-La conocemos desde los once años -dijo Peter como si fuera obvio.
-No me refiero a eso -. Explicó Remus -Lo que quiero decir es ¿Enserio la han visto?
-Deberías ser más claro.
-Es Rosalyn, es divertida, inteligente, fuerte, valiente; y sus ojos, e...
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Remus acariciaba el cabello de la pelirroja con cuidado de no lastimar su cabeza, su mejor amiga se encontraba recostada en su regazo, el dolor de cabeza parecía haberse reducido considerablemente. Hasta el momento las hermanas de Rose no habían regresado. Varios padres empezaron a entrar a la enfermería en busca de sus hijos. Por la puerta entró un hombre con traje y de cabello rubio, a su lado iba una mujer pelirroja con una gabardina beige, miraron a su alrededor y centraron su atención en la pequeña bruja recostada en las piernas del castaño, pronto comenzaron a dirigirse a ellos. Debían de ser los padres de Rosalyn.
—Mi pequeña —dijo la mujer acercándose a su mejor amiga y dejando un beso en su cabeza. Rosalyn se sentó en la cama.
Ya de cerca Remus contempló a la que era la madre de la Lestrange, el parecido era irrefutable, Rosalyn era un copia de su madre, ambas pelirrojas, los ojos verdes y la misma sonrisa.
—Rose —dijo su padre dándole un abrazo a su hija —¿Estás bien? —preguntó al ver la venda en su cabeza —¿Estás mareada, tienes nauseas?
La chica negó y sonrió a su padre para tranquilizarlo.
La madre de Rosalyn se fijó en el chico que estaba sentado en la misma cama que su hija, el castaño se sonrojó a causa de la vergüenza, no quería que la madre de su amiga se llevara una mala impresión de él.
—Tu debes de ser Remus —habló la mujer —Rosalyn ha hablado mucho de ti en casa.
Rose estaba hablando con su padre, por lo que no escuchó lo que acababa de decir su progenitora.
—Remus Lupin, un placer —se presentó él extendiendo su mano para saludar a la señora Lestrange. Ella le dio una sonrisa y lo abrazó, lo saludó como si lo conociera de toda la vida, fue agradable ser saludado de esa forma.
—Soy Genevieve, la madre de Rose —dijo la mujer.
—Su hija se parece mucho a usted —comentó Remus haciendo reír a la mujer.
—Eso es lo que siempre dicen —dijo el padre de Rose —es maravilloso que tu hija sea idéntica a la mujer que amas.
El señor Lestrange era igual de simpático que su esposa, pero Remus no pudo evitar sentirse intimidado por su mirada, los ojos de Rose eran los mismo que los de su madre, pero la fuerza en la mirada era heredada de su padre, el Lupin lo comprobó ese día.
—Lowell Lestrange —se presentó el hombre estrechando la mano del licántropo.
Remus también se presentó al padre de su amiga. Sentía una mirada sobre él, Genevieve Lestrange miraba su rostro con detenimiento, de seguro estaría preguntándose como se había hecho la cicatriz que atravesaba su cara, pero no había en su mirada juicio o asco, solo lo miraba con atención.
Poppy regresó con Rose un momento más tarde, siendo interrogada por los padres de la chica acerca de su estado. Genevieve no se separó de su hija y acariciaba su mano.
