapo, lo siento, mujer. Tu madre está leyendo esto por encima de mi hombro y no puede dejar de reírse en mi oído. Puedes ver que a los dos no nos gusta mucho.
En cuanto a la Orden, todo va bien. Tu madre y yo nos estamos cuidando como siempre, espero que hagas lo mismo por ti y por los demás también. No tienes que preocuparte por lo que está pasando aquí, Mar. Lo tenemos todo bajo control.
¡No causes demasiados problemas! No quiero otra carta sobre cómo enviaste a otro estudiante a la enfermería de nuevo.
Los dos te amamos,
Mamá y papá
Me reí para mis adentros y negué con la cabeza. Solo mi papá sabría cómo hacer una carta divertida.
Me complació saber que él y mamá compartían una aversión por la vieja cara de sapo tanto como yo.
Me alegra saber que ella también tuvo ese efecto en los demás.
Abriendo el cajón de mi mesita de noche, saqué una caja. Era una vieja caja de regalo, completa con la tapa que puedes quitar y volver a colocar. No era demasiado grande ni demasiado pequeña, solo del tamaño adecuado para que cupiera la corona de un rey.
Volví a meter la carta en su sobre, dejándola caer en la caja que contenía mis cartas anteriores que recibí de mis padres este año. Cerré la tapa y la dejé a un lado.
Sí, me gustaba guardar mis cartas. La sensación de nostalgia que tengo cuando los releo fue simplemente un sentimiento que me llenó de euforia. Actualmente tengo una caja llena hasta el borde en el armario de mi casa, que contiene cartas desde el comienzo de mi segundo año hasta el cuarto.
Me quité el uniforme, me puse la pijama, me lavé los dientes y me metí en la cama. Sabía que no iba a dormir tan rápido como un bebé esta noche; normalmente no lo hacía. Nunca fui esa persona que inmediatamente se dormía tan pronto como su cabeza toca la almohada. Para una chica tan dormida, pensarías que ese era el caso.
