can't you see me?; catnipz

Capítulo 11

Han pasado un par de días desde el baile y Haerin prometió darnos una oportunidad, sin embargo, parece estar evitándome más que nunca. Se suponía que me daría clases después de la práctica de porristas el lunes, pero me envió un mensaje de texto y dijo que tenía que ir a casa, que algo surgió. El martes no me habló en todo el día, ni siquiera en matemáticas, cuando nos sentamos literalmente una al lado de la otra. También canceló nuestra sesión de tutoría. No me dio ninguna oportunidad de responder antes de salir corriendo de la clases. Simplemente no lo entiendo. Pensé que estábamos bien ahora.

—Creo que deberías confrontarla al respecto —se lo conté a Danielle y a Hanni ya que me había estado molestando. Sé que Haerin me hizo prometer que no se lo contaría a nadie, y lo intenté, de verdad, pero supieron que pasaba algo en cuanto me vieron y no se callaron hasta que me tuve que rendir. Además, confío en ellas, no se lo dirían a nadie.

—¿No crees que puede ser un poco insistente? Quiero decir que, a lo mejor le pasa algo.

No quiero parecer pegajosa. Todavía no estamos saliendo.

—No, chica, te ha estado ignorando desde el baile. Creo que al menos te mereces una explicación —me limité a asentir siguiendo a la vietnamita después de pagar mi almuerzo. Sé que tiene razón, pero, ¿y si Haerin cambia de opinión y decide que no quiere seguir intentándolo? Realmente no sé si puedo soportar eso ahora mismo.

—Estoy de acuerdo con Hanni. Pregúntale a ella. Parece bastante agradable y probablemente tenga una buena razón —Dani siempre tiene una visión positiva. Ojalá pudiera pensar como ella a veces.

—Sí, probablemente tengas razón. Le preguntaré la próxima vez que la vea —suspiro mientras me dejo caer en mi asiento frente a las dos extranjeras. Dani se acercó y abrió la botella de agua de Hanni sin que la otra chica se lo pidiera. Normalmente no pensaría nada sobre eso, pero las mejillas de la vietnamita se sonrojaron ligeramente. Antes de que pudiera seguir reflexionando sobre ello, la chica felina entró en mi campo de visión. Normalmente nunca la veo en la cafetería. De hecho, creo que nunca la he visto aquí. ¿Ella almuerza?

—Ve a hablar con ella —Hanni me lanza una mirada.

—Debe estar  ocupada. Quizá más tarde —Hanni se burla y me lanza una patata.

—Está haciendo cola para comer, no está ocupada. Ahora vete antes de que te obligue —me levanto rápidamente y me dirijo hacia la niña por miedo a lo que ha dicho Hanni. Puede que sea pequeña, pero es peligrosa. A medida que me acerco a Haerin siento que el miedo me recorre. ¿Qué voy a decir? Es una idea terrible. Antes de que pudiera volver corriendo a mi mesa y fingir que esto nunca había pasado, estaba al lado de la chica más bajita y me miraba con los ojos muy abiertos.

—¿Minji?

Mierda, ¿qué digo?

—¿Por qué me has estado evitando? —genial, Minji, muy sutil. Los ojos de Haerin se abrieron de par en par ante mi agresiva pregunta. Seguramente no estaba preparada para que yo fuera tan frontal, digo, yo tampoco.

—Yo... No lo hago. Solo estoy muy ocupada esta semana —Haerin estaba claramente incómoda. Apenas pudo decir la frase que balbuceó todo el tiempo.

—¿Pero está pasando algo? —Haerin todavía parecía visiblemente molesta, lo que me causaba más estrés. ¿Se arrepiente de todo? Por favor, Dios, dime que no.

—¿Podemos hablar de esto más tarde en algún lugar más privado? —claramente no quería hablar ahora porque me dio la espalda y siguió esperando en la fila para conseguir su comida. Bueno, eso duele un poco.

Empiezo mi camino de vuelta a la mesa y me siento con el ceño fruncido mirando a las dos chicas que tengo delante. ¿Por qué me obligaron a hacer eso?