Capítulo 1

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Marinette al fin sabía lo que era ser una joven de bachiller sin responsabilidades de superheroína, había retomado sus pasatiempos, salía al cine, pasaba tiempo con sus amigos, diseñaba para la banda de Luka y también, se había acercado al chico de ojos verdes de la que estaba enamorada desde el instituto. 

—Vivir sin akumas contra los que luchar es lo mejor del mundo Tikki— dijo entusiasmada mientras que guardaba sus materiales para ir a la escuela—. Nada de peleas ni golpes, solo tranquilidad y armonía.

—Talvez por qué las personas van perdiendo el miedo de que alguien tome control de ellos al dejarse llevar por sus emociones, aun si estas son negativas— explico alegremente la pequeña kwami mientras guardaba algunos macarrons en la bolsa de Marinette, ya no necesitaba recargar energías después de transformar a su portadora, pero aún le gustaba comer—. Ahora se arriesgan sin temor a las consecuencias emocionales. —Las palabras de Tikki hicieron eco en Marinette, dándose cuenta de que, si todos estaban sintiendo plenamente y dejándose llevar por sus emociones, ella también podía hacerlo.

— ¡Eso es Tikki!, todos están arriesgándose, yo haré lo mismo. –La pequeña criatura miro confundida a Marinette esperando a que siguiera hablando pues no entendía a que se refería—. Hoy voy a declararle mis sentimientos a Adrien, ya pasé mucho tiempo temiendo a las consecuencias de HawkMoth, pero ahora que no está él no hay nada que temer, nadie saldrá lastimado así que me le diré que quiero, luego nos casaremos, tendremos tres hijos y un hámster llamado...

—Marinette, ¿no crees que primero tienes que confesarte a Adrien y ver si él te quiere de la misma forma? – No había pensado en esa opción, pero Tikki tenía razón, Adrien Agreste podría corresponder a los sentimientos de Marinette o bien, le podía decir que él no sentía lo mismo y que solo eran buenos amigos. Esa posibilidad nubló la mente de la chica de coletas azules, cosa que para la kwami no pasó desapercibida—. Pero no dije eso para desanimarte, solo dejé claras las opciones para que no te hagas ilusiones si las cosas no resultan como tú lo piensas.

—No importa si las cosas no salen como yo pienso Tikki, he pospuesto esto mucho tiempo y ahora es la oportunidad de hacerlo— dijo indicándole a su kwami que entrara a su bolso mientras cruzaba la escotilla de su habitación—. No es momento de dudar, sino de ser valiente, pero mientras vamos a la escuela, ya vamos tarde. — Y así, segura de sus sentimientos, la aspirante a diseñadora se fue corriendo a la escuela decidida de confesarse al joven modelo, nada podía salir mal era Ladybug, portadora de la buena suerte ¿Cierto?

El PASADO NOS ALCANZA  [Miraculous Ladybug]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora