RAMÉ [Boys Love]

「 Chapter 21 」

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—Hyung~ ¿Estás ocupado esta tarde?

El mordisco que Jeon Hyun estuvo por darle a su hamburguesa se estancó a centímetros de esta, mirando expectante a su contrario quien, por su parte, lo miraba entre tímido y nervioso.

—¿Uh? ¿Qué dijiste, MinGi?

—Que si estás ocupado esta tarde, hyung —en la pequeña cabeza que MinGi se cargaba, ya tenía una idea de lo que su mayor pensaba—. Pero si hyung está ocupado o simplemente quería pasar un tiempo consigo mismo está bien, yo entiendo.

Como siempre, tenía una idea inequívoca por completo. Ante este comentario, tan comprensivo, que Park pronunció, Hyun negó erráticamente y luego asintió con la misma velocidad.

—¡No, no! ¡Nada! ¡Estoy libre! ¡Siempre estoy libre para ti!

—¿De verdad? —Hyun volvió a asentir, con su sonrisa radiante—. ¿No tienes clases está tarde?

—¡No, para nada! Hoy no tengo clases en la tarde, pierde cuidado.

Y aunque aquello pareciese mentira, era cierto, justamente ese día él solo tenía clases de mañana, las cuales habían empezado hace unos minutos. MinGi le devolvió la sonrisa muy contento y asintió en comprensión. 

—Bien, porque necesito que vayas a mi departamento esta tarde, después de las 17h30, ¿crees que puedas?

—...

¡Boom!

La cabeza de Jeon Hyun había explotado en mil ideas donde los dos eran los protagonistas y las escenas que interpretaban no eran permitidas por un público menor a veinte y un años. Tomó la hamburguesa que no tuvo oportunidad de morder anteriormente y la envolvió en el papel en el que se encontraba, lo puso sobre la mesa que tenía en su delante y volvió a mirar al lindo chico que no entendía porque se puso tan ansioso por esas palabras.

—Park MinGi, ¿estás hablando en serio?

—Mm —respondió con vaguedad.

—¿De verdad, verdad?

—Que sí, hyung, muy en serio.

MinGi podía jurar que vio orejas y cola de perro aparecer, muy vívidamente, en su mayor y agitarse con emoción. Hyun, por su parte, estaba extasiado con la afirmación.

—Entonces sí, sí puedo ir a tu departamento hoy.

—Me alegra mucho, ahí voy a hacer algo que te va a gustar mucho.

¡¡Boom!!

Era obvio lo que harían, ¿qué más podría ser?, pero... ¿eso significaba que por fin el chico que le gustaba había aceptado sus sentimientos hacia él? No quería ilusionarse ni anticiparse, pero no podía evitarlo. Volvió a asentir con rapidez su rostro y de alguna manera se preparó mentalmente para lo que obtendría esa tarde.

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Arreglado, bañado y perfumado. Los tres requisitos importantes para Jeon Hyun si estaba por entrar en la casa del joven que le gustaba. Con los nervios sobresaliendo por todo su ser, se acercó al número de puerta que MinGi le había comunicado por mensaje y tocó el timbre. Esperó poco tiempo hasta que sintió unos pasos acercarse hasta la puerta y quitar el seguro de esta. 

Para Jeon Hyun, mantener una sonrisa siempre fue lo más fácil que podría hacer, pero cuando vio que el que le había abierto la puerta no era nadie más que YooBin, su sonrisa decayó ciento ochenta grados.