Al paso de los meses Arya se volvía cada vez más distante a Luka, había ocasiones en lo que no le veía. No le daba explicaciones de nada y Ronal parecía apoyarla en lo que sea que hacía.
Aquella noche mientras Luka caminaba con Lady Mormont por los pasillos del castillo la vio salir de la habitación hacia el comedor y la Mormont se emocionó, en islas de Osos ver a una embarazada era raro, casi siempre se mantenían resguardadas por el frío.
Así que la siguió junto con Luka entrando hacia donde Arya estaba en el comedor, la cena sería pronto así que la mesa ya estaba servida.
- ¿cenaras con nosotros? -mencionó Luka mirando a Arya tomar la comida que deseaba en un plato mientras la doncella lo sostenía siguiendola.-
- Es claro que no lo haré, Lukarys. -murmuró y Luka suspiró.-
- Necesito hablar contigo sobre algunas cosas del norte.
- hablalas con Ronal.
- dije que contigo.
- ¡hablalas con ronal! -le gritó y Mance suspiró apartandose al ver a Luka tensar su mandíbula mientras la doncella se quedaba a un lado-.
- estoy cansado de tu falta de respeto, te he pasado tus cambios de humor por siete meses por qué estás embarazada. ¡Eres la maldita guardián del norte, así que toma el papel!
- ¡si tanto lo quieres puedes quedartelo!
- ¡Es nuestro!
- ¡Este título solo me ha traído problemas!
- bienvenida al mundo, Arya. ¿Creíste que el título solo era eso? ¿Un título? hay que trabajarlo, no solo estar viviendolo.
Cuando Arya se quejó pasando su mano por su vientre Luka decidió que ahí acababa la discusión que siempre empezaban por su actitud y suspiró.
- bien, me haré cargo entonces. -murmuró y la miró.- Los Targaryen vendrán en unos días, traerán algunas semillas para cosechar antes del próximo invierno así que es necesario que estés en las reuniones para saber que necesitábamos.
- no deseo hablar con tus padres
- no son mis padres los que vendrán, será la mano y uno de los príncipes.
- ¿quién?
- Daemon quizás o Baelor, no lo sé.
Arya lo miró y suspiró, no había visto a Daemon por casi nueve meses quizás, temia que el dolor que sentía hiciera que lo olvidará.
- ¿Dónde está Laura? -le murmuró Arya.-
- se ha ido, vendrá en unos meses si es necesario a cuidar de tu hijo si así lo deseas.
- Ronal se hace cargo de eso, no deseo tener a tu niñera aquí.
Luka suspiró tratando de no empezar una discusión de nuevo y asintió.
- bien, lo que desees es lo que se hará con tu hijo.
- ¿Algo pasa con el futuro guardian del norte? -habló Ronal al entrar en el comedor y sonrió acercándose a Arya dejando un beso en su mejilla y uno en su vientre.-
- ¿el futuro? -murmuró Mance-.
- mi hijo será el primogénito de Arya, lo que significa que él sera el próximo guardián, ¿no te emociona? -murmuró Ronal a la niña y está asintió sin muchas ganas, no es que no quisiera que el niño fuera guardián pero es que hasta ella sabía que ronal era una mala influencia.-
- no nos precipitemos al futuro, Ronal. La reina Rhaenyra ha dicho que el primer varón será el próximo guardian, sea cuál sea de nosotros dos. No es una competencia.