||•Minho•||
Estaba solo, sentado en el sofá mientras analizaba toda la casa.
Era de noche y jisung no vino por la tarde ya que dijo que debía estar con su padre porque se quedaba solamente tres días ahí y ayer se la había pasado conmigo.
Me sentía un poco mal, éste último tiempo solamente le preste atención a jisung y a las cosas que hizo pero descuide por completo lo demás, principalmente mis padres.
No se nada de ellos y es verdad, ahora mismo la charla que había tenido ayer con jisung resonaba en mi cabeza, sentía que iba a explotar porque tenía muchas preguntas y ninguna respuesta.
¿Me lo merezco? Antes tenia una actitud muy mala con ellos y quizás todo esto es mi propio karma pero, ¿justamente mis padres debían comportarse de esta forma?
Sinceramente solo sigo vivo por mis amigos y jisung que me mantuvo la cabeza ocupada. De no ser por ellos no estaría vivo en este preciso momento.
Como si lo hubiera manifestado, mi celular estaba sonando.
"Papá"
Mi corazón se frenó, casi me atoré con mi propia saliva debido al sobresalto. Me tomé unos segundos para observar la pantalla y mientras esto ocurría un millón de cosas pasaban por mi cabeza.
Temblando dirigí mi pulgar hacia el botón para atender y cuando lo hice acerque el teléfono a mi oreja para poder escuchar lo que sea que este hombre tenía para decirme.
- ¿Minho?
- P-papá.
Mis ojos se llenaron de lágrimas en un instante. Mis piernas temblaban y mi mano libre se mantenía firme apretando la tela del sofá como soporte.
- ¿Cómo estás?
¿Era tan descarado de aparecer luego de meses con un simple "Cómo estás"?
Mis ganas de mandarlo a la mierda incrementaron, quería decirle "pues no tengo dinero, ni comida, podría haber muerto y ustedes ni siquiera iban a enterarse al menos que recordaran que tienen un hijo", pero no fui capaz, aún me sentía culpable y merecedor de toda esta situación.
- Bien.
Fue lo único que pudo salir de mi boca aunque mi cabeza era un nudo de pensamientos.
- Nosotros estamos bien también, tu tío se está recuperando pero todo va demasiado lento. También les estamos dando una mano con el tema del dinero y quizás para el otro mes ya estemos en casa.
- Genial.
Hablé en tono bajo.
- ¿Cómo vas con el colegio?
- Bien.
Ya era un mar de lagrimas, estaba sollozando pero trataba de que él no lo escuche.
- Espero que no vayas metido a ninguno de los tuyos en mi casa.
Me lo esperaba, claramente me lo esperaba viniendo de este hombre.
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Astuto| HanKnow
Fiksi RemajaNadie sabia que detrás de esos anteojos y de su amable sonrisa se escondía un gran amante del sadismo y masoquismo. Donde Minho busca ayuda en matematicas y se topa con el nerd de su clase. - Te enseñaré matemáticas a mí manera -Habló el peliazul- C...