—Meses después—
—Wou, felicidades —pronunció sorprendida Natalie, antes de sonreír y abrazar a Yamir y Lucero—. Que este nuevo cachorro llegue sanito y lleno de amor.
—Felicidades —sonrió suavemente North, saludando a su hermano y cuñada—. Hazel y Ewan tendrán primos con quiénes jugar.
—¿Y ustedes cuándo tendrán sus propios cachorros? —sonrió Lucero, siendo abrazada por Yamir.
—A-Ah no, North y yo no queremos más niños por el momento —fingió una sonrisa la rubia, tomando a Hazel en brazos, que había comenzado a sollozar desde su coche.
—Ya bastante tenemos con los mellizos por ahora —le dijo North—. Quizás en unos años, cuando los cachorros sean más grandes.
—Exactamente. Ahora sólo quiero disfrutar de mis pulguitas.
—Natalie ¿Me ayudas por favor?
Al escuchar que Cala la estaba llamando desde la cabaña, sonrió, saludándolos para ir a ver qué necesitaba la niña.
—¿Se irán a cazar? —les preguntó sorprendida a los mayores—. Está haciendo mucho frío, chicos.
—No te preocupes, iremos abrigados —sonrió Blake.
—Abrigados en la medida de que no nos moleste para movernos —lo corrigió Biel.
—De acuerdo, pero tengan cuidado. No se metan en zonas salvajes y peligrosas.
—¿Cómo pretendes entonces que atrapemos algo? —le preguntó con obviedad Kaelan—. Además, iremos por unos venados, sí o sí debemos alejarnos e ir por zonas "peligrosas".
Natalie los miró insegura, meciendo a Hazel.
—Tengan cuidado con los machos, sus cuernos podrían hacerles daño.
—Sería bueno cazar uno de esos, me traeré sus astas de recuerdo —pronunció Kaelan saliendo de la cabaña, seguido por Biel.
Blake se acercó a Natalie y la tomó de una de sus manos, sonriendo.
—Estaremos bien, y si encuentro algo bonito en el camino, te lo traeré —sonrió, dándole un beso en el dorso de la mano, antes de acercarla a su frente e irse tras sus hermanos.
—Tu hermano es mi niño especial —sonrió suavemente—. Pero tú no le cuentes a nadie ¿Okay?
Hazel la miró y sonrió, abrazándose a ella.
—Y tú también lo eres, mi bebita especial y territorial.
🌑🌑🌑
—Natalie.
—Dime —sonrió, abrazada a su pecho, con los ojos cerrados, disfrutando de las suaves caricias de North por su espalda y cabello, que tan relajada la hacían sentir.
—¿Cómo se unen los humanos?
—¿A qué te refieres, mi amor?
—Nosotros tenemos una especie de unión, lo cual no puedo hacer contigo ya que eres humana.
—¿Y en qué consta? —le preguntó curiosa.
—Durante el sexo, quedamos unido a la hembra, y en ese momento, las marcamos, mordiendo su hombro.
Se levantó un poco de él y lo miró sorprendida, confundida.
—¿A qué te refieres con quedar unido y marcarlas? O sea... ¿Cómo los perritos cuando lo hacen?
—Sí...
—¡¿En serio?! —exclamó desconcertada, sentándose en la cama—. ¿Y a qué te refieres con morder?
—Justamente eso, la mordida es una marca permanente, en dónde liberamos feromonas que-
—Espera —lo interrumpió—. ¿Las lastiman? O sea, ¿sangra y eso?
—Sí, de otro modo no se mezclarian nuestros fluidos y aromas. Y de ese modo además, cualquier otro alfa sabe que la hembra tiene compañero.
—Eso suena muy doloroso —murmuró.
—Ven, tú no pasarás nada de eso, porque eres humana —le dijo jalando de la mano hacia él, para volver a abrazarla a su pecho—. Es por eso que te pregunto cómo se unen.
—Sí, pero, ¿Por qué nosotros no nos hemos quedado pegados como perritos? —le inquirió curiosa, pensativa, ignorando lo que North le estaba consultando.
—Porque yo no puedo penetrarte completamente a ti.
—Ah, sí —murmuró, sin sacarse aquello de la cabeza—. Seguro me dolería si lo hicieras.
—Por eso no lo hago —sonrió dándole un beso en la frente—. Entonces ¿Cómo se unen ustedes?
—Mm, no se sigue haciendo mucho, pero nos casamos. Se juntan las familias y amigos de la pareja, y se hace una ceremonia, luego de que los casen. Y hay fiesta, comida y alcohol. Es divertido —sonrió.
—¿Quieres que nos casemos?
—No digas ese tipo de cosas a la ligera —rio.
—Pero lo digo en serio, quiero que de algún modo, tú te sientas unida a mí.
—Pero si ya lo estamos —sonrió abrazándolo, cerrando los ojos—. Vivimos juntos, tenemos siete hermosos niños ¿Qué otra prueba necesitamos para saber que estamos unidos?
—Entonces tú eres una de esas humanas que no se quiere casar.
—No, North, porque yo no le veo la necesidad de firmar un papel.
—Para mí sería importante.
—Ow ¿En serio? —sonrió con ternura, tomándolo del rostro para mirarlo a los ojos—. ¿Quieres que nos casemos?
—Sí, si no podemos tener mi unión, quiero que al menos nos unamos como humanos.
—De acuerdo —le dijo dándoles besos cortos en los labios.
La verdad es que ella lo veía innecesario, pero si él quería casarse, se casarían.
...
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North
WerewolfTercer libro de Hijos de la Luna. ¿Por qué sería malo cruzarse todos los carteles con advertencia de "NO PASE, PROPIEDAD PRIVADA"? Inicio: 10/03/23