𝐅𝐢𝐫𝐞 & 𝐈𝐜𝐞 |𝐃𝐫𝐚𝐜𝐨 𝐌𝐚𝐥𝐟𝐨𝐲| ✓

63. Vas a estar bien, ¿Me escuchas?

Dibuja un monstruo y luego pregúntate: ¿Por qué es un monstruo?

-Janice Lee

–Entonces, si no vas a hablar de eso, lo haré yo– le dije a Tracey camino a la cena. Estuve pensando en esta información todo el día, desde que Draco me dijo durante nuestra sesión vespertina de arreglo del armario en la sala de Menesteres.

–No sé de qué estás hablando– se encogió de hombros, pero la sonrisa en su rostro sugería que sí.

–Draco me dijo que usted durmió en los dormitorios de los chicos anoche. ¿Quiere dar más detalles sobre eso, señorita Davies?– Yo dije. Draco se veía bastante angustiado esta mañana, en parte porque despertó con una Tracey en la cama junto a la suya, toda acurrucada con Blaise. También había estado bastante nervioso porque Katie Bell había regresado a la escuela hoy. Temía que ella lo recordara. Sin embargo, había investigado mucho sobre la maldición que había usado, y era muy poco probable que ella lo hiciera.

–Bueno, eso es porque de ahora en adelante seré la señorita Zabini, señoritas– sonrió Tracey. Mi mandíbula cayó ligeramente ante la noticia.

–¿Finalmente tuvo las pelotas para invitarte a salir?– Daphne jadeó, con una sonrisa en su rostro.

–No, no lo hizo, así que pensé que podría hacerlo yo misma– Tracey se encogió de hombros.

–Espera, ¿Le pediste que fuera tu novio? Trace, me impresionas todos los días– Me enorgullecía de tener bastante confianza, pero ni siquiera me acercaba al nivel de Tracey. Ella simplemente le preguntó directamente y aparentemente había valido la pena.

Nos sentamos en la mesa de Slytherin y Tracey le lanzó un guiño descarado al chico en cuestión. Parecía estar bastante satisfecho con los nuevos desarrollos también. Noté el asiento vacío al lado de Blaise. ¿Dónde estaba Draco?

–Blaise, ¿Dónde está Malfoy?– Fruncí el ceño. Blaise se encogió de hombros, indicando que no tenía ni idea. Me sentí incómoda por alguna razón.

DRACO POV.

Tenía que encontrar a Ellie. Estaba entrando en pánico de nuevo y era peor que antes. Acabo de ver a Katie Bell en el pasillo y me miró, juro que me miró.

Si recordaba algo, estaba absolutamente jodido. Sería expulsado de Hogwarts y Dumbledore involucraría al Ministerio. Terminaría en Azkaban en una celda al lado de mi padre. Yo sería una decepción tan grande como él.

Esperé ansiosamente afuera del Gran Comedor por un rato, con la esperanza de que ella no hubiera entrado a cenar todavía. De esa manera podría llevarla a un lado por un tiempo y ella podría calmarme, como siempre lo hacía. Se aseguraría de que todo estuviera bien de nuevo.

Pero ella no apareció. Pasé una mano por mi cabello, temblando ligeramente por la sensación de ansiedad en mi pecho. Sentí como si alguien estuviera apretando mis pulmones mientras me golpeaba en el estómago al mismo tiempo. Estaba tan jodido.

No podía hablar con ella libremente en el Gran Comedor, porque sabía que Snape me estaba observando, especialmente ahora que Katie Bell había regresado a la escuela. Tal vez estar cerca de ella sería suficiente. Sería mucho mejor que estar parado aquí en el pasillo, sintiéndome como un idiota.

Tomé una respiración profunda y temblorosa y entré al Gran Comedor. La noté rápidamente, riéndose de algo que había dicho Tracey. Su risa era tan hermosa y pude sentir que los latidos de mi corazón se ralentizaban un poco al verla. Sin embargo, no pude mirarla por mucho tiempo, así que desvié la mirada. Y desearía no haberlo hecho.