Capitulo 29

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Al otro día me levanté decidida a ponerme las pilas con el tema de Europa, pensando en hablar con mi papá, después comentarle a mi hermana y por último y super importante el tema de la universidad, pero era un tema que no tenia que ser a la ligera.

En otro momento de mi vida estaba segura que si una propuesta así me llegaba de parte de mi mejor amigo y de mi chico, la verdad hubiese tirado todo a la mierda y me hubiese ido sin pensarlo. Pero hoy, con la cabeza un poco mas fría, sabia que esto conllevaba una responsabilidad bastante grande y que las cosas así no se dan asi facilmente.

Porque era eso, no era facil.

Me fui directo a la casa de mi papá, hace semanas que venía y lo tenía un poco abandonado, asi que estaba segura que me lo iba a reprochar.

Entré con la llave que todavia tenía de cuando vivía acá y normalmente todo permanecía en silencio, pero estaba segura en donde podía llegar a estar asi que me dirigí a un lugar en especifico sin dar mas vueltas.

-Hola pa- dije al entrar en oficina soprendiendolo- Uh, estas trabajando?

-Emma, me vas a matar un dia de estos-dijo sosteniendo su pecho- Si, ya termino con esto y te presto atención, dame un segundo. Mientras pedile a María que te haga un té o café.

-Puedo hacermelo sola igual-dije y el alzó los hombros volviendo a su trabajo.

Salí de la oficina directo para la cocina mientras pensaba detalladamente cada palabra para comentarle esa situación a mi papá.
Algo así como "Pa, me voy a vivir a Europa con Julián y con alguien que ni siquiera es mi novio pero nos tratamos como tal y nada eso".

Pésima idea venir sin haber ensayado algo convincente, pero ya estaba acá asi que no tenia otra opción que arriesgarme y que salga lo que salga. Seguí pensando algo para decir hasta que me sonó el celular haciendo que salte en mi lugar.

"Segura que no queres que te acompañe a hablar con tu papá? Capaz es mejor, no tengo problema".

Sentí un poco de alivio al ver ese mensaje de Enzo y la verdad que en este momento lo necesitaba, no podía con todo esto sola. Así que le respondí con la ubicacion esperando a que, milagrosamente se avive y venga lo mas rápido posible.

Terminé de preparar el té mientras sentía que me teblaban las manos de los nervios y me dirigí de nuevo a la oficina y ahí estaba mi papá esta vez hablando por telefono con una persona, seguro de la empresa que él manejaba, no estaba segura y tampoco le di demasiada importancia.

Al cortar se sentó en su sillón en frente mío mientras agarraba el té que le habia preparado.

-Como estas, Emma? Hace bastante que no venías a casa, ni una llamada- dijo y tomó un sorbo de su té.

Era obvio, ya me lo esperaba.

-Estoy bien... y si, tenes razón, pasa que desde que volvió Juli de Europa no se despega de mi, es más, es raro que no este aca.- dije yo tomandolo como excusa

-Vi por las noticias que le esta yendo bastante bien allá, bien por él, siempre fue muy bueno en el futbol. Le tenes que decir que venga a comer algun día- habló mi papá.

-Si, en realidad, justo te venía a hablar de eso..e-eh.. yo..mira..-dije pero al instante fui interrumpida por el timbre- Yo voy- hablé casi corriendo hasta la puerta.

Dios salvame.

Y del otro lado estaba él, tan hermoso como siempre.

-Hola-dijo mientras que con una sonrisa se acercaba para darme un beso.

-Hola. Pasa, dale -dije corriendome para que pueda entrar. Él por su parte se dedicó a inspeccionar ese lado de la casa.

-Fua alta casita tenés-dijo Enzo con la mayor tranquilidad del mundo mientras que yo casi que temblaba.

-Emma, que pasa que tardas tant...¿que hace Enzo Fernandez en mi casa?- la voz de mi papá nos sorprendió a ambos y Enzo rapidamente se separo apenas unos centímetros.

Ay dios, que se me baja la presión. Si, algo de todos los dias que Enzo Fernandez este en tu casa.

-Señor, un gusto- Enzo se acercó con amabilidad extendiendole la mano y mi papá la estrechó con normalidad devolviendole el gesto.

Enzo siendo tan educado, me reí internamente, por lo general no pasaba.

-Hija, estas acá? Despertate -me avisó mi papá saludandome con la mano.

-Eh, si, perdón. Bueno, Enzo él es mi papá y pa, ya lo conoces- dije algo rápido.

-Si amor, recién nos presentamos mientras vos volabas- habló Enzo con normalidad.

Tanto yo como mi papá abrimos los ojos y lo miramos a Enzo quien enseguida se rescató de lo que habia dicho y se hizo por atras, dandose cuenta demasiado tarde. Que pibe boludo.

-"Amor"?-preguntó mi papá alzando las cejas ahora mirandome directamente.

No, listo. Tragame tierra. No quiero vivir mas.

360 grados- Enzo FernándezDonde viven las historias. Descúbrelo ahora