Voyeur (Larry)

10

Cuando Louis obtuvo guardianes

Ha pasado tiempo desde el primer celo de Louis, las cosas están normales, o casi. Porque no se puede llamar normal al hecho de que su hermanito y sus amigos, lo estén vigilando todo el tiempo, aunque no es como que el castaño lo note, él tiene cosas más importantes en las que fijarse.

¿Y cuáles son esas cosas? Pues...

Louis tiene que preocuparse de aprobar el noveno grado, de evitar que sus amigos le consigan un novio que él no quiere y de encontrar las formas de poder ver a su crush, un alfa de último año que le gusta desde que lo vio por primera vez en la cafetería.

Como ven, una vida ocupada. No tiene tiempo para notar que Niall, Harry, Liam y Zayn, lo vigilan en la escuela o que se quedan las tardes enteras viéndolo desde la ventana del segundo piso de su casa, mientras él está afuera hablando con algún compañero o compañera de clases.

No, Louis vive su propio mundo, está rodeado de amigos y amigas que requieren su atención y últimamente siempre hay alguien nuevo que lo acompaña a casa, y no le molesta, él ama tener la atención, sentirse como el centro de todo, aunque no lo sea. Así que ama que ahora haya varios chicos, y hasta chicas, siendo amable con él sólo porque es un omega bonito.

Ser omega tiene sus ventajas y él aprovecha cada una de ellas.

Sin notar lo mucho que eso altera a sus pequeños guardianes, los que por cierto, jamás solicitó.

—Jamás había visto a este chico —murmura Niall mirando por la ventana del segundo piso. Los cuatro están amontonados en la ventana, apenas se ven sus ojos desde afuera, porque están tratando de ser discretos, aunque solo basta que Louis mire hacia la ventana para que lo note, pero obvio no lo hace porque está más ocupado riendo de lo que el chico le dice y meciéndose levemente de lado a lado, luciendo encantador.

—Yo tampoco recuerdo haberlo visto —menciona Zayn, el conoce a la mayoría de los chicos de la escuela, pero por más que se esfuerza, no recuerda a este.

—Creo que es compañero de Gemma —murmura Harry recordándolo vagamente. Su hermana mayor tiene un gran grupo de amistades y le parece haber visto a ese chico formando parte del grupo que Gemma y sus amigos suelen formar.

— ¿Y qué hace con Louis? —Liam pregunta frunciendo el ceño, Louis va apenas en noveno grado, lo que lo hace menor que ese chico.

—Al parecer, coqueteando —dice Zayn, tampoco está feliz, de hecho, ninguno de ellos lo está.

—Deberíamos intervenir ahora —Harry propone, se siente ansioso y furioso por partes iguales. Ese chico mira a Louis de una forma que no le gusta, quiere ir ahí y patearlo en la cara. No importa que el chico en cuestión sea más alto que todos ellos.

—Necesito una buena excusa para acercarme y ver quién es el tipo y saber que quiere —dice Niall pensando con qué excusa interrumpirá está vez.

—Sólo sal ahí y dile que se aleje de Louis —Harry responde con prepotencia, y pese a su brusquedad, Liam y Zayn lo apoyan.

—Si hago eso, Louis se enojara conmigo por el resto de mi vida —Niall dice negándose a seguir el plan de Harry.

—Entonces yo iré —dice el rizado y se aleja decidido.

— ¡No volverá a hablarte! —exclama Niall siguiéndolo.
—Lo hará cuando entienda que es por su bien —protesta Harry.

—Tal vez estamos exagerando, tal vez es sólo un amigo, un amigo omega —dice Liam tratando de calmar los ánimos de todos.

— ¿Acaso no lo viste? Es enorme y está coqueteando con Louis, no creo que sea un omega —Zayn refuta lo dicho por Liam.

—Puede ser un beta —sugiere Niall.

— ¡Es un alfa y se quiere llevar a Louis! —exclama Harry a los pies de la escalera.

— ¿A dónde se lo va a llevar? —Niall pregunta con miedo.

— ¡A la cama! —exclama Zayn con tono de burla.

— ¡Zayn! —lo regaña Liam al tiempo que le da un golpe en la cabeza, pues la expresión de Niall es de verdadero pánico.

—Lo siento, estaba jugando, no lo llevara a la cama, era una broma —Zayn se disculpa con el rubio que está mirando la puerta, está decidido, debe intervenir.

— ¿Dónde vas? —Harry pregunta viendo a Niall caminando hacia la puerta de entrada.

Pero el rubio no responde, sólo sigue con lo suyo, llega a la puerta y la abre de golpe, Louis reacciona al ruido de la puerta golpeando contra la pared y en medio de un sobresalto mira hacia la fuente del sonido para ver a Niall en el umbral de la puerta.

— ¿Niall? —pregunta asombrado, pero el rubio no lo mira, está mirando a su acompañante y el enojo que exuda el pequeño alfa es demasiado notorio.

— ¿Necesitas algo? —Louis intenta llamar su atención nuevamente, hablando más fuerte.

— ¿Dónde hay más Coco pops? —pregunta Niall mirando al castaño, ignora al otro chico.

— ¿Qué? —Louis pregunta desorientado, estaba seguro de que Niall le haría una escena e intentaría echar a Matty, pero no, acaba de preguntarle por cereales.

—No encuentro los Coco pops y con los chicos tenemos hambre —explica Niall, a controlado su enojo y ahora se centra en mantenerse en calma y no gritarle al estúpido alfa desconocido que se aleje de su hermano.

—Deben estar en la alacena —responde Louis, avergonzado de haber pensado mal del rubio.

—Ya busqué ahí, no están —niega Niall.

— ¿Seguro? No eres muy bueno buscando, tal vez sí están ahí —insiste el castaño.

—Te digo que no están —asegura Niall y se asombra de su capacidad de mentir tan convincentemente.

—Está bien, voy ahora, espérame dentro —dice Louis soltando un suspiro.

Niall asiente y junta la puerta.

—Tienes un hermano adorable —Matthew comento cuando Niall entró en la casa.

—Adorable no es la palabra que yo usaría —murmura Louis comenzando a sospechar.

—Bueno, es que si lo comparamos contigo ya no es tan adorable, dudo que exista alguien más adorable que tú —el mayor sonríe coqueto al hablar y Louis siente su estomago dar un brinco.

—Basta —reclama en voz baja mientras sus mejillas se sonrojan.

—Te dejo por hoy, pequeño, nos vemos mañana —Matthew se inclina y besa a Louis en la mejilla antes de alejarse con paso relajado.

Louis se queda unos segundos donde está, sintiendo su corazón latir con tanta fuerza que de seguro se le saldrá del pecho, no puede creer que su crush haya estado ahí hablando con él, ¡y le dijo que se verán mañana! ¡Dios Santo! Esto es tan increíble, debe agradecerle a Gemma por haberlos presentado, definitivamente debe hacerlo.

— ¡Louis! —Niall llama desde dentro y el castaño entonces lo recuerda.

Entra en la casa y busca los cereales y hasta les prepara la merienda, ni siquiera se molesta de que los cereales hayan estado donde él dijo, tampoco le importa las miradas extrañas que los niños le dan, él está feliz, muy feliz y nada puede enojarlo o incomodarlo.

Porque su crush sabe quién es y eso lo hace el ser más feliz del mundo.