Cuando Tomioka camino hacia la habitación de Akasha como llevaba haciendo las últimas semanas, se llevó la sorpresa de encontrarse la cama vacía y a todos los habitantes vueltos locos en la finca mariposa.
— ¡Tomioka San!- Tanjiro exclamo al verlo, tenía un rostro desfigurado en angustia.— Es Akasha San, desapareció.
— ¿Que?
No podía ser posible, Akasha apenas y podía mantenerse en pie. ¿cómo pudo haber desaparecido? - Giyuu pensaba mientras veía expectante al niño de cabellos rojos.
— Vine a visitarla, pero no la encontré, pensé que estaba en el baño, pero cuando tardo bastante y Aoi fue a buscarla, no estaba.
— ¿Hace cuanto fue eso?
— Dos horas.
Fue cuando tomioka se involucró en la búsqueda de la mujer de mechas doradas, y cuando pensaba salir de la finca para ir en busca de las casas de los pilares, encontró una flor amarilla marchita y casi hecha pedazos en la esquina.
Dejando a los demás atrás, Giyuu observo el alrededor encontrando pequeñas ramitas y tallos de flores que Akasha anteriormente había usado para sus pulseras, dejando un camino que comenzó a seguir.
Minutos después la escucho, eran sollozos leves casi imperceptibles por el ruido que los demás hacían al buscarla a lo lejos. Se acerco con cautela con la mano aferrada al mango de su katana.
Esquivo a unas ramas y pronto en un pequeño hueco casi oculto, la encontró abrazada a sus piernas, su cabello enmarañado y lleno de hojas cubría casi por completo su cuerpo.
— Quiero estar sola. - Susurro ella al sentir la esencia de glicinias.
— Todos te están buscando.
— No quiero que me vean así. Ya tengo suficiente con que todos sepan que casi muero en mi primera misión junto a ti. — su voz se quebró. — Soy una vergüenza.
Sin emitir palabra alguna, Giyuu se sentó a su lado, con la espalda demasiado encorvada por las múltiples ramas, casi no cabía en ese lugar, pero no se quejó en lo absoluto. Ella trato de enfocarse en la esencia de glicinias para calmar su llanto, pero siéndole casi imposible apretó una hoja de papel entre sus manos.
— El maestro Denji murió. — susurro ella con dolor tras varios segundos, esperaba que de esa manera pudiera sacar el dolor de alguna manera, pero al decirlo en voz alta fue mucho peor. — Fue asesinado por un demonio, su protector trato de salvarlo, pero no lo logro...Ahora, ambos están muertos.
Tomioka sintió un tirón en el pecho al oír su voz quebrada, volteo a verla encontrándola aferrada aún más a sus piernas, parecía querer alejarse de todo, hasta de él. Solto un suspiro y torpemente coloco su mano en su hombro.
— Lo siento. - en verdad lo hacía.
Ella no respondió, y cerro sus ojos con fuerza soltando un par de sollozos más. Nadie hablo hasta que ella pareció poder hablar y cuando lo hizo, fue en un susurro.
— No sé qué voy a hacer ahora. ¿Crees que el patrón me saque de aquí?
— Vives en mi casa, en ese caso el que te tiene que sacar soy yo.
Ella volteo a verle con angustia, no quería quedarse en la calle. Absorbió la nariz y pregunto viéndole a los ojos casi con suplica.
—¿Podrías dejarme quedar en tu casa hasta que sepa qué hacer?
El dio un simple asentimiento a pesar de sentirse ligeramente mal por hacerle creer que la correría de su casa, él había querido bromear, sin embargo, era evidente que no era muy bueno en eso.

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GOLDEN
FanfictionEn el camino para cobrar venganza, puedes encontrar el propósito de tu vida. Irónico, ¿no? Fanfic de Kimetsu no yaiba. fanfic del pilar del agua, Tomioka Giyuu Los personajes originales le pertenecen a koyoharu Gotouge. Los personajes, Akasha s...