Evadiendo El Destino (Revalink)

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Había cabalgado todo el día y toda la noche sin descanso, agradecía a Epona su increíble resistencia, solo era cuestión de minutos para toparse con el cuartel y agruparse con Urbosa, solo esperaba que Zelda se hubiera quedado a tras y no pensara en seguirla, más tarde cuando recupera a Revali pensaría en cómo disculparse y sobre todo como lidiar ante  las consecuencia de salir sin la autorización del Rey.

Cuando llegó al puesto de vigilancia dentro del cañón de Gerudo y la meseta de Nabooru ya era de mañana, bajo tan rápido como pudo de su caballo, escuchando un relincho de descanso de Epona, dio una suave palmada y se apresuró a entrar a la tienda del capitán, ignorando a los diversos caballeros que corrían de un lado a otro, fue ahí donde encontró a Urbosa de pie frente a una mesa extendida con un gran mapa ampliado de la región.

"Oh Link no esperaba que llegarás tan pronto, por el cálculo que realicé creí que te vería hasta la tarde" Sin importar estar a la vista de los demás soldados se acercó a Urbosa colocándose a un lado suyo negando con rapidez y firmeza al mismo tiempo.

"Entiendo, fue una salida apresurada, pero ¿Que puedo decir? Tú presencia aquí indica que nuestro mensaje llegó" La mirada de Urbosa era dudosa y un tanto afligida sin embargo rápidamente se recuperó tomando su postura de nuevo tras soltar un pequeño suspiro.

"Lo lamento pequeña vai, estábamos agrupados cuando nos emboscaron, no reaccione lo suficientemente rápido para darme cuenta lo que planeaban esas sabandijas, esos malditos no juegan limpio" Urbosa se miraba molesta, sus manos se aferraba a sus caderas como habitualmente lo hacían pero con mayor fuerza dejando notorias marcas en su piel canela y sus ojos estaban  con una mirada afilada cómo habitualmente lo estaba en medio de una batalla.

"Pero lamentarnos no funcionará de nada, ya tenemos varios sectores siendo rastreados, encontraremos a tu emplumado esposo tienes mi palabra" Agradeció sus palabras, pero no disminuía su preocupación cada segundo perdido era un segundo menos para Revali, ya se había enfrentado al clan Yiga anteriormente y sabía lo que eran capaces de hacer.

"Por el momento tendremos que ir a Gerudo, logré enviar un mensaje urgente por la madrugada, para que se desplegarán mis guerreras a través de todo el desierto en busca de alguna pista o señal que nos indicaran dónde lo tienen, y para nuestra fortuna creo que lograron  encontrar donde se enconden esas sabandijas" Link siguió casi corriendo a la mujer mayor fuera de la tienda, no esperaba que ya tuviera un plan de acción ni mucho menos que ya estuviera dando resultados, eso ayudaría a encontrar pronto a Revali pero aún así la preocupación latente por el arquero no desaparecía.

Cabalgaron todo lo que fue posible entre los cañones hasta la caballerizas a la entrada del desierto, tomando un breve descanso para poder adentrarse a las arenas calidad y sofocantes que conformaban el gran desierto de Gerudo.

En ese lapso Link aprovechó para poner a corriente a Urbosa de la situación del castillo, el estado en que había dejado a su princesa y sobre todo del amenazador mensaje pintado en la pared del área de entrenamiento de arquería dentro del castillo.

"Eso no nos deja mucho tiempo, el emplumado chico puede estar en graves problemas" La mirada de la Gerudo se había vuelto sería de golpe mirando fijamente su tarro con agua, mientras que de nueva cuenta para Link ahí estaba la culpa otra vez acechando, el sentimiento se había negado a dejar su pecho desde la aterradora noticia llegó a sus oídos y cada vez se sentía más pesado casi de una forma dolorosa.

"Esto sucedió por mi culpa ¿No es así?" Su voz salió sin pensar a penas un poco más alto de lo normal lo que sorprendió a Urbosa, quién solo la había escuchado hablar anteriormente en medios susurros y palabras claves, ella entendía el lenguaje de señas siendo este el medio por el cual más se comunicaba con ella, sin embargo alzo la vista de su tarro para pasarla sobre el caballero con interés.