IMPREDECIBLE

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Dylan

Las calles cada dia son invadidas por manifestantes.

Cualquiera pensaría que se viene un fuerte golpe de estado.

En las noticias ya revelaron la identidad de los gobernadores que estuvieron involucrados en narcotráficos, al parecer ya se sabia eso pero por protección no quisieron revelar sus identidades.

Todo es un caos.

Una persona que tenia información importante revelo todo tipo de cosas que estos hacían.

Hay mas personas involucradas en esto pero que ya no son gobernadores ni nada por estilo.

La gente pide que todos los gobernadores renuncien a su puesto y se entreguen a la policia.

Unas pruebas bastaron para mover a todo el pais, tanto que incluso importantes gobernadores de otros paises quieren venir a hablar personalmente con el estado para ver que es lo que ocurre ya que nadie esta haciendo justicia como se debe.

Solo uno de los gobernadores fueron arrestados, los otros no se saben probablemente se escaparon, estan escondiendose o simplemente el estado los esta protegiendo.

Quien sabe.

Lo único que puedo decir es que siento una admiración por la persona que hizo eso, no se revelo su identidad ya que el mismo hizo la demanda anonima, lo unico que se sabe es que se dio a la fuga al entregar la pruebas.

Ya nada se supo de el.

—Cada vez hay mas manifestantes —comenta Isadora mientras mira por la ventana—

—Si, todos queremos justicia

Isadora y yo estamos en mi apartamento, vinimos juntos despues de las clases, salgo por mi balcon para ver la oleada de gente gritando con carteles en sus manos, carros bocinando para que puedan pasar.

Ojala pudiera conocer a la persona que hizo esto para decirle personalmente que lo admiro.

—Te diria para salir a dar una vuelta por ahi, pero veo que sera imposible —Isadora ofrece—

—Igual podemos ir, vamos a caminar

—¿Seguro?

Le doy una sonrisa de boca cerrada.

—Totalmente

Ambos salimos de mi apartamento encontrandonos con las personas, por instinto nos agarramos de la mano para no perdernos y cruzamos la calle pasando entre todos ellos.

—¡Justicia! ¡Que se haga justicia! —un señor grita—

—¡Mi hija esta desaparecida por culpa de esos bastardos! —una señora grita—

Eso me alarma.

Y solo me hace volver a los sentimientos vacíos de hace una semana y media

Por que los dias fueron pasando y Tony aun no aparece.

Mi calidad de sueño empeoro al igual que mi insonmio, solo necesito saber que esté bien y esto va a mejorar.

Necesito verlo.

Isadora y yo seguimos caminando hasta que llegamos a una zona un poco mas calmada.

Nos sentamos en unas bancas.

—Joder que agitado —se queja—

—Quisiera manifestarme yo tambien, pero no seremos escuchados, ya hay bastantes

Ella me da una mirada poniendo su mano en mi hombro.

—Dylan, lo vamos a encontrar

—No lo se, ¿Y si le hicieron algo?