North

XXII

En cuanto los sintió lejos, se tomó del pecho y comenzó a respirar con dificultad, antes de sentarse en el suelo agitado.

—Kaelan —pronunció preocupado North acercándose a su hijo.

—E-Estoy bien, sólo... M-Me falta el aire.

—Tu corazón está latiendo muy fuerte, muy rápido —le dijo desesperado—. Intenta respirar, cálmate, ya todo está bien, ellos se han ido.

Asintió con la cabeza y cerró los ojos, acostándose en el suelo con ayuda de su padre.

—Biel, ve con Natalie que te mire el hombro, si la herida es muy grave, te llevaremos con los humanos.

Asintió con la cabeza y se metió a la cabaña, dejando a su padre y hermanos solos.

—¿Qué fué lo que pasó?

—Nosotros siempre hemos entrenado juntos —le dijo Blake—. Y a veces íbamos al bosque a cazar en grupo.

—Les dije que no pelearan, tuvieron suerte de no ser ustedes quienes murieran.

—Papá, Kaelan es muy fuerte, si Biel resultó herido, fue porque quiso ayudarlo cuando ese tipo lo sujeto del pecho. Yo no tuve que intervenir, más que cuando lo bajamos del árbol. Kaelan hizo todo.

—¿Él le cortó la cabeza también?

—Sí —murmuró—... Cuando vio que mordía a Biel en el hombro, se desesperó, le clavó sus garras en el pecho, y cuando soltó a Biel, le mordió en el cuello. La primera vez fue detenerlo, y luego volvió a morderlo, ayudándose con los dedos, hasta arrancarle la cabeza.

North desvió la mirada, apretando la mandíbula.

—¿Estás molesto con nosotros?

—Con tu madre sospechábamos que tu hermano era especial —pronunció bajo, viendo como Kaelan se habían dormido en el suelo—. Su aroma no es parecido al de ustedes, creímos que quizás era porque se había presentado antes su transición como alfa. No es común, pero a veces pasa... Creo que Kaelan serán más que un alfa, y si es así, debemos buscar ayuda.

—¿Por qué?

—Porque tu hermano está enfermo, los tipo de alfa como él no viven mucho, la mayoría muere del corazón. Y si no mueren por un ataque al corazón, mueren en un enfrentamiento cuando están fuera de control. No pueden controlar sus emociones, son víctimas de sus instintos.

🌑🌑🌑

—Déjame ver tu herida —Le dijo Natalie acercándose a Biel—. Tú papá dijo que ustedes sanan rápido, pero hay que evitar que se infecte.

El muchacho se quedó quieto, y ella le retiró el vendaje, observando la horrible marca de mordida que tenía en el hombro.

—Ah cariño, esto te debe doler mucho —pronunció afligida, tomando agua oxigenada y gasas.

—Ni tanto ya —murmuró tomando un poco de agua.

—Te arderá un poco, lo siento.

Asintió con la cabeza y no emitió sonido alguno cuando ella comenzó a limpiarla.

—Han sido muy valientes y fuertes, Biel, tú mamá estaría muy orgullosa de ustedes —sonrió—. Tuvo unos cachorros extraordinarios.

—Mi madre era una mujer fuerte, es lo mínimo que podíamos ser nosotros en su memoria.

—Dejan bien en alto su nombre entonces —le dijo en un tono suave, comenzando a vendar nuevamente su hombro—. Perfecto.

—Gracias —murmuró.

—No hay de qué —sonrió apoyando su mano sobre la cabeza del muchacho, antes de quitarla y mirar aturdida a Kaelan.

—¿Q-Qué es eso?

—El colmillo del tipo ese —pronunció indiferente, pasando por su lado.

¿Se había colgado el colmillo como trofeo en el pecho? Dudaba que a North le gustara aquello.

—Kaelan ¿Cómo te sientes tú?

—Bien.

—De acuerdo, si necesitas algo, no dudes en pedírmelo —pronunció insegura.

Sabía que al muchacho no le agradaba, es por eso que no quería molestarlo. Kaelan sólo se limitó a asentir con la cabeza y salió de la cabaña, dirigiéndose a su padre.

—¿Qué hiciste con la cabeza de Silas? Enterré su cuerpo, pero no encontré su cabeza.

—Quedó como advertencia en las afueras de nuestro territorio.

North terminó de echar tierra al pozo donde había enterrado el cuerpo de Silas, y observó a su hijo, serio.

—¿Qué hiciste qué? ¿Y qué es eso que llevas en el cuello?

—Respetaban nuestra familia por mamá, ahora la respetarán por todos nosotros, y pensarán dos veces antes de venir a atacarnos. Esos tipos creyeron que porque éramos machos jóvenes, podrían venir y hacer lo que quisieran aquí, y no es así, padre.

—Kaelan no somos salvajes —pronunció North con calma—. Nosotros no hacemos este tipo de... Actos.

—Defenderé cómo sea a mi familia, papá —le dijo serio—. Y si no entienden por las buenas que este territorio está protegido, entonces lo harán por las malas.

—Lo que ocurrió anoche, no tiene que volver a pasar, Kaelan —pronunció bajo, tomándolo de los hombros.

El niño lo miró fijo a los ojos, sin expresión alguna de arrepentimiento en su mirada.

—Claro, no volverá a ocurrir siempre y cuando no intenten nuevamente atacarnos. De lo contrario, habrán más cabezas colgadas.

...