¿¡Dazai-san tiene esposa!?

EXTRA [Llamada entre Fukuchi y Jouno]

—Deje ver si entendi—empezó Jouno. Una vena explotaría en su frente de la ira que sentía por lo que acababa de escuchar—¿quiere estar echado en una cómoda camilla mientras nosotros amanecemos trabajando?

—¡Jajajajaja! no te preocupes, querido Jouno. Me están atendiendo bien. Además, no todos los días una bonita señorita te intenta cortar la garganta. Debo decir que sus uñas eran muy afiladas—su voz se puso seria—poseen las mismas características que la espada de Tetcho. Quizá podamos investigar a este chica un poco más.

—Aja—respondió Jouno dándole un puñetazo a Tetcho.

Jouno y Tetcho, esa tarde estaban entrenando. O mejor dicho, Jouno lo estaba utilizando como un saco de boxeo, Tetcho mientras esquivaba y comía un poco de alguna combinación de un color simular, comida que Jouno detestaba con toda su alma.

—¿Vas ganando?—le preguntó el comandante Fukuchi—parece que escuche a un animal herido.

—Algo así...como usted me estaba distrayendo, le termine pateando en la entrepierna. Como sea, ¿qué me estaba diciendo? hummm—Jouno miro indiferente a Tetcho retorciéndose de dolor en el suelo—parece que lucha por conseguir su comida asquerosa otra vez...

—Decía que no podré ser parte de la misión—respondió el comandante Fukuchi—estoy muy grave según la doctora Yosano. Quiero que en los documentos si tengan mi nombre, así no recibiremos problemas por mi ausencia; además, tampoco quiero que culpen a Fukuzawa de mi herida. Podríamos traerles problemas a ellos.

—¿y eso que? ¡Cómo se le ocurre que mentiré en unos documentos oficiales!—le gritó por teléfono—¡Y tú deja de quejarte con un animal moribundo!—le grito a Tetcho—oiga, no firmare un documento con mentiras, ¿lo entiende? Va contra mis valores...—una idea cruzó por su mente—aunque...—sonrió y se acercó a Tetcho en el suelo—Tetcho-san∼ ¿qué te parece si eres de utilidad y firmas unos cuantos papeles por mi, te parece bien? Y lamento muuuucho haberme pateado en la entrepierna, juro que no fue a propósito para verte retorcerte de dolor o para librar al mundo de tu descendencia, lo juro.

<<A veces pienso que Jouno lo quiero ver muerto—pensó el comandante mientras le escuchaba—es increible como puede cambiar su tono de voz para parecer más confiable. Aun así, necesitamos que alguien firme, así que...¡Hazlo por nosotros, Tetcho!>>

—¿F-Firmar?—preguntó Tetcho apoyándose en su espada para poder levantarse. Sus piernas temblaban, al igual que todo su cuerpo—¿e-esas cosa no las haces t-tú?—preguntó temblando.

—Realmente te dolió, ¿no?

—C-Comandante, ¿quiere que yo firme estos papeles?

El comandante se sintió un poco culpable por echarle la carga a él.

—Cuento con tu ayuda, Tetcho-kun—murmuro apenado.

—Asi es, contamos con tu ayuda, Tetcho—aseguro Jouno.

—Firmare entonces.

—Muy bien...solo espero que no nos metan a la cárcel luego de eso...—murmuro muy bajito Jouno.

—¿Qué dijiste?

—¡Nada! seguro que el golpe te afecto el oído. Mejor ve a ponerte hielo. Quizá aún hay esperanza para tu descendencia—le trato de consolar.

—¿Mi descendencia?—pregunto Tetcho conducido—¿qué es eso?

Jouno se quedo en blanco y penso: "¿como es que dejaron entrar a un idiota tan ignorante a los Peros de Caza?" contuvo su ira y sonrió, desenvainó su espada para luego empezar a pelear.

—¿Sabes qué? Mejor dejemoslo así, será mucho mejor si no tienes descendencia. 

—¡Jouno!—grito el comandante por el telefono—hay algo mas que debo decirte...tengan cuidado con todos los oficiales de policia que Ango Sakaguhi les asigne. Es posible que ese funcionario quiera apoyar a su amigo: Osamu Dazai. Confio en que no confiaran tan a la ligera en ellos. 

—¿Oficiales de policia?—pregunto Tetcho.

—Ya oiste—le dijo Jouno sonriendo. Tenia su espada a unos dos centimetros del cuello de Tetcho—mas te vale no hacer estupideces mañana en la infiltración al Sky Casino y la Port-mafia.

—Te advierto lo mismo, Jouno—dijo Tetcho muy serio—hay veces en las que te sales de control. No lo eches a perder mañana.

—Él tiene razon—comento el comante—ademas, Jouno, quiero que Tetcho sea enviado al Sky Casino—explico en voz baja, para que Tetcho no escuchara la conversacion—ya debes saber el porque de mi decision.

—Lo sé, comandante. Me encargare de todo. Usted no se preocupe.

Mientras tanto en la Port-mafia...

—¡En dos dias es año nuevo!—exclamó Mori con una enorme sonrisa y las energías de un niño de 10 años. En sus manos cargaba un montón de regalos además de 5 bolsas de sandías—¿Le gustaría ver los fuegos artificiales por la noche?

—Son la Port-mafia, ¿cómo es que se permiten ver siquiera los fuegos artificiales? ¿Acaso les faltan profesionales reales?—preguntó Tomie, su tono era de alguien que no había dormido lo suficiente, además de un exorbitante mal humor por estar encerrada.

—Como esperaba, es tan cruel como Dazai-kun. Por cierto. Hasta ahora...no me ha preguntado sobre mi informante. Quiero decir, es obvio que no debe tratarse de alguien de suma confianza, como para arriesgarme a un ataque de frente a los Perros de Caza, con el único fin de recuperarla.

—No me interesa saber quien es su informante, jefe.

—Ya veo, es un alivio, él pidió que no lo revelaremos aun. Dijo que sería algo chocante para usted. Así que, espero que pronto termine todo esto y puedan conocerse. Ya que gracias a él ahora usted está segura, con nosotros. Es algo anticuado, pero tengo la convicción de que usted volverá a ser parte de la Port-mafia. Su habilidad es magnífica, facilita muchos negocios fantasmas que nos vemos obligados a esconder con mañas jurídicas.

—Quiere que me vuelva una criminal. No gracias—respondió Tomie.