››› Promesas y Terceras (xxᴠɪɪɪ)

987 113 65
                                    

―Teddy.

―¿Si?

―Creo que deberíamos casarnos―pensé en voz alta mirando directamente al cielo y pude ver de reojo como Teddy se enderezaba. Ambos estábamos acostados en el césped junto a nuestro árbol. Yo traía un libro abierto descansando sobre mi pecho que señalaba cuánto tiempo habíamos pasado allí, a solar, leyendo.

―¿Que?―cuestiono él con sorpresa pero divertido.

―Las personas se casan con sus mejores amigos... con las personas con las que quieren pasar el resto de su vida, aquellas con las que no discuten y se aprecian mutuamente. No estoy segura de querer pasar el resto de mi vida con alguien desconocido―explique tambien enderezándome y dejando el libro sobre mis muslos.

―Cuando te cases con alguien, no será un completo desconocido.

―¿Y tu como sabes eso?

―Yo podría asegurarme de eso―dijo con seguridad y baje mi mirada sonrojada.

―A lo que me refiero es que somos mejores amigos. No discutiríamos jamás y la pasaríamos genial todo el tiempo. Viviriamos en donde sea, pero que tenga una biblioteca y no me importa si es un hogar con solo una habitación, será una biblioteca y dormiremos allí―Laurie río con ganas pero sé que lo imagino tal y como yo lo había hecho. ―Leeríamos por el resto de nuestras vidas. Nos sentaríamos en nuestro único sofá y leeríamos todas las obras que existan.

El entusiasmo con el que imagine rápidamente el resto de mi vida con Teddy, hacía a mi corazón vibrar de una forma diferentes, más pura y mágica.

―Creo que te estas apresurando, Lory―dijo con ternura. ―Algún día conocerás a alguien a quien realmente ames.

"Pero ya lo encontre..."

―Se reirán de cosas en público que nadie entenderá pero que ustedes comprenden sin siquiera mirarse a los ojos.

―Tenemos eso―conteste.

―¡Tendrás que besarme! ¡Todas las parejas lo hacen! ¿Estas dispuesta a eso tambien?―exclamó indignado y no pude entender cómo alguien como Teddy podía estar tan ciego. Su corta edad no le permitía entender lo que estaba diciéndole. Estaba dispuesta a todo solo por pasar el resto de mi vida con él, y besarlo jamás sería una tortura.

―¿Sabes lo que un beso significa?―pregunté.

―Claro que lo se.

―Entonces sabes que nuestros besos serian diferentes. Las muestras de amor no necesariamente son físicas―conteste sabiendo que cada tarde junto a él mientras nos escondíamos del resto del mundo se sentían como un eterno beso apasionado.

―Es diferente.

―Eso significa que voy a tener que besar a otra persona, entonces―respondí. ―No sé si quiera besar a un desconocido, Teddy.

―¿Pero estas dispuesta a besarme a mi?―cuestiono con el ceño fruncido y trague en seco jugando con mi falda. No podía creer que él siguiera pensando en un beso como algo físico.

―No tendríamos que besarnos obligatoriamente―conteste fastidiada de que no entendiera mi metáfora.

―¿Y si nos enamoramos de alguien más?

Al preguntarlo su mirada bajó a sus pies y no quiso dirigirse a mis ojos. Yo gire a verlo, pero me negaba a pensar que dicha suposición tenía conexión con la realidad.

Estaba siendo egoísta en ese sentido. No podía atarlo solo porque no quería conocer a nadie más, solo porque con él me sentía cómoda.

―¿Aun tienes la navaja de tu padre?―pregunté tras un incómodo y solitario silencio. Laurie metió la mano en su bolsillo y me la otorgó con confianza sin saber lo que haría. Me giré hacia él árbol detrás de nosotros y talle mi inicial. ―Yo, Lorelai March, prometo solemnemente y juro por mis hermanas amarte para toda la vida, sin ser necesariamente un amor romántico. Juro cuidarte, acompañarte, quererte, aceptarte y leerte por el resto de mi vida. Juro ser tu mejor amiga hasta que nuestras almas sean olvidadas y no haya ninguna conexión espiritual entre nosotros. Juro acompañarte incluso el día de tu muerte. Juro nunca irme de tu lado, nunca abandonarte, nunca soltarte, pero siempre aceptarte. Juro respetarte y amarte, protegerte y aconsejarte, leerte y escucharte. Juro desde lo más profundo de mi corazón ser el alma más pura que encuentres en tu camino y con la que puedas contar. Yo, Lorelai March, te juro a ti, Theodore Laurence, amarte incondicionalmente como tu mejor amiga.

Lorelai March ⸻ LITTLE WOMENDonde viven las historias. Descúbrelo ahora