Moises

Una dia antes del asesinato

—No te me vas a escapar bombón

Sonrio para mi mismo hablando en voz alta.

Ya te encontre.

Te tengo Ivanok.

Te tengo.

Voy manejando con uno de mis carros deportivos, ya que mi camioneta quedo en el fondo del mar imposible de sacarlo.

Como de costumbre acelero sobrepasando la velocidad permitida, esto de verdad es una urgencia tengo que llegar a tiempo, antes de que sea demasiado tarde.

La carretera por la que voy conduciendo es desertica a su alrededor, con algunos cactus decorando el paisaje, a lo lejos puedo ver un pueblo que mas en el fondo esta el aeropuerto donde mayormente se hacen vuelos clandestinos ya sea para exportar droga, armas o como en este caso, niños.

Un pueblo donde hay varios comercios y he venido varias veces para que mi venta de cocaina pueda ser exitosa pero ya no mas.

A medida que me voy acercando abro un pequeño baul del medio para sacar mi arma y ponerla entre mis pantalones.

Voy en traje gris oscuro con una camisa negra sin corbata, una perfecta vestimenta que siempre me ha gustado, y por que no usarlo en este dia.

En este gran dia.

El pueblo me recibe con personas mirandome extrañadas, no es común que una persona conduzca a altas velocidades y mas con un carro deportivo, paso todos los semáforos en rojo llevandome algunas bocinas e insultos.

El aeropuerto esta mas cerca y puedo ver como tiene portones de acero que estan cerradas, mas adrenalina.

Ignorando todo tipo de carteles que dicen que me detenga, agarro fuertemente el voltante con ambas manos y piso el acelerador con todo lo que tengo, lo segundo que pasa es que siento como mi velocidad disminuye un poco debido al impacto del carro contra el porton derribado pero a una si sigo acelerando.

Ningun daño que pueda ser perjudicial.

La pista de aterrizaje me recibe con su grandeza que es.

Y como es totalmente plano y no hay nada, lo veo.

Su jet privado moviendose para ser despegado, en ese momento pienso que llegue tarde pero un alivio me recorre cuando veo que las ruedas del avion aun estan en el piso.

Asi que acelero hasta llegar al jet privado, ignorando a todos los guardias que me hacen señas de que no puedo pasar.

Ignorando todo tipo de carteles que dicen que esta zona esta prohibida.

Me voy acercando a su jet privado, y me preparo mentalmente para lo que voy a hacer, con una mano sujeto el voltante y con la otra la palanca de freno de mano.

Entonces pasa:

Giro hacia la izquierda subiendo la palanca hacia arriba con fuerza cuando la parte trasera de mi carro se estrella fuertemente con las ruedas del jet privado, provocando que estas se rompan y se suelten.

IMPREDECIBLEDonde viven las historias. Descúbrelo ahora