Capitulo 23

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Me dirigí a la puerta y abrí encontrándome con esa gran sonrisa que me tenía enamorada. Lo inspeccioné de arriba a abajo y traía unas bolsas, seguramente con comida.

-Hola wacha hermosa- dijo Enzo

-Enzo.. qué haces acá? Nos vimos esta mañana- dije riendo y arrimando un poco la puerta ya que todavía estaba mi hermana ahí.

-Te extrañaba- habló levantando los hombros- Compre pizza y también helado de ese sabor asqueroso que te gusta, kiwi. Me dejas pasar o..?-

-Si obvio, pasa..- me corrí dandole el paso, después de todo había venido hasta acá- Enzo ella es mi hermana Amelie

-Mucho gusto, Enzo- dijo ella extendiéndole la mano a lo que él le correspondió y sonrió un poco tenso.

Seguro no se esperaba que esté con alguien a casa.

-Me esperas un toque en la cocina, amor?- le hablé bajito está vez y el asintió dándome un pico.

-Yo ya me voy yendo Emma, no te molesto mas, estamos hablando si?- habló mi hermana despidiéndose

-Dale, nos estamos hablando- le respondí y desapareció por la puerta.

Cuando fui para la cocina Enzo estaba colocando unas porciones de pizza en el plato, literalmente ya parecía que vivíamos juntos. Con Juli también, que raro que no estaba acá.

-Gracias por traer todo esto, me alegraste el día- le dije abrazándolo por atrás mientras él seguía cortando la pizza.

-De nada rubia. Era tu hermana? No sabía que tenías - habló el.

-Si, nunca la mencioné creo, hoy en realidad apareció de sorpresa para hablar unos temas..-

-Pero está todo bien? Pasa algo? Porque si no me iba- dijo el ahora si mirándome.

-Algunos temitas familiares pero quédate tranquilo. Posta me alegra mucho que hayas venido porque ya te estaba extrañado un poquitito- hable rodeando su cuello

-Y yo? no tenes idea, incluso todavía estoy cansado por el viaje pero necesitaba verte un rato- seguido de eso me robó un beso lento con mucho amor.

Una vez que nos separamos volví a hablar- Sabías que aparecimos en la tele?-

Enzo me miró extrañado y se quedó pensando unos segundos

-Igual sólo te ves vos abrazando a alguien, apenas me veo yo. Fue esa vez en el Yate cuando estábamos volviendo- volví a hablar.

-Uh boluda, la peor, que se busquen una vida- habló y luego dio un suspiro cansado.

Sin controlarlo se me formó una mueca, capaz no quería que lo vean conmigo y tal.

Pero al segundo se percató casi leyendo mi mente.

-Igual ojo, no me molesta que nos vean juntos, unas ganas de presumirte tengo, pero es por vos no quiero que te empiecen a joder con las fotitos.

Buen punto.

Al ratito estábamos acostados en el sillón ahora comiendo el postre, mientras una película de acción se reproducía; solo por esta vez lo dejé elegir.

Veía que Enzo movía la pierna a cada rato como si estuviera nervioso, pero no me atreví a preguntar si pasaba algo. Igualmente para ser sincera ese gesto ya me estaba poniendo nerviosa. De todas formas seguía muy atento a la película, así que cuando termine le iba a preguntar qué onda, si pasaba algo.

-Enzito- dije mirándolo.- Pelotudo, estás llorando? Es una película de acción.

-No estoy llorando, decís cualquiera déjame- habló esta vez limpiándose las lágrimas

-Mmm, vos decís? y eso de ahí que es?- hable regalándole una sonrisa.

-Deja de molestarme-rió- Veni acá- dijo para que me siente a upa suyo.

Me levante y despacio me senté a horcajadas- No lloras por la peli, no?- pregunté acariciandole el cachete.

Si algo sabía de Enzo es que era muy mal mentiroso, cuando le pasa algo se le nota enseguida. Pero llorar nunca lo vi, pensaba que no era de tristeza, capaz sentía estrés, pero se que no lloraba adelante de nadie por lo tanto para mí era una sorpresa esto y también algo preocupante.

-Mitad y mitad- dijo con media sonrisa.

Dio un suspiro largo y volvió a hablar- Emma mira recibí un mensaje anoche y adelantaron las fechas de entrenamientos con el Benfica, así que.. me voy a tener que ir antes de lo esperado. No es algo que yo decida pero..- aseguró, pero no pudo continuar.

Su voz sonaba triste, y por mi parte no supe describir a la perfección lo que sentía en ese momento, no sé si era enojo tristeza o qué, pero no quería ponerme a llorar y hacerlo peor.

Sólo me limite a abrazarlo y él me correspondió el abrazo apretándome más fuerte contra él mientras que me susurraba un perdón tras otro apenas audible.

No verlo por cuatro meses. Sentía que se me venía el mundo abajo.

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Buenass, disculpen por tardar tanto en actualizar. Estoy enferma🤧 pero voy a tratar de no atrasarme.

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360 grados- Enzo FernándezDonde viven las historias. Descúbrelo ahora