360 grados- Enzo Fernández

Capitulo 34

Enzo

-Para boludo, descansemos un toque- dije agarrando la botella con agua.

-Sos re flojito Enzo- habló Julián bajando una de las pesas y agarrando su botella.-Escuchame, hablé con Lautaro.

Rodeé los ojos.

-No quiero saber nada de ese pelotudo- dije

-Bueno escúchame igual, hablamos y nada, me dijo que estaba re arrepentido después de lo qué pasó.

-Y vos le crees? Dale amigo-hablé soltando una risa irónica.

-No sé Enzo, lo que sí sé es que ustedes se van a seguir viendo en los entrenamientos de la selección, así que lo mejor va a ser te olvides de eso, porque te conozco a vos y se que se van a terminar agarrando.

-Ya hablé con Emma, ya fue todo- dije alzando los hombros- Pero por más que esté arrepentido como dice, no fue capaz ni de mandarme un mensaje pidiéndome perdón ni a mi ni a Emma, así que muy arrepentido no estaba.

-Bueno en esa tenes razón- aseguró Julian.- Cambiando de tema, te voy a decir algo de lo que capaz me arrepienta después...

-Uh, que pasó ahora?- dije prestándole atención.

-Me alegra verlos tan bien a ustedes dos, posta. Emma esta feliz, a vos te veo mucho mejor.. cambiaron muchas cosas, pero para bien- dijo palmeándome la espalda.

-La notas más feliz? Posta me decís?- pregunté esta vez.

-La conozco más que nadie, así que créeme que si- dijo haciendo una sonrisa de lado.

-Gracias amigo, la verdad es que si.. ella también me hace muy feliz. Todavía sigo esperando por el tema de Europa, encima ya falta re poco, te juro no quiero dejarla tantos meses.

-Esperemos, vos tranqui, tengo fe todavía- dijo Juli ahora levantándose para así seguir con los ejercicios.

———
Emma

-Ya voy- dije mientras corría con la planchita por el depto- Desde cuando tocas la puerta vos?

-Ah si, tenes razón- dijo pasando de una siguiéndome a la pieza.

-Me decís a donde vamos? No se ni que ponerme- dije revolviendo el ropero, Enzo ya estaba acostumbrado a mi quilombo.

-Por mi no te pongas nada- habló desde la cama.

-Dale boludo- conteste soltando una risa.

-Cualquier cosa boba, estás linda con todo.

Finalmente me puse algo básico y cómodo, total éramos sólo nosotros dos.

Enzo condujo un buen rato por la ruta mientras que íbamos escuchando algunas canciones de su playlist.
Se hacía el malo pero adentro del auto muchas veces escuchaba que cantaba una que otra canción de Harry. Pero no lo iba a molestar porque yo también me re enganchaba, así que bancabamos.

Una vez que estacionó el auto fue en una zona bastante oscura desde nuestro lado, con algunos árboles al rededor, pero unos metros más adelante se podía ver claramente la ciudad iluminada por los edificios de allá lejos y la luna y estrellas desde en el cielo.