Capítulo 44

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Jungkook

Jimin se quita la remera por encima de la cabeza. Mis ojos se posan en su cuerpo perfectamente trabajado, sus planos músculos del abdomen. Él se tira a mi lado en la lona sobre la piedra gigante y me observa allí de espaldas al sol.

— ¿Vas a hacerme un favor Jungkookie?

—Depende de que sea.

Esconde su cabeza entre sus brazos apoyados sobre la piedra y se ríe.

—Ve a convencerlos de que no nos vayamos mañana ¿sí?

—Estás loco, mi papá está que su cabeza explota y los padres de Jin están peor.

—Oh, vamos.

—No Jimin.

—Gallina.

Ruedo los ojos y me quito la remera por encima de la cabeza, me recuesto de espalda al sol y acomodo mis brazos al igual que mi novio para obsérvalo desde allí, él descubre su cara y me mira con un solo ojo.

—Dije gallina.

—Te oí.

—Ah, no dices nada porque sí que lo eres.

—JA JA JA, qué divertido.

Se ríe cuando vuelve a esconder su cabeza entre sus brazos.

—Ve a convencerlos, vamos.

—Ve tú. A ti nadie de ellos te odia.

— ¿Y eso qué? Tú tienes que dar la cara por todos porque tú eres el más hombre.

— ¿Y Namjoon qué?

—Namjoon es más gallina que tú, imagínate.

Alargo un brazo para golpearlo en el hombro. Se ríe a carcajadas.

—No soy gallina, tú eres él cobarde que no quiere ir y me mandas a mí.

—Idiota.

— ¿Quieres que vaya yo?

—Sí, ve tú.

—Genial.

Se pone de pie rápidamente y baja de un salto de la piedra.

— ¡Jiminie! —Le grito sentándome. Se da media vuelta con el ceño fruncido y me mira colocando una de sus manos sobre su frente para tapar el sol—. Camina despacio así puedo contemplar tu magnifico culo.

—Púdrete —dice riéndose.

Me río también y me quedo allí sentado cuando vuelve a darse la vuelta para dejarme su cuerpo en un minúsculo traje de baño solo para mis ojos. Llega hasta los mayores y sonríe con esa sonrisita de niño pequeño que consigue lo que sea aleteando sus pestañas. Vuelvo a recostarme bajo el sol y cierro los ojos, no sé si volverá en menos de diez minutos y si realmente va a realizar una buena escena de niño caprichoso. El sol adormece más mi cuerpo sumiéndome en un relajado sueño, pero no estoy del todo dormido, solo demasiado relajado. Siento cuando Jimin vuelve y se sienta sobre mi espalda.

— ¿Y? —Pregunto con la cabeza escondida entre mis brazos.

—Van a pensarlo —dice con sorna—. Mi mamá es la persona más estúpida que he conocido.

Una risa divertida escapa de mis labios. Jimin se recuesta sobre mí apoyando su cabeza sobre mi hombro y me besa en la sien.

—No quiero volver a casa, me gusta estar aquí con todo ustedes. A pesar de las peleas pasamos un lindo tiempo.

Asiento levemente con la cabeza. Él besa suavemente mi mejilla y se queda allí recostado sobre mi espalda. Cierro mis ojos nuevamente hasta que Jimin pesa más sobre mi espalda y me obligo a contener un insulto, pero Jimin sí que grita.

—Bájate Namjoon —dice riendo.

Ahora entiendo por qué de repente sentí que tenía un elefante sobre la espalda, porque Namjoon estaba sobre nosotros dos. Jimin se ríe y lo logra apartar de encima suyo para luego recostarse sobre su lona nuevamente.

—Eres un gordo —dice sin intención de ofender.

Apoyo mi cabeza sobre mi antebrazo y observo a mi amigo bajar de la piedra. Sus manos pasan por su pecho y luego las guarda en los bolsillos de su bermuda, se ríe divertido.

—Tengo ganas de hacer algo, pero no sé qué.

Jimin rueda los ojos y se sienta en la lona.

—Pues esta vez nadie va a hacer nada fuera de aquí, Namjoon.

—Eso lo sé. Me aburro, Jeons.

Jimin frunce el ceño desmesuradamente y luego ríe. Comienza a masticarse la uña cuando comprende el sentido de las palabras de Namjoon.

— ¿Jeons? —Pregunto.

Quiero que las mejillas de mi novio se tornen rosadas como cuando le susurro cosas pervertidas al oído. Quiero verlo retorciendo sus manos de los nervios y escondiendo su rostro sobre el hueco de mi cuello como suele hacerlo cuando se pone vergonzoso.

—Sí, tú eres Jeon y Jimin es tu novio, son Jeons.

Jimin se ríe tiernamente. Me siento en la lona al lado de mi novio y lo rodeo con un brazo, él se acerca un poco más a mí.

— ¿Qué pasa con Jin?

—Ni me lo nombres —dice alzando sus manos en el aire.

(...)

La noche cae sobre la ciudad y con ella llega el frío tranquilo del verano. Mi novio se pone una campera negra cuando salimos al patio de la casa, me toma la mano y se pega a mi brazo. Le suelto la mano para abrazarlo por encima de los hombros y atraerlo bien a mí, cierro la puerta principal y nos quedamos allí parados un segundo.

— ¿En serio vas a hacer esto por mí? —Me pregunta despacio.

No hay necesidad de gritar o hablar un poco más fuerte de eso. Estamos completamente solos y en silencio, en el patio oscuro de la casa vacacional bajo las estrellas brillantes.

— ¿Por qué no? Tú quieres acampar, vamos a acampar.

Me mira desde su altura natural, casi quince centímetros más pequeño que yo y sonríe tiernamente. Bajo mi rostro para besarlo en los labios suavemente y luego me estiro un poco.

— ¿Quieres buscar algo más o entramos?

—Entremos —dice como un niño pequeño.

Se muerde el labio inferior y camina rápidamente hasta la tienda de campaña. Sus ojos vuelan hacia el cielo despejado sobre el sauce llorón que cubre nuestra carpa, observo en la misma dirección que él y luego busco sus ojos con los míos. Se quita las zapatillas y entra en la carpa para cinco personas que hemos armado a plena luz del día. Hago exactamente lo mismo que él y al entrar cierro la puerta con el cierre.

—Oh, qué emoción —dice retorciendo sus manos.

Me río divertido antes de prenderme bien el cierre de la campera y meterme bajo las mantas. Jimin no tarda en copiar mi acción y se acerca a mí para rodearme con sus brazos.

—Eres el mejor novio.

—Y más te vale que el único.

Suelta una risa cargada de diversión.

— ¿Jugamos a algo?

— ¿Algo como qué? —Le pregunto alzando una ceja.

Sus mejillas no tardan en cobrar color. Se ríe y esconde su rostro en el costado de mi cuerpo, también me río por su reacción.

Unas Locas Vacaciones (Kookmin) [Adaptación]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora