Unas Locas Vacaciones (Kookmin) [Adaptación]

Capítulo 18

Jungkook

Cuando llegamos al lugar, está lleno de gente. Hay una fila de más de media cuadra. Bajamos del auto y Tae se apresura a tomarle la mano a Yoongi. Creo que Namjoon y Jin ya han bajado agarrados de la mano. Jimin se apura para llegar al lado de Jin, pero lo tomo por la cintura y lo hago llegar hasta mí. Aprieto su espalda contra mi pecho, él se remueve nervioso e intenta zafarse.

-No seas el farolito.

-¿Qué? –Dice intentando llevarme a rastras.

-No vayas a ponerte al lado de ellos. Relación, es de a dos, Jimin.

-No quiero estar contigo.

Lo suelto y por sus intentos de zafarse, cae de rodillas al suelo de la vereda.

-Mierda, Jeon, sí que eres estúpido y te falla la cabeza.

Se pone de pie rápidamente y bajo la mirada a ver sus rodillas. No lo he lastimado, por suerte. Se acomoda el pantalón y sale caminando enojado hasta la fila para alcanzar a nuestros amigos. Me río y corro para alcanzarlo.

-No le veo la gracia.

-Bueno, perdona. Tú estabas intentando que te soltara, no me digas a mí.

Frunce el ceño y me fulmina con la mirada. Luego se coloca detrás de Yoongi en la fila y saca un espejito de su bolso. Analiza su maquillaje, me pongo detrás de él y le sonrío cuando me encuentra en la periferia del espejo.

-Tonto.

-Vamos, te gusta que sea tonto –susurro.

Se muerde el labio inferior y baja el espejo para cortar el contacto visual, lo guarda en su bolso y se acomoda la camisa de seda.

-¿Somos pareja?

-No.

-Digo... esta noche. No para siempre, eso nunca.

-Nunca digas nunca, Jungkook.

-Oh, que divertido –digo con ironía-. ¿Somos?

-No.

Ruedo los ojos y le tomo la mano. Él se sacude para zafarse justo cuando la fila avanza, lo llevo a rastras y se enoja aún más.

-Ya, en serio.

-¿Pelean así en el ático? –Pregunta Yoongi dándose la vuelta.

-Oh, santa mierda, Tae –dice, abriendo mucho sus ojos-. Están agarrados de la mano –grita.

¡Qué maldito exagerado! Jimin me suelta la mano rápidamente y no hago nada para volvérsela a tomar. Sus mejillas están rojas y sus ojos brillantes.

-Estábamos probando algo. Jungkook es...

-...hermoso, gracias.

-¡Qué engreído!

-Olvídalo nene, no ha cambiado en nada –le dice Tae a Yoongi y se dan vuelta.

-Estuvo cerca –murmuro.

-¿Qué cosa? Si fue real, Jungkook.

-Oye, no. Estábamos tomados de las manos por voluntad propia, no me digas que no te gusta que te toque porque me estarías mintiendo, enano.

-No me llames enano –dice entre dientes.

-Bueno ¿o no?

Sus mejillas se vuelven rojas nuevamente. Me río y le beso la mejilla. Así mejor Jimin, así mejor.

(...)

La música está a todo lo que da, la gente baila moviendo sus cuerpos al ritmo de ella mientras sacuden el cabello. Yo me encuentro sentado en la barra, con un trago en mano. Observo como Namjoon y Jin se están tocando, si... definitivamente se están manoseando en la pista de baile. Tae y Yoongi han desaparecido hace un rato ya, y yo estoy esperando que Jimin vuelva del baño.

-¿Vas a querer algo?

Giro en mi silla hacia la barra para ver quién me está hablando y veo a una rubia apoyando los codos y casi rozándome la nariz.

-N...no, gracias.

Me sonríe y veo uno de sus dientes manchados con pinta labios rosa. Está coqueteando, definitivamente y ese escote sí que le favorece.

-¿Seguro?

Asiento lentamente y ella no aparta su mirada de mí.

-¿Por qué tan solo?

-No está solo, perra –dice Jimin desde atrás mío.

Sonrío en mi interior y me giro a verlo. Apoya una de sus manos en mi hombro y se sienta a mí lado, muy cerca, muy, muy cerca. La rubia abre la boca con impresión y se da media vuelta gritándole a alguien como si la hubieran llamado de alguna parte.

-¿Así que no estoy solo?

-No estás solo, tonto ¿acaso no me ves?

Me río divertido y le paso mi trago.

-Yo no tomo.

Alzo una ceja y él contiene la risa.

-A que si hoy tomo, vas a aprovecharte de mí.

-A que no. Si la otra vez te cuidé re bien Jimin. –Hago morros.

-¿Dejarme durmiendo en el auto cerrado es cuidar bien?

Me río muy fuerte y él me golpea en el hombro.

-¿Somos pareja esta noche?

Asiente mientras toma mi vaso y se lo lleva a la boca. Me acerco más a él y le sonrío. Bueno, no es por ser egocéntrico, pero si hay algo que hace que tenga a todos a mis pies, es mi sonrisa. Oh si, se muerde el labio y cuando separa el vaso de su boca se ríe.

-Ya deja de hacer eso.

-¿Qué cosa?

-Eso, eso que haces todo el tiempo con tu sonrisa y tus ojos.

Se queda callado y se pone muy serio. Vuelvo a sonreírle.

-Ya, en serio. Deja de hacerlo Jungkook.

-¿Qué es lo que hago?

-Sabes que enamoras a todos con ese truquito, no soy el caso. Ya deja. –Aparta la mirada y al cabo de unos segundos me mira de reojo-. Oh vamos, ¿sigues haciéndolo?

-No sé de qué hablas.

Pero en realidad lo sé muy bien y eso quiero, que él caiga a mis pies. Si, lo he estado pensando mucho y creo que esto se está yendo de mis manos, si a mí me pasan cosas con Jimin, que a él le pase lo mismo.

-Sabes de qué estoy hablando. No voy a enamorarme de ti, deja ya de sonreírme así si no quieres que cometa una locura.

-¿Qué locura, cariño?

Frunce el ceño, no le ha gustado el apodo.

-Voy a besarte.

-Pues hazlo, no me opongo.

Una sonrisa asoma en sus labios y me contagia. Me muevo hacia delante y él se da vuelta para plantarme un beso en los labios. Sonrío en medio del beso, él también lo hace.

-Ah, bueno, bueno –sí, es la voz de Tae.