-La conocemos desde los once años -dijo Peter como si fuera obvio.
-No me refiero a eso -. Explicó Remus -Lo que quiero decir es ¿Enserio la han visto?
-Deberías ser más claro.
-Es Rosalyn, es divertida, inteligente, fuerte, valiente; y sus ojos, e...
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Esa mañana muy temprano Rosalyn se escabulló a la habitación de prefecto de Remus, que había decidido dormir ahí la noche anterior después de su ronda. Al abrir la puerta encontró al castaño durmiendo tranquilamente en su cama, se acercó con cuidado de no hacer ruido y se subió a la cama.
—Buenos días —dijo con voz suave —Despierta Rem —llamó al castaño.
Remus apenas emitió un gruñido y se dio la espalda para seguir durmiendo. Rosalyn se subió sobre el cuerpo del chico de ojos café y empezó a besar su rostro.
—Despierta Lunático.
—Si vas a seguir haciendo eso prefiero fingir que sigo dormido para que puedas continuar —dijo bostezando.
—Te aprovechas de mi nobleza.
Remus sonrió y la atrajo hacia él para que se recostara a su lado.
—Me gusta despertar así —admitió el castaño pasando su brazo por la cintura de su novia.
—¡Feliz cumpleaños! —dijo la pelirroja sonriente —Al fin mayor de edad ¿Qué se siente?
—En este mismo momento, me siento demasiado feliz porque estás aquí —Remus sonrió y depositó un beso en la nariz de Rosalyn —Creo que con tu sola sonrisa tengo suficiente. ¿Muy cursi?
—Bastante —se burló Rosalyn —Te amo.
—Yo más —respondió Remus.
—Te traje algo —dijo alcanzando el regalo para su novio —Espero te guste —comentó entregándole la caja decorada.
Remus recibió el obsequio y lo abrió en presencia de su novia, y sus ojos se iluminaron al ver el contenido. Varias barras de chocolate de distintos sabores, un álbum de David Bowie, el cantante Muggle favorito de Remus y un álbum de fotografías de ellos dos. Al ver las fotografías se encontró con algunas ya viejas, cuando estaban en primer año, y los cursos siguientes. Sonrió enternecido al ver la del día de su primera cita.
—Jamás había estado tan nervioso como ese día —dijo Remus contemplando la fotografía —Esperaba que me dijeras que me veías solo como un amigo.
—Te fue mejor de lo que esperabas, llevamos ocho meses juntos.
—Los mejores ocho meses de mi vida —añadió Remus —Gracias, no, en serio, haces no solo de este sino de todos los días uno especial para mi.
—Sacas lo mejor de mi Rem —dijo Rosalyn —Además te lo mereces, eres el mejor novio del mundo entero —el castaño sonrió embelesado —Feliz cumpleaños —repitió y unió sus labios con los de su chico.
—¡Feliz cumpleaños Lunático! —exclamaron los demás Merodeadores junto con las chicas entrando a la habitación el hombre lobo, provocando que el beso se detuviera.
—¡Cámbiate rápido! —pidió Sirius —¡Tenemos que cantarte el feliz cumpleaños en el Gran Comedor!
—¡Ya eres mayor de edad Remus! —felicitó Lily que también había alcanzado ya la mayoría de edad en enero.
