35

336 21 76
                                    

Cuando el sol se filtró por el nido ya era bastante de mañana, el bullicio del pueblo le inundó y se obligó a abrir los ojos solo para encontrarse atrapada entre la ala buena del arquero, el agarre era fuerte y la sostenían cerca de su pecho, levantó la mirada un poco moviendo la cabeza pero se detuvo cuando sintió su pico sobre ella, no quería despertarlo, se miraba demasiado joven con ese semblante relajado, y sus plumas era tan calidad y suaves como una almohada.

'La almohada más caliente y cómoda'

La imagen de ellos dos durmiendo en una cama mullida y extrañamente elegante llegó a sus ojos dejando salir un jadeo por la repentina oleada de sentimientos que llegaban, cada vez estaba recordando más, pero no logró enfocarse cuando el ruido de una garganta aclarando la obligó a dirigir su cabeza al umbral, allí en la entrada Teba los observaba con los ojos entre cerrados y las alas cruzadas frente de su pecho.

"Es agradable ver cómo cuidas de tu...Abuelo" Sabía que lo decía con ironía y un gesto burlón pero aún así se levantó de un solo salto intentando ocultar el sonrojo de vergüenza de sus mejillas, la habían atrapado en el acto y ya no tenía forma de escapar de ello.

"Tu herida ¿Cómo sigue?" Intentó cambiar de dirección la conversación sin mucho éxito el guerrero seguía observando a Revali por detrás de su espalda quién empezaba a moverse de poco a poco.

"Está mejor gracias, mi esposa Saki la curó adecuadamente al igual que la herida de Hart" Sus alas permanencia cruzadas frente a su pecho pero de alguna manera sus plumas alargadas se movían con impaciencia en la espera de una aclaración por lo que había presenciado.

"Es un alivio..." Dirigió su mirada al piso sin poder aguantar más la afilada mirada dorada del albino, abrió la boca un par de veces probando alguna palabra para comenzar con su explicación pero el ruido de la hamaca sofocó cualquier intento, estaba en problemas.

"¿Qué es todo este escándalo? ¿Acaso no se puede descansar en este lugar?" Link volvió a saltar sobre su sitio girandose de nuevo al campeón que se empezaba a enderezar con cierta dificultad soltando un gruñido de dolor cuando uso una de sus alas para lograrlo.
"Ah, eres tú, aún debo agradecerte por ayudar a Link a llegar a Medoh, vi tu estilo de lucha, no está mal"

"Eso es un honor viniendo de usted maestro Revali" Teba había inclinado un poco su postura a una pequeña reverencia que no fue bien recibida, el arquero chasqueó la lengua con cierta irritación mientras giraba la cabeza con la vista fuera del nido mirando a dirección de Hebra posiblemente para evitar ver al guerrero.

"Deja de tratarme de esa forma, ambos somos guerreros, uno mejor que otro pero..." Teba asintió con entusiasmo entendiendo lo que el campeón quería decirle, se había ganado su respeto con la batalla contra la bestia divina.

"Lo sé, pero usted se ha ganado ese título, además yo no hice nada, era mi deber detener a Medoh, poner a todos en el pueblo a salvo y al final fue Link quién lo hizo aún cuando no era su deber" Link a penas se percató cuando el guerrero se acercó a su lado dejando caer una ala sobre su cabeza en una pequeño juego despeinado los mechones de su cabello, se atrevió a reí un poco con el gesto cariñoso del mayor sin embargo Revali tornó su mirada afilada provocando que algo en ella se erizara y quisiera alejarse del tacto ajeno.

"Agradecería que alejaras tus sucias plumas de mi esposa, no creas que no he visto esas plumas rosas y negras tejidas en tu trenza, te gusta coleccionar personas" El tono era mordaz provocando que el orni blanco retrocediera un poco tal vez temiendo un ataque por el menor mientras levantaba ambas alas en señal de rendición.

"¿Esposa?" Teba preguntó parpadeando un par de veces, cualquier conclusión que hubiera llegado el guerrero seguramente no fue a esa ya que su pico se abrió un par de veces y miró a Link con una ceja alzada.

Evadiendo El Destino (Revalink)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora