Capítulo 4

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Todo parecía perfecto hasta que un trueno saco a ambos de su ensoñación haciendo que Marinette oprimiera el botón del paraguas lo que provocó que se cerrara abruptamente sobre ellos, dejándolos atrapados dentro, lo cual provocó las risas de ambos.

—Entonces ¿nos vamos? — Se animó a decir Adrien mientras acomodaba el paraguas.

—Sí, vamos— dijo la chica mientras le pasaba el paraguas a Adrien— Será mejor que lo sostengas tú, ya sabes, para evitar accidentes—. Él conocía lo torpe que podía ser ella, así que lo tomo.

—Si es para evitar accidentes entonces también dame tu mochila, tal vez se te caiga en un charco y tus cosas se terminen mojando. — Ella fingió poner cara de ofendida, pero sabía que tenía razón así que se la dio también. Después de eso se encaminaron a la casa de la chica conversando de cosas sin importancia, pero que a ellos les resultaba lo más interesante del mundo, tanto así que no se dieron cuenta de que ya estaban en la esquina de la casa, lo cual no era extraño, ya que estaba muy cerca del colegio.

—Vaya, vives cerca, bueno sabía que estabas cerca, pero nunca había caminado hasta aquí, creo que ya te puedo dar tu mochila, ¿lo sostienes? —Le pregunto mientras le regresaba el paraguas el cual como si de una broma cruel y ridícula se tratara, los volvió atrapar.

—Esto tiene que ser un chiste, dos veces el mismo día— Dijo como si reclamara a alguien por su mala suerte a la vez que tomaba su mochila y le regresaba el paraguas.

— ¿Tu relación con los paraguas no es muy buena cierto? Cuando te conocí se cerró sobre ti y ahora también, dos veces, solo que me atrapaste contigo. —Ante eso, la portadora de la buena suerte solo pudo mirarlo atentamente y una idea cruzo por su mente, esta era su oportunidad de decirle sus sentimientos, no había nada que los interrumpiera ni ninguna situación embarazosa para tener que decir que esto era una broma.

— ¿Adrien? ¿Puedo hablarte de algo? — Adrien asintió a lo que Marinette continuo—. En aquella ocasión, el que me atrapo fuiste tú, con solo ofrecerme un paraguas y tu amistad, me hiciste ver al chico amable que está bajo el modelo serio y reservado— dijo en un tono tranquilo que estaba cargado de emociones contenidas, pero que si quería lograr algo debía ir liberándolas poco a poco. Adrien la vio con la cara que siempre ponía cuando le decía que era solo una amiga, con una mirada llena de ternura y se giró para quedar de frente a ella mientras le decía.

—Marinette, mi mejor amiga— suspiro negando mientras decidía si corresponder o cortar definitivamente, pero recordó la amenaza de Plagg así que continuo con lo que Marinette había iniciado.— Eres solo una buena amiga.— Cuando la chica lo escucho sintió que algo se comenzaba a romper dentro ella, pero él se apresuró a sujetar su mano con firmeza y siguió hablando con un tono tan dulce que tranquilizaba a cualquiera— Repetí esa frase tantas veces con la intención de engañarme a mí, no podía permitirme tener sentimientos por ti, no quería que creyeras que estaba confundiendo nuestra amistad porque siempre creí que no era el tipo de chico que podría gustarte. En ocasiones llegué a pensar que te ponías nerviosa porque te gustaba, pero siempre me dejabas en claro que era porque tú eras diseñadora y yo un modelo hijo de un importante diseñador, dejando claro que solo eras una fan.

—Y tú con tanta facilidad me creías, muchas veces traté de decírtelo, pero solo causaba una enorme incomodidad entre nosotros que terminaba diciendo que era una broma que salía mal— confeso algo ruborizada a lo que el rubio solo pudo reír. — Pero lo que trataba de decirte era cierto, mis sentimientos son ciertos, lo que trato de decir es que... —se interrumpió para levantar la mirada hacia el rubio y poder verlo a los ojos. — Te quiero Adrien.

—Al fin puedo escuchar esas palabras de tus labios, no sabes cuanto espere —dijo mientras se acercaba a ella. –¿Te molesta la lluvia? — Una risa nerviosa salió de ella al tiempo que negaba, él cerró el paraguas y lo soltó para poder tomar mejor a Marinette y con una mirada que podía enamorar a cualquiera le pidió permiso para hacer algo que los dos anhelaban— ¿Puedo? — Ella asintió mientras ambos cerraban los ojos cuando sus labios se unían en un beso que confirmaba lo que sus palabras habían expresado. Y como si el destino les hubiera dado el tiempo exacto para declararse, al romper el beso el teléfono del chico comenzó a sonar y Adrien se apresuró a responder.

Cuando termino la llamada Marinette pregunto inmediatamente con algo de preocupación. —Dime que no te cause problemas.

—Acabas de hacerme el chico más feliz de París por corresponder a mis sentimientos, no podrías causarme problemas, aunque lo intentaras— dijo con voz suave— Era Nathalie, me dijo que usaron el chofer y tuvieron un contratiempo, pero ya está llegando por mí. — Dijo al ver el auto negro frente a él.

—Por un momento creí que mi mala suerte te estaba afectando.

—Claro que no linda, el que porta la mala suerte aquí soy yo— dijo mientras le guiñaba con una sonrisa, Marinette no pareció entender a lo que se refería y él no iba a explicarle. — En fin, me tengo que ir, tengo lecciones de piano, me gustaría seguir contigo, pero sabes que mi padre es exigente. 

—Entiendo y gracias por acompañarme— Le dijo a la vez que lo abrazaba, el tardo un poco en reaccionar, pero también la abrazo. — ¿Confundí las cosas verdad? — dijo algo apenada, a lo que él, en un intento de despejar sus dudas, la abrazo con un poco más de fuerza.

—Claro que no, solo no estoy acostumbrado a las muestras de cariño, pero descuida, me puedo acostumbrar a esto. — Le dijo al momento de darle un beso en la frente. –Nos vemos mañana Marinette.

—Nos vemos mañana Adrien— dijo mientras veía como él se encaminaba a la puerta del auto. Estaba a punto de entrar a su casa cuando tropezó con algo en el piso— Espera, tu paraguas.

—Guárdalo, hoy no la necesito— dijo señalando el vehículo. — Tal vez la usemos en otra ocasión— Ella afirmó y él cerro la puerta del auto, luego bajo la ventanilla— Por cierto, te quiero.

—También te quiero. — Después de eso Marinette entro a su casa y Adrien se fue en el auto.

Después de algunos años al fin se habían confesado, la espera había valido la pena pues gracias a eso habían podido ser correspondidos, esta vez no era un sueño o una broma. Tampoco vendría ningún portador de miraculous a borrar la línea temporal porque su amor tendría consecuencias catastróficas que causarían un trauma en uno de ellos, simplemente es algo que el tiempo había estado posponiendo y que tarde o temprano tenía que pasar, después de todo se supone que estaban hechos el uno para otro.


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Dije que no siempre 2 pero pues hoy si por que el siguiente ya regresan los heroes ...o no?

Una disculpita por el atraso de viernes a domingo pero ajá, si les gusto recuerden votar o comentar

Los amo ✨ y nos vemos el próximo viernes...ahora si de verdad.

El PASADO NOS ALCANZA  [Miraculous Ladybug]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora