El PASADO NOS ALCANZA [Miraculous Ladybug]

Capítulo 19

Verano 2019

He descubierto más de la industria de la moda durante estas vacaciones trabajando de tiempo completo con Audrey que en los 2 semestres en la Facultad, pero Chloe dice que es normal porque son los primeros y que deben enseñarme lo básico, aunque ya lo sepa, además de que debo aprender a hacer contactos, pero yo ya tengo al contacto más grande de la industria, su madre.

Realmente admiro lo que esa mujer ha logrado, su nombre esta sobre el nombre de todos y puede colaborar con quien ella quiera, hace poco me di cuenta de algo que supongo era muy obvio, siempre había creído que la publicidad en cine solo se hacía con productos como alimentos o grandes supermercados, pero hace poco Audrey colaboro en una película donde ella diseñó el vestuario de los protagonistas, fue grandioso ver su trabajo en la pantalla grande y espero que yo algún día pueda hacer algo similar.

—Esto no tiene nada de interesante, ¿de verdad creía que aparecían las etiquetas de la ropa solo porque ahí estaban? Debió prestar más atención a esos semestres, tal vez ahí se lo dijeron.— Desde que llegaron de la sesión de fotos de Adrien habían estado leyendo el diario, aún mencionaba las pesadillas, pero no era ninguna información nueva, estaba haciendo amigos, la presa le tomaba fotos con cada persona que saliera y en cada lugar al que fuera, hablaba con Chloe porque ella sabia mejor como se vivía siendo el centro de atención, también acompañaba a Audrey a algunos eventos y tenía pequeñas participaciones en la revista. Todo eso era muy interesante para Adrien, pero no para Plagg.

—Por favor Plagg, no es como si tú lo supieras todo.

—Claro que lo sé, sería un desperdicio llevar tantos siglos existiendo y no saberlo todo. Aunque claro, mi especialidad es el conocimiento en quesos. — Dijo mientras se llevaba a la boca un trozo de camembert.

—Claro, eso se nota.—Dijo Adrien con Ironía—. Admito que cuando te conocí creí que pensabas con el estómago en lugar del cerebro, mira que tratar de comerte el futbolito. — Recordó su primer encuentro mientras pasaba la página.

—Bueno, esa vez fue diferente, te recuerdo que estoy condicionado a estar presente en el mundo humano solo con un portador, y yo llevaba 200 años sin salir, así que es entendible mi sorpresa, la última vez que vi el mundo humano no había futbolitos.

—Bueno, pero ahora llevas más de 10 años libre y sigues explorando la casa, parece que en cada salida encuentras un objeto nuevo que no sabes que es.

—No llevo 10 años explorando la casa, a lo mucho llevo 3, y no es mi culpa que tu casa sea tan grande, simplemente no tiene sentido.— Comento algo indignado por la acusación.

—Si lo tiene, por algo es una mansión, creí que habías estado incluso en castillo, esto no debería ser raro para ti, estás acostumbrado a vivir en casas muy espaciosas.

—Si bueno, tenía la obligación de contarles mis hazañas a los portadores y en cuanto se enteraban de lo de la Torre de Pisa ninguno de ellos me daba libertad de andar por donde me placiera, así que nunca pude explorar como quisiera un castillo. —Al recordar su pasado el kwami no pudo evitar entristecerse un poco, pues tener metros limitados de movimiento no era la mejor vida que se le podía dar a un ser de su naturaleza. —Pero no quiero hablar de eso, fueron tiempos estrictos y la calidad del queso no era la mejor. —dijo pasándose el amargo sabor que le provocaron los recuerdos con un enorme trozo de queso.— Pero a lo que me refiero es que a veces llego a habitaciones que parece que ya no están en la mansión, como si estuvieran fuera.

—Alguna vez has intentado encontrar su ubicación por fuera, si lo haces verás que sigue estando dentro de la mansión, tal vez sea como el salón de bailes, nunca creí que un salón tan grande estuviera entre las paredes, puede ser que ese sea el caso de algunos de los cuartos que has encontrado.