Cap.𝟹𝟺

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5 mese habían pasado desde que me entere que estaba en cinta, muchas cosas habían cambiando, partiendo por el hecho de que Aemond se había alejado.

Los primeros 3 meses el estuvo conmigo todo el tiempo, no me dejaba sola en ningún momento, se preocupaba de que comiera lo necesario y que estuviera cómoda, pero luego del tercer mes se alejó de la nada, no se le veía mucho por el castillo, con suerte se le veía en la hora de la cena, me dolía el hecho de que se haya alejado ahora que más lo necesitaba, no sabía que había pasado o que había hecho para que el haya decidido alejarse.

-¿Daenys me estas escuchando?-la voz de Rhaenyra me saco de mis pensamientos.

-si lo siento, solo estaba pensando-dije con una leve y falsa sonrisa, ella lo notó.

-¿es por lo de Aemond?-preguntó suavemente, ella se había vuelto mi confidente durante este tiempo.

-no, pensaba en el bebé-dije tratando de evadir el tema, pero ella no me lo permitió.

-sabes que puedes hablar conmigo Daenys-ella sabía cuando yo mentía y sinceramente a veces no me gustaba.

-yo....es que aún no puedo entender por qué lo hizo, ¿habré hecho algo mal?-pregunté con la voz quebrada, el tema me afectaba mucho.

-claro que no hiciste nada cariño, nunca entenderemos el porqué los hombres hacen lo que hacen, pero tú en este momento debes preocuparte por el bebé que llevas dentro, el tema con Aemond lo puedes ver después-respondió abrazándome.

-gracias Rhaenyra, de verdad, me has ayudado mucho y me alegra que a pesar de todo podamos estar bien-hable con una sonrisa sincera la cual fue correspondida.

Ella estaba por responder pero escuchamos como alguien entraba, amabas nos giramos encontrándonos con Jace y Baela, ambos tenían una sonrisa que desapareció en cuanto me vieron, las cosas con ellos ya no era lo mismo desde mi matrimonio, con Baela nunca tuve una buena relación, pero con Jace tuve una historia y que me tratara con indiferencia me dolía, porque aún le guardaba cariño, a los tres en realidad.

-Madre....Daenys-saludo Jace con postura firme y tensa.

-Jace, Baela-correspondió Rhaenyra el saludo, por mi parte sólo di un asentimiento-¿necesitan algo?

-de hecho si, necesitaba hablar contigo Rhaenyra-respondió Baela-a solas si es posible.

-ya es momento que me vaya, muchas gracias Nyra-le agradecí con una sonrisa mientras me levantaba con algo de dificultad, mi estomago no me permitía mucha movilidad.

-no puedes andar sola en ese estado Daenys, permite que Jace te acompañe a donde necesites ir-ofreció Rhaenyra.

-no es necesario Nyra, puedo ir sola-dije declinando de su oferta.

-opinó lo mismo que ella, el estar embarazada no la vuelve invalida-hablo Baela, su voz realmente me irritaba.

-permíteme acompañarte Daenys, no tengo ningún inconveniente-ofreció esta vez Jace dejándome sorprendida.

-yo...-lo pensé por un momento-esta bien, puedes ayudarme.

-bien, Baela tú coméntale el tema a mi madre-ordenó Jace, que sexy se escucho dando órdenes.

El embarazo había aumentado mi apetito sexual y teniendo en cuenta que no tenia a mi esposo para ayudarme con eso, con tan solo alguna acción demandante de un hombre provocaba que mi cuerpo se encendiera al instante.

Salimos de la habitación en un incómodo silencio, sentía la tensión en el aire incomodándome un poco, el iba tenso, se notaba por su mandíbula apretada y postura firme, siendo sincera nunca imagine estar en una situación así con el.

°[𝑨𝒆𝒕𝒆𝒓𝒏𝒖𝒎]° Donde viven las historias. Descúbrelo ahora