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Kore y Tsu'tey se pusieron a la misma altura que Jake y Neytiri, con Nayah entre ellos, protegiendolo.

De entre los Metkayina a su alrededor se abrieron paso dos adolescentes que empezaron a estudiarlos con desconfianza.

—Esto es un deja vu, ¿eh, Jake?

Bromeó Kore recibiendo una mirada divertida por parte de su hermano.

—Calma, tranquilos.

Pidió Jake.

—¿Qué es eso?—preguntó uno de los adolescentes ganándose la atención de Kore—. ¿A eso le llamáis cola?

Kore advirtió a sus hijos con la mirada para que no dijeran nada, conociéndo los lo suficiente como para saber que Mahina ya quería saltar a cortarles la lengua.

Una chica salió del agua y Kore se fijo que Simon se quedaba mirando a la chica, mucho.

—Que pequeña, ¿cómo podéis nadar?

Preguntó el mismo na'vi.

—Aonung, Rotxo—regaño la chica—. Aonung.

La chica se giró para verlos.

—Hola.

Saludo Simon, provocando que la chica se riera bajando la cabeza avergonzada.

Tres na'vi adultos aparecieron del mar montado en unos animales que Kore desconocía.

El líder se bajo del suyo y se posicionó frente a ellos, impotente.

—Te veo, Tonowari.

Saludo Jake recibiendo el mismo saludo.

—Jakesully.

Neytiri, Tsu'tey y Kore hicieron el mismo gesto saludando al Olo'eyktan del clan Metkayina.

De entre la gente apareció una mujer embarazada de tres meses, y Kore lo sabía porque ella lleva el mismo tiempo embarazada.

—Te veo, Ronal, Tsahik de los Metkayina.

Saludo Jake.

—Te veo, Ronal.

Saludaron los otros tres.

—¿Por qué acudes aqui, Jakesully y Persephone?

Kore se sorprendió de que Tonowari supiera su nombre y se dirigiera a ella.

En el bosque, cuando querían hablar con el cabeza de familia, siempre hablaban con Tsu'tey.

Jake miró a Kore antes de que esta hablará.

—Buscamos uturu.

—¿Uturu?

Preguntó Ronal condescendiente.

—Refugio para nuestras familias.

Explicó Jake.

Ronal avanzó hasta ellos, empezando a examinarlos.

—Somos gente del arrecife, vosotros del bosque. Aquí vuestras destrezas no sirven.

Explicó Tonowari.

—Aprenderemos vuestras costumbres—Jake miró a Kore—, ¿a que sí?

—Sí.

Ronal de mientras estaba examinando a los niños, acercandose a Tuk.

—Que brazos más finos.

Tuk se apartó buscando refugio entre sus padres.

—Mamá.

Metanoia¹-Tsu'tey-Donde viven las historias. Descúbrelo ahora