can't you see me?; catnipz

Capítulo 37

POV. Minji

Ha pasado una semana desde la cita con el tribunal de Haerin y sólo quedan unas pocas semanas para las vacaciones de verano acaben y todas vayamos por caminos separados. Bueno, Hanni y yo iremos al mismo lugar y Danielle está a dos horas de distancia, pero Hyein se quedará aquí para su último año escolar y Haerin.... No sé lo que está haciendo. Ha estado trabajando de nuevo en la cafetería Marsh y eso parece mantenerla ocupada con algo.

—¿Dónde has estado? —pongo mi bolso en la mesa al lado de la puerta y me quito los zapatos mirando a la más joven haciendo pucheros.

—Hanni, Chaewon y yo salimos a cenar después del trabajo —la menor hizo un puchero aún más grande, haciéndome reír—. Sólo fue una cena, Haerin —se acercó a mí y me arrastró hasta la cocina donde había dos platos colocados y una vela en medio de la mesa con diferentes alimentos también. ¿Qué demonios?

—Nos había hecho la cena —puso los ojos en blanco yendo a coger los platos de la mesa para sacarlos. Dios mío. ¿Me ha hecho la cena?

—¡Espera, espera, para! —la agarré de la mano para que no pudiera coger nada más—. ¿Por qué no me lo dijiste? No habría salido si lo hubiera sabido

Dios, parece tan enfadada.

Haerin suspiró, dejó el plato en su sitio y se sentó en una silla.

—Quería darte una sorpresa. Nunca sales después del trabajo, así que supuse que hoy sería igual —asentí, sentándome frente a ella y empecé a poner en mi plato la comida que había preparado. Que me aspen si no me como esto después de que ella dedicara su precioso tiempo a preparármelo—. ¿Qué haces? Ya has comido —Haerin me miró confundida mientras yo seguía llenando mi plato con comida y llenando el vaso con agua que ella tenía fuera.

—Me lo has hecho tú, así que me lo voy a comer —empecé a engullir la comida a un ritmo rápido que me hizo atragantarme. Haerin se levantó y me quitó el tenedor de la mano.

—Vas a enfermar si comes así. Cómetelo mañana, idiota —después de terminar de masticar toda la comida que tenía en la boca y tragarla, le dediqué una gran sonrisa.

—Me lo comeré todo mañana, lo prometo. No quedará ni una migaja de comida —la chica más joven me dio una palmada en el hombro y empezó a guardar la comida en recipientes.

—Más te vale —Haerin me dedicó una pequeña sonrisa mientras apagaba la vela que había sobre la mesa.

—Siento haber estropeado la cena —cogí su mano, tirando de ella hacia mi regazo.

—No pasa nada. Probablemente esté terrible de todos modos. No soy muy buena cocinera —intento pensar por un momento si alguna vez la he visto cocinar, pero la verdad es que no, sólo la he visto freír un huevo.

—Seguro que estaba bien —Haerin se limita a tararear, apoyando su cabeza contra la mía, rodeando mi hombro con su brazo. Tengo una vista clara de su cuello que estaba completamente curado aparte de una débil línea blanca que se extiende desde justo debajo de su mandíbula hasta su clavícula, pero que es apenas perceptible a menos que estés cerca de ella. Le doy un suave beso para no asustarla.

—No, estoy casi segura de que sabe fatal —oí lo que dijo, pero estaba demasiado distraída con la lenta subida de su pecho y la forma en que se separaban sus labios cuando respiraba. Dijo algo más, pero no la oí.

—Sé de algo que sabe bien.

—¿Eh? —agarré la nuca de Haerin tirando de ella hacia abajo y conecté nuestros labios. Hemos estado haciendo esto mucho últimamente y no me voy a quejar de ello. Besar a Haerin podría ser mi cosa favorita en la tierra para ser completamente honesta. Hae se movió sobre mi regazo, colocando una de sus piernas sobre mi cintura, ahora completamente a horcajadas sobre mí. La joven retiró su boca de la mía y empezó a besarme la mandíbula y el cuello. Dejó un mordisco firme en mi cuello y empezó a pasar la lengua por él para aliviarlo. Maldita sea, ¿dónde había aprendido a hacer eso? Después se apartó, dándome un último beso en la frente antes de separarse completamente.