EL JUEGO DE LA SUERTE | TPN

•×|CAPITULO 19 - MIEDOS|ו

Tan solo unos cuantos días habían pasado, para ser sincero solo tres, y aquellos tres días para mí habían sido totalmente eternos, no podía creer que tan poco tiempo había pasado y yo lo único que hacía era permanecer en el cuarto de la enfermería. 

—Mamá ¿Hoy si podremos ver a Ray?

Cada tarde puedo escuchar las voces de los pequeños pidiendo por mi, a veces se mantienen afuera del cuarto y solo de vez en cuando se escuchan llantos, pero no importa cuánto lloren, tengo miedo de salir y hacerles daño.

Tengo miedo todo el tiempo, me siento intranquilo, molesto, confundido, temeroso y traicionado, son tantos los sentimientos que pasan por mi cabeza que ni siquiera puedo concentrarme en nada.

He tomado la iniciativa de salir pocas veces, aún así me asustó cada que estoy a punto de dar el último paso para tomar la puerta y el único momento en el que puedo salir con seguridad es en la noche cuando voy a la cama de Emma y me recuesto a su lado. Ella no pregunta nada, solo se hace a un lado y hay una almohada de más en donde yo me recuesto abrazando su espalda para sentirme más tranquilo.

—Duerme bien.

Son las ultimas y unicas palabras que ella dice antes de juntar su mano con la mía y ambos quedarnos dormidos.

A veces tengo pesadillas, pero cuando despierto esta Emma abrazándome cálidamente mientras acaricia mi cabeza, ella no pregunta, solo me consuela y se mantiene tranquila para que yo lo este también.

Esos tres días se convirtieron en cinco hasta después casi un mes, estamos a nada de que Norman vuelva y mis ánimos mejoran, ¿Pero y si no vuelve? También lo he pensado muy seriamente, tal vez sea bueno decirles a mis hermanos que es lo que ha estado pasando en todo tiempo, las razones de mis miedos y preocupaciones, pero también recuerdo las reglas con las cuales me dejaron salir.

"Cualquiera que hable sobre lo sucedido en la cede será ejecutado junto a esa misma persona"

No quiero poner en riesgo a ninguno, apenas son unos niños al igual que yo, aún así he decaído bastante, me hago daño de vez en cuando, siento ataques de ansiedad y estrés cuando estoy totalmente tranquilo o haciendo nada, también mis manos tiemblan cada que pienso que puedo salir y tener una vida normal como la de mis hermanos, pero lo que más me aterra es el saber que no puedo hacer nada para evitar que todos sean enviados a ese horrible lugar, aunque claro está, mamá hará que la mayor parte de ellos sea ejecutada sin siquiera darles a oportunidad de jugar ese juego estúpido.

¿Tendrán tanta suerte? Para sobrevivir ahí me costó mucho, a decir verdad no sé que hubiera sido de mi si no me hubiera quedado junto a Oliver o Gillian, también junto a Nigel quien siempre me apoyo, ¿Dónde estaría ahora? Posiblemente muerto o tal vez aún con vida, ¿Pero en dónde? ¿También hubiera escogido el regresar? Pero lo importante, ¿Aún quiero regresar? Ni siquiera se si sea una buena idea, me da miedo volver a lo mismo que deje y saber que está vez no habra marcha atrás, ¿Pero si Norman no regresa?

Son tantas las preguntas que pasan por mi cabeza que solo me lleno de ansiedad y de frustración por no poder hacer nada, el miedo me invade pensando que el romperá su promesa y que no volverá nunca a estar con nosotros, igual me preocupa que mientras más tiempo pasa más se acerca la fecha en la que Emma será enviada y después de eso se irán Gilda y Don, seguidos de Anna, Nat, Thoma y Lannion, ¿Estarán seguros? Evidentemente no están listos para lo que viene, pero... ¿Y si hago que lo estén?

Me asomo hasta la ventana de la enfermería, aún reposo ahí de vez en cuando y aunque ya siento aún más ganas de estar afuera me rehusó a solo observar por la ventana sintiendo de vez en cuando las miradas de Emma hacia mi al igual que las de mamá.

Aún no ha intentado hacer que regrese, ¿Sabrá algo? ¿O solo está esperando para hacer una jugada? Sea lo que sea no puedo darle el gusto de nada, no quiero seguirla llamando mamá, ella me traicionó a mi y a mis demás hermanos, no puedo creer que ella sea la encargada de mandarnos al camino de la muerte, eso no es ser una madre.

Las luces se apagan y la noche cae, es exactamente 18 de abril y me encuentro frente a la puerta marcando con un marcador un día más que ha pasado para esperar el regreso de Norman. Me hubiera gustado estar aquí para cuando se fue, para poder advertirle o escapar, ¿Pero hay forma de escapar? Sinceramente me da miedo el descubrirlo, no vaya a ser que termine muerto y ni a mis hermanos ni a nadie más conseguí ayudar.

Dan las diez de la noche, es obvio que todos mis hermanos ya están acostados y que ya es hora de que yo también vaya a dormir, pero el miedo, la soledad, los recuerdos de esos trágicos dias y la ansiedad provocada por estos últimos me hacen querer salir corriendo del cuarto sin mirar atrás.

Salgo y justo antes de cerrar la puerta está mamá justo al frente de mi con la mano alzada como si hubiera intentado tomar la manija para entrar.

—Veo que aún estás despierto ¿No es bastante noche?

—¿Que necesitas? Ya iba a dormirme.

—Parece que aún no puedes dormir solo, ¿No crees que molestas a Emma?

Me quedo pensando en sus palabras, puede que sea verdad pero no me quiero sentir aún mas peor con mi misma personas

—Es bastante noche, ella quiere descansar también pero tú no la dejas, ¿No extrañas a tus antiguos amigos?— me quedo mirándola con rencor y odio, ya se a donde nos lleva toda esta charla —Si quieres puedo hacer que antes del año programado te manden sin ningún problema de vuelta a la cede.

—No queiro eso, gracias. Estoy bien aquí esperando por Norman, una vez que el vuelva esperaremos a Emma y una vez que ella vuelva escaparemos de aquí para poder tener una vida tranquila y lejos de todo ese tiroteo y juego maniático y poco estable que usan para divertirse.

—¿Juego maniático?

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Me retire por un tiempo de esta historia, una disculpa, pero ahora que mi otra historia acabo daré de todo para que está historia continúe hasta su final. Gracias por su apoyo a todas las personas que la siguen, espero la sigan disfrutando.

Gracias en verdad, nos leemos luego.

—Nishimiya
西宮エマ