El PASADO NOS ALCANZA [Miraculous Ladybug]

Capítulo 5

6 meses después

La relación de Adrien y Marinette marchaba bien, Gabriel había aprobado la relación porque Adrien estaba madurando y después de su relación con Kagami Tsurugi hace algunos años no había sido visto con otra chica y los medios ya habían comenzado a hablar. Aún hablaban y era normal que lo hicieran pues se trataba del modelo más famoso de París y su novia, la hija de panaderos famosos en París.

HawkMoth no había vuelto a aparecer, pero eso no significa que todos descansaran de los akumas porque algunos aún les temían en sus recuerdos y otros, como Marinette, los veían en pesadillas.

—Si tan solo sintiera la desesperación que yo siento cada vez que llega la hora de dormir no se negaría a darme respuestas— grito Marinette mientras caminaba de un lado a otro en la sala del guardián, quien desde hace meses estaban tratando de encontrar una solución a las pesadillas de Marinette, al principio eran poco frecuentes y no les daba importancia, ya que creía que era algo normal después de lo que tuvo que vivir.

—Tranquilícese Marinette.

— ¿Qué cree que estoy tratando de hacer? Llevo mucho buscando tranquilizarme y cuando al fin creo que sé cómo hacerlo usted se niega a ayudarme— grito dejándose caer sobre sus rodillas como si estuviera a punto de llorar.

—Joven Dupain, de nada le servirá conocer su identidad, al contrario, solo empeorará las cosas. — Se acercó gentilmente a ella tratando de brindarle consuelo y con la misma calma de antes continuo. —Ya le dije que no se apresure, todo llegara a su tiempo.

Eso claramente no la hizo sentir mejor, ya que se levantó bruscamente y más enojada que antes. —No me interesa el tiempo, ya he esperado mucho. Y si con empeorar las cosas se refiere a que lo vuelvan a akumatizar eso no va a suceder, HawkMoth no ha atacado en meses y tenga por seguro que no lo hará en muchos más. Ya traté de hacerlo a su modo y no funciono— dijo dirigiéndose a la puerta. — Ahora lo haré al mío, el maestro Fu me nombro guardiana así que tengo derecho a saber quién está portando uno de mis miraculous.

—Él no dejará que lo sepas, va a negarse a revelar su identidad.

—Él siempre ha querido que lo hagamos. – Abrió la puerta y se transformó en Ladybug. – Hoy voy a saber quién es así tenga que arrancar el Miraculous de su mano.

Salió de la casa del guardián azotando la puerta y dirigiéndose a la Torre Eiffel con una frase que resonando en su mente "Nuestro amor le hizo esto al mundo, mi lady".

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— ¡Por favor Mi Lady! No sé qué es lo que te pasa porque no quieres contarme y no sé por qué el guardián no ha podido ayudarte, pero te aseguro que saber mi identidad no influirá en nada— dijo mientras esquivaba los ataques de Ladybug, la cual después de que se negara a su propuesta de revelar sus identidades se había puesto un poco violenta en un intento de quitarle su anillo.

—No lo entiendes Chat, no me pasa nada, solo necesito saber quién eres detrás de la máscara— dijo enojada y algo agotada por la pelea, ChatNoir era mejor peleador que ella y un poco más ágil, así que a pesar de que él solo la esquivaba ella se estaba cansando.

—No, no lo entiendo porque no me quieres explicar— grito al momento que la tiro al piso y se colocó sobre ella para inmovilizarla. — Tú entiende que no puedo decirte quien soy, confió en ti, pero aún no recuperamos el miraculous de la mariposa ni el del pavo real y aunque no han estado activos no voy a poner en peligro a los que amo Ladybug— explico algo fuerte de lo que ella esperaba.

Ante la acción del héroe Ladybug comenzó a llorar removiéndose bajo él para liberarse de su agarre, ahora su enojo se había ido y en su lugar estaba la frustración. —Por favor, no puedo dormir tranquila, las pesadillas me aterran y solo saber tu identidad me ayudará a solucionarlo, te diré mi identidad si es necesario— expreso llorando un poco más fuerte, Chat vio que ya no iba a intentar arrebatarle su anillo así que la ayudo a sentarse y en un intento de consolarla le dio un abrazo.

—Escucha bichito, si me lo hubieras pedido hace tiempo te lo hubiera dicho sin dudarlo, pero ahora no, no puedo. — dijo mientras acariciaba su cabello— Tengo a alguien a quien quiero mucho y su seguridad es mi prioridad, no me puedes pedir que la ponga en riesgo. Dime que te sucede y juntos lo resolveremos.

—No puedo decírtelo, no podría explicártelo. — dijo dejando que el abrazo del chico la reconfortara. — Perdóname, no debí atacarte.

— ¡Shh! Yo tampoco debí gritarte, pero era la única forma de que entraras en razón, ¿eres muy necia sabes? — Su tono ahora era un poco juguetón, lo cual era bueno porque aligeraba el tenso ambiente de hace unos instantes.

—Lo sé. Pero no tengo idea como lidiar con esto, tiene que ver con HawkMoth y algo que nos sucedió en el pasado, pero...

—Pero él no está, así que no hay de que preocuparnos. —La posición que tenían no era muy cómoda, al menos para Chat, ya que en algún momento de la conversación la chica subió a su regazo y él tenía que cargar sobre sus piernas con su propio peso y el de la heroína, por lo cual estaba dejando de sentirlas. — Sabes, aunque estoy muy feliz justo como estamos ahora me gustaría volver a casa usando mis piernas, ¿te importaría sentarte en la barandilla?

—Lo siento— dijo levantándose rápidamente algo apenada. — No sé en qué momento.

—Tranquila, aún puedo moverme. — Se levantó y se sentaron en la orilla de la Torre para poder disfrutar de la vista que la ciudad les ofrecía.

— ¿Chat? — pregunto algo nerviosa por lo que iba a pedir, cuando vio que él tenía los ojos cerrados disfrutando del ligero viento en su rostro decidió continuar. — ¿Me puedes abrazar? Creo que lo necesito.

Aun con los ojos cerrados hecho ligeramente la cabeza hacia atrás como si estuviera disfrutando de un Sol imaginario— Creí que no éramos ese tipo de pareja, antes incluso rechazabas que tomara tu mano— menciono un poco indiferente, al fin abriendo los ojos volvió a ver con un poco de burla a la chica a su lado. — ¿Qué ha cambiado Buginette?

Ella creyó que había notado sus intenciones o que se había dado cuenta de que tenía sentimientos por él, pensando en que responder él rompió el silencio entre risas. — Estoy bromeando, debiste ver tu cara. — Continuo riendo como si hubiera hecho lo más cómico del mundo.— obvio nada cambio, sé que tienes novio y que al fin estas con el chico que te gusta, y por suerte yo también.

Eso tomo a Ladybug con la guardia baja, y no fue precisamente la afirmación, si no el modo en que lo dijo— ¿Qué? — expreso muy sorprendida.

—Que estoy con la chica que me gusta. — Pero al ver la cara de la chica supo que eso no era lo que la había sorprendido. — No, no estoy con tu chico, ni siquiera estoy con uno... Agh, olvídalo, ven acá. — dijo mientras accedía a su pedido y la rodeaba con sus brazos.

—Para ser tan hablador la comunicación verbal no es tu fuerte. — Admitió riendo la peliazul.

—Solo en ocasiones, por suerte me conoces tan bien que me entiendes perfectamente. — Dijo poniendo un dedo sobre su nariz como si tocara una campanilla. Después de ese inocente gesto permanecieron en silencio durante un buen rato, disfrutando de su compañía mutua y de la calma que les ofrecía la ciudad.