can't you see me?; catnipz

Capítulo 27

POV. Haerin

—Me voy a Yale.

Han pasado un par de días desde mi fiesta de graduación y finalmente reuní el valor para decirle a mi padre que no asistiré a SNU.

—Kang Haerin, si haces esto arruinarás todo en lo que he estado trabajando estos últimos años. El Señor Nishimura está desesperado. Un desliz más y cancelará el compromiso. ¡Te echaré y nunca más recibirás nada de mí! ¡No se te permitirá entrar en esta casa! —mi padre, enfadado, empezó a tirar todo lo que tenía sobre la mesa por la habitación, gritándome. Esta vez no me eché atrás.

—No quiero casarme con Niki. No quiero ir a la universidad de aquí. Quiero estar muy lejos de ti y de todo lo que se te parezca. Has pasado los últimos años haciendo de mi vida un infierno y no lo toleraré más. Me voy a Estados Unidos y voy a hacer lo que quiera —escupo mis palabras con veneno mirando al borracho que tengo delante directamente a los ojos. Este hombre no ha hecho más que arruinarme la vida.

Se dirige hacia mí, agarrándome por el cuello de la camisa y sacándome de su despacho al pasillo.

—¡Te daré diez minutos para que recojas lo que quieras, pero luego te quiero fuera de mi casa para siempre! —me arrojó contra una de las muchas estatuas que adornan nuestro pasillo y luego volvió a su estudio dando un portazo. En cuanto lo perdí de vista, empecé a sollozar violentamente. Es malvado, pero es mi padre. Me limpio enérgicamente las lágrimas de la cara y subo corriendo las escaleras hasta mi habitación dando un portazo. ¿Qué se supone que debo hacer ahora? No pensé que me echaría tan fácilmente. Antes de que pudiera pensar otra cosa, la puerta se abrió de golpe y me sobresalté.

—Tienes que salir de aquí —Kazuha empezó a revisar mis cajones sacando piezas de ropa al azar y tirándolas sobre mi cama.

—Me dio diez minutos, cálmate, Zuha —agarro su muñeca, ella gira la cabeza y veo que sus ojos están llenos de lágrimas, lo que hace que se me rompa el corazón.

Esto es real.

Está sucediendo.

—Le he oído llamar a la policía en cuanto has subido. Tienes que coger algunas cosas y marcharte ya. Puedo llevarte el resto más tarde.

Oh Dios mío. ¿La policía? ¿De verdad es tan grave?

—¿A dónde se supone que tengo que ir?

Después de unos segundos de silencio mi mente automáticamente fue a Minji. No puedo soltarle esto a ella y a su familia, pero realmente no tengo muchas opciones. Saqué mi teléfono y marqué el número de Minji y después de unos timbres ella contestó.

—Hola, hace tiempo que no sé nada de ti —Zuha estaba corriendo a mi alrededor poniendo ropa en una bolsa de lona y luego entró en mi cuarto de baño presumiblemente empacando allí también.

—Minji, ¿puedo ir un rato?

No he hablado con ella desde la fiesta porque quería darle un par de días para que se pusiera al día con su familia y amigos, ya que ella tampoco los ha visto en un año.

—Sí, por supuesto. ¿Pero estás bien? ¿Te pasa algo? —había preocupación en su voz, pero no tuve tiempo de decirle.

—Te lo explicaré cuando llegue,

—¿Quieres que vaya a buscarte? —Zuha me hizo un gesto para que colgara el teléfono porque se me estaba acabando el tiempo.

—No, no, yo iré a buscarte. Hasta luego —cuelgo el teléfono sintiéndome un poco mal, pero le informaré de la situación actual cuando llegue.