𝐅𝐢𝐫𝐞 & 𝐈𝐜𝐞 |𝐃𝐫𝐚𝐜𝐨 𝐌𝐚𝐥𝐟𝐨𝐲| ✓

71. Eso es bastante hipócrita, ¿No crees?

Está bien si te caes y pierdes la chispa. Solo asegúrate de que cuando vuelvas a levantarte, te levantes como todo el maldito fuego.

-Colette Werden.

El resto del verano pasó bastante rápido. Me sentí mucho mejor después de mi cumpleaños. Por alguna razón, eso me había dado un aire fresco, un nuevo soplo de esperanza que me impulsó durante las últimas dos semanas. Me sentí más feliz, más contenta y más aliviada. Todavía pensaba en la situación de mierda en la que estábamos a diario, pero algo me decía que todo iba a estar bien.

El único problema era que esta nueva mentalidad me había permitido ver la situación desde una nueva perspectiva, con la mente clara, y me di cuenta de que pronto tendría que tomar una decisión que determinaría el resto de mi vida.

Sabía con certeza que no quería volver a vivir aquí después de mi último año escolar.

–Aquí está tu abrigo– dijo Draco mientras empacábamos nuestros baúles. Sonreí mientras lo tomaba y lo doblaba para guardarlo bien.

–Entonces, ¿Vamos a ir al Callejón Diagon más tarde hoy?– Pregunté, a lo que Draco asintió. El expreso de Hogwarts partía mañana por la mañana y una vez más habíamos pospuesto la compra de nuestros libros hasta el último momento.

–¿Por qué estás empacando tus toallas? Hay en Hogwarts, ¿Sabes?– Draco se rió entre dientes. Aún no habíamos tenido esta conversación y sentí que era hora de terminar con esto de una vez.

–Quizás lo necesite después de Hogwarts– me encogí de hombros, sin poder mirarlo a los ojos correctamente. Draco dejó sus cosas y se acercó.

–Todavía puedes quedarte aquí por un tiempo después de la escuela, Ellie. No voy a abandonarte si eso es lo que piensas, pase lo que pase– Tomó mi mano y me atrajo hacia él para que tuviera que mirarlo.

–Lo sé, Draco– suspiré –Pero no quiero volver aquí, nunca.

–¿Nunca?– él frunció el ceño. Asentí y tragué el nudo en mi garganta.

–Después de mañana, no volveré a la Mansión Malfoy. Ni para Navidad, ni para Semana Santa, ni para las vacaciones de verano. No hay nada aquí para que me quede y no quiero tener nada que ver con esta gente, especialmente si la guerra se vuelve más acalorada.

–Yo estoy aquí– dijo en voz baja, lo que hizo que mi corazón se rompiera un poco.

–Lo sé, lo sé– dije –Pero también estás en Hogwarts. No necesito venir aquí durante los descansos para verte. Tengo mucho tiempo contigo en la escuela.

Draco miró hacia abajo. Sabía que él lo entendía, pero le resultaba difícil aceptarlo.

–Es mucho más seguro estar cerca que distanciarse justo antes de la guerra, Ellie.

–Siendo honesta, no me importa– me reí entre dientes –Si muero, ni siquiera me importaría mucho, pero no puedo seguir actuando así por el resto de mi vida. ¡No puedo, no voy a volver aquí cada día festivo y actuar como si no los odiara por lo que hicieron!

–Está bien– dijo Draco y me abrazó cuando notó que me ponía nerviosa –Está bien– Suspiré y me dejé calmar en sus brazos. Necesitaba ser fuerte en esto, me sentiría profundamente infeliz si permaneciera en este ambiente tóxico.

–¿Pero qué pasará después de Hogwarts, Ellie? ¿Qué hay de mí?

Me aparté y lo miré, parecía triste, pero no pude evitarlo, no podía seguirlo a todas partes. Si él quería permanecer en este círculo íntimo entonces podía hacerlo, pero eso no significaba que yo tuviera que hacerlo.