Capitulo 19

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@rodridepaul vía Instagram.

La tarde estaba espectacular, básicamente desde que subimos al Yate podía imaginarme que el recorrido que vayamos a hacer iba a ser tremendo

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La tarde estaba espectacular, básicamente desde que subimos al Yate podía imaginarme que el recorrido que vayamos a hacer iba a ser tremendo.

-Eh Cuti a ver si nos dejamos de noviar un rato y te pones algo de música- habló Licha a lo que él Cuti desde uno de los sillones le contestó con una seña para que los deje en paz.

-Dejalos pongo yo amigo- dijo Enzo poniendo algo de la T y la M.

Y obvio Ota ya empezaba a tirar los prohibidos.

-Me ayudas a preparar algo para tomar?- Lauta apareció por atrás mío mientras se iba dirigiendo a la pequeña barra que quedaba dentro del Yate.

-Justo me iba para afuera a tomar sol, pero preparamos eso y vamos juntos si queres.

-Si dale joya, me va- dijo por último.

Preparamos unos tragos bastante tranquis como para empezar, no quisimos hacer mucha mezcla porque lo de anoche no se iba a volver a repetir y yo me tenía que controlar un poco, Enzo no iba a estar siempre para salvarme de todas las que me mande.

Enzo, pensé.

Mientras ayudaba a Lauta no pude evitar mirarlo desde adentro del Yate; él estaba del otro lado de espaldas charlando con los chicos mientras reía y acomodaba la gorra para atras. Que chabon hermoso, un poco más se me caían las babas.

Decidí no concentrarme tanto en el hecho de que él en cualquier momento se iba a ir, no quería arruinar los dos dias que nos quedaban acá pensando en eso o incluso lamentándome.


La realidad es que no éramos nada, porque es así, pero pensar en no verlo tan seguido me la bajaba mucho. Estuvimos unas semanas viéndonos y hablando pero no era nada concreto, éramos amigos. Eso si, una especie de amigos con derechos por ahora y eso era todo.

-Pensar que cuando nos conocimos estabamos preparando tragos tambien- dijo Lauta terminando de colocar unos hielos.- En que pensas?

-Nada nada, me re colgué- le di una sonrisa volviendo un poco a la realidad.

-Mira límpiate acá que tenes una baba por Enzo- dijo haciendo una seña en la comisura de mi boca.

-Callate boludo- rei mientras agachaba la cabeza- pero igual a esta altura es innegable.

-Ya todos nos dimos cuenta, incluso  hace rato que no lo veía tan enganchado a Enzo, por eso yo ni me animé..-

Yo ni me animé.

No entendia lo que queria decir, incluso no sabia si estaba escuchando bien y quede recalculando.

-¿Cómo?- hablé, pero cuando me di cuenta ya se estaba dirigiendo hacia afuera donde estaban los chicos para entregarles los vasos a cada uno.

Percatándome de que todavía estaba con ropa me fui descambiando para quedar en bikini y así tomar un rato de sol.

Me dirigí a donde estaba Lauti, pensativa por la conversacion anterior, quien ya estaba tirado boca abajo tomando sol.

Apenas apareci por alla afuera recibí algun que otro piropo por parte de los chicos que me hacían reír. Son terribles estos. También pude divisar a Enzo mordiéndose el labio mientras que me inspeccionaba de arriba abajo.

-Che qué onda vos? me dejaste hablando sola- dije acostandome en uno de los sillones para tomar sol.

-Ah perdón no me di cuenta, queres protector?- Bueno, no me dio ni cinco de bola, pensé.

-Dale si, pásame. ¿Porque dijiste eso de que "te hubieses animado?"¿Animado a que?- hablé pasándome ahora si protector por los hombros y el pecho.

El suspiró- Veni que te ayudo a ver- dijo poniendo en poco de protector en sus manos para hacerme el favor y pasarme por la espalda.- Nada Em, pasa que sos una piba re hermosa, capaz si Enzo no se enganchaba con vos yo me animaba a hablarte. No te voy a negar que cuando te vi tenía ganas de comerte la boca, pero despues pinchó.

-Para, me estás hablando posta?- hablé ahora si dándome media vuelta para mirarlo a los ojos.

De un momento a otro, Lautaro se me estaba confesando y yo no cachaba una.

-Igual tranqui, nosotros somos amigos y yo tengo códigos, no te voy a tirar onda ni nada. Ya no hay chance- dijo volviendo a acostarse ahora si mirándome.

-Esta bien, no se ni que decir..- comenté mostrándole una pequeña sonrisa e internamente con un poco de alivio.

-Nada rubia, solamente espero que te cuide.

No volvimos a hablar del tema porque justo apareció Juli uniéndose. No se si este ya estaba en pedo o que, pero estaba bastante cariñoso. Ojo no es la primera vez, es medio flojito. En eso nos parecemos bastante.

Y así fue transcurriendo la tarde, todos pasando un buen momento, cantando, tomando, riendo y disfrutando de una tarde bastante linda pese a los 35 grados que hacian.

De vuelta para la playa el sol iba bajando poco a poco dando casi las siete de la tarde y el cielo se estaba pintando apenas de naranja. Me quede mirando esa belleza mientras dos brazos aparecieron rodeando mi cintura admirando el mismo paisaje que yo.

Sonrei porque no podia ser nada mas ni nada menos que ese chico de ojazos marrones que me volvia loca.

-Ojala estas vacaciones fueran eternas- dijo Enzo robando las palabras de mi boca.

-Ojala estas vacaciones fueran eternas- dijo Enzo robando las palabras de mi boca

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360 grados- Enzo FernándezDonde viven las historias. Descúbrelo ahora