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«Ah~ Es tan relajante poder descansar un poco después de una larga jornada de clases a las que presté ni la mitad de la atención que requerían, pero, meh, ya me las arreglaré para los exámenes de mitad de semestre... Ush, ha pasado poco más de un mes desde que entré a clases en este semestre y ya estoy pensando en los exámenes, que estrés».
«Aunque, si lo pienso, parece que ya llevo más tiempo por las cosas que han sucedido... ¿Habré transmigrado a una historia bl?»
Con miedo, miró a sus alrededores notando que no había nada extraño y solo estaba Rey Leonardo Claudio da Michi lamiendo su pelaje.
—Leo... No me digas que tú...
—Miau~
—No, estoy enloqueciendo... —golpeó su nuca contra el espaldar de la cama, a pesar del dolor que eso le ocasionó, solo lanzó una pequeña maldición y siguió en esa posición—. Pero con todo lo que ha pasado, con sinceridad, creo que eso en realidad podría estarme pasando.
—Miau~
—¡¡AAAAAAAAH!! ¡¡NO PUEDO CON ESTO!!
Gracias al grito que lanzó al aire, no solo hizo que el que pobre animal saltase de su sitio y corriese lejos asustado, sino, provocó que la puerta de su entrada se abriese y un asustado YooBin entrase por ella.
—¿¡Qué pasó!?
El pálido chico sostenía en sus manos una paraguas de punta afilada mirando por cada rincón a algún causante del grito de su amigo. MinGi solo lo miró corretear por el lugar hasta que, pasado poco tiempo, se quedó quieto y bajó su arma hasta tocar el suelo.
—MinGi.
—YooBin, amor de mi vida y vida de mi vida...
El elogiado asintió con lentitud y rio con sarcasmo.
—¿Gritaste así por alguna historia gay? —sus penetrantes ojos se posaron en el cuerpo inmóvil del chico y lo apuntó con el paraguas—. Niégalo.
—¡No fue por una historia gay!, ¡no fue por una historia gay! ¡Te juro por mi colección completa que no fue por una historia gay!
—Hmm... Está bien.
Ya más calmado lanzó el arma lejos de él y se sentó en la cama, junto a los pies de su mejor amigo—. ¿Entonces, qué pasó?
—Solo... estaba pensando que mi vida está muy complicada... Y eso que esta semana ni siquiera ha sido pesada ya que, por lo que pasó, hyung no se ha acercado a mí deliberadamente y solo se ha mantenido en contacto por chat.
—¿Chatean a menudo?
—Mm, de hecho, antes de que gritase hablaba con él, pero dijo que se iría a bañar y nos despedimos.
—¿No le pediste una foto?
—¿¡Ah!? ¡No! ¡Qué asco!
—¿Qué? Mr. Sonrisas me puede desagradar, pero mis ojos nunca se equivocan cuando ven a alguien caliente, ese tipo lo es y mucho. De seguro tiene un pene del tama...
Una gran almohada se plantó sobre su rostro provocando su silencio en lo que comentaba, al lanzarla de regreso hacia Park rio con verdadera gracia por lo tímido que resultaba su amigo con temas tan triviales como ese.
—Ming, ves penes en esas historietas que lees y, ¿te da pena hablar de uno?
—¡N-No es lo mismo!
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RAMÉ [Boys Love]
Teen Fiction「 Ramé Algo hermoso que nace en medio del caos 」 Entonces, ¿es posible que el amor pueda nacer entre la tumultuosa neblina que el miedo a este genera en mi cerebro? ¿Qué puedo hacer ante la batalla constante entre mi mente y corazón para la toma...