°[𝑨𝒆𝒕𝒆𝒓𝒏𝒖𝒎]°

Cap.𝟏𝟐

No había estado muy seguro de muchas cosas en mi vida, nunca, la gente me hizo dudar de muchas cosas, si era verdaderamente digno de heredar Driftmark, quien era mi verdadero padre, pero hace unos días por fin pude estar seguro de una cosa, estaba muy seguro de que desde ese día en la biblioteca, Daenys despertaría muchas cosas en mi y muy pocas eran sanas, sabia que estaba mal, yo estaba comprometido con Rhaena y tenia que serle fiel, pero no podía, no mientras Daenys estuviera en mi cabeza y me tentara con solo caminar.

Mi madre me había pedido que fuera a buscar unas cosas a la sala del consejo, no pregunte nada y me dirigí allí, tal fue la sorpresa al ver a Daenys y Aegon en ella, se encontraban sudorosos, agitados y su ropa era un asco, ambos me miraron con susto, pero yo no podía dejar de mirar a Daenys, estaba desilusionado, sabía lo que habían estado haciendo, lo deduje por como se encontraban, Daenys estaba sobre la mesa con los senos fuera del vestido y Aegon se encontraba con las camisa abierta, Daenys le pidió que se retirara y nos dejara a solas, cosa que el hizo, ella trato de acercarse pero solo me aleje.

Luke y-yo−trato de hablar, pero la interrumpí antes de que pudiera continuar.

− ¿por qué Daenys? ¿por qué con él? −pregunte con tristeza, no podía procesar lo que había visto.

−Luke, lo que tengo con Aegon viene pasando desde hace 8 años ya−hablo en susurro, no podía creer lo que decía −no es algo que pueda detener ahora, lo que tenemos con Aegon es mucho más que algo carnal, algo que puede pasar solo una vez, tenemos fuego corriendo por nuestras venas y cada vez que estamos juntos, estas arden, lo siento tanto Luke.

−Aegon está casado, ¿no piensas en cómo se puede sentir Haelena? −dije, ella no estaba pensando en las consecuencias.

−claro que lo hago Luke, pero no puedo evitarlo, sé que Aegon está casado y que es prohibido, pero tú también lo eres−dijo, sabia que lo que decía era verdad, no estaba en posición de reclamarle nada.

Yo simplemente no sabia que mas decir, asique me fui, la deje ahí, yo necesitaba aclarar todo, no podía sacar la imagen de ellos dos juntos, me dolía, sabia que nunca podría tener algo con ella, ella era mayor que yo y necesitaba a un hombre, no a un maldito niño, no a una bastardo, pero no podía sacármela de la cabeza, no podía, necesitaba despejarme y decidí pasar tiempo con mi prometida, así que comencé a buscarla.

La encontré en su habitación, estaba bordando, por lo que me acerque en silencio y me senté a su lado, ella noto mi presencia, pero continuo sus acciones, Rhaena era una buena chica, en algún momento llegue a tener sentimientos por ella, pero todos se desvanecieron al ver a Daenys, Rhaena siempre había estado para mi como yo para ella, ella merecía que la respetara, se lo debía, pero no podía, por mas que lo intentara, tal vez necesitaba acercarme más a ella.

−en que piensas Luke? −pregunto Rhaena sobresaltándome, estaba tan metido en mis pensamientos que se me había olvidado de su presencia.

−en nuestro compromiso−dije, no podía decirle la verdad, tenía que alejar mis pensamientos con Daenys.

−oh, yo también eh pensado en eso, me tiene un poco nerviosa cierto tema−hablo con una sonrisa nerviosa, Rhaena era linda, no podía negarlo.

−cual tema? −pregunté mirándola, vi cómo se sonrojaba.

−oh pues ya sabes−dijo nerviosa, yo solo la mire confundido, realmente no entendía−nuestra noche de bodas Luke−dijo aún más sonrojada.

−oh, verdad, no había pensado en eso−dije sincero, no había pensado en eso, lo único que se me vino a la mente fue lo que paso con Daenys en su habitación, como me tocaba, como usaba su lengua, hubiera seguido así de no ser porque recordé que estaba con Rhaena y estaba teniendo una erección, cosa que Rhaena noto, me sonroje−y-yo lo siento.

−no tienes de que preocuparte Luke−dijo con una sonrisa mientras se arrodillaba frente a mi−en una semana vere mas que eso, de hecho si tu quieres, podría ayudarte con eso.

Me congele ante sus palabras, yo la mire inmediatamente nervioso, no podía creer sus palabras, se encontraba arrodillada ante mí, dispuesta a solucionar mi problema, sin darme cuenta mi mente viajo a Daenys, me imagine que era ella nuevamente frente a mí, por lo que sin darme cuenta termine asintiéndole a Rhaena.

Ella se acerco a mi bulto y lo acaricio, yo me encontraba soltando suspiros por su tacto, desabrocho mis pantalones y los bajo, dejando que mi miembro saliera, sin juegos previos se lo metió a la boca, arrancándome un jadeo, su lengua jugaba con mi miembro dentro de su boca, no se sentía igual de satisfactorio que con Daenys, Rhaena era mas calmada, lo hacia con mas delicadeza, en cambio Daenys lo hacía más salvaje volviéndome loco, al pensar en Daenys me calenté aún más, sintiendo más placer al imaginar que era ella la que tenía su boca allí y no Rhaena, unos minutos mas tarde llegue a la cima, antes de poder correrme Rhaena saco su boca y me masturbo hasta correrme.

Estaba tratando de regular mi respiración mientras me arreglaba la ropa, cuando termine, ninguno dijo una palabra, ella volvió a bordar como si nada pero con una sonrisa, yo por mi parte me sentí culpable al pensar en Daenys mientras ella me satisfacía mis deseos, simplemente me pare y Sali de la habitación con dirección a la mía.

Al día siguiente nadie vio a Daenys, hasta que Daemon nos informo que había viajado a Piedra de las Runas, yo por mi parte me sentí aliviado de que no la vería por un tiempo y podría acercarme y enfocarme en Rhaena.

Nos encontrábamos esperando a Daenys, había llegado hoy de su viaje, cuando entro tomo asiento frente a nosotros, pude ver una marca en su pecho, mire a Aegon y al parecer no fui el único en darme cuenta que era un chupetón, ella nos miro con una ceja alzada al notar nuestras miradas en ella, hasta que mama decidió hablar y le pregunto, ella dijo que solo había sido un mosquito, pero yo sabia que se había acostado con alguien, no había que ser muy inteligente para deducirlo.

Me pare al mismo tiempo que mi hermano, ambos nos dirigimos a Baela y Rhaena y las invitamos a bailar, yo tenia mi mirada fija en Daenys y pude ver que mi hermano igual, no entendía el por que mi hermano se encontraba así de molesto, hasta que deduje todo, ella también tenia algo con mi hermano, me enoje aun mas cuando solo nos sonrió, bailamos con Baela y Rhaena, hasta que Aemond con ella se noes unieron, ambos se veían alegres, no pude evitar enojarme cuando ambos se cayeron y se reían como si solo fueran ellos, pero eso demostraba que tenia menos oportunidad con ella, y me ardía como el infierno.

La cena había terminado hace ya una hora, había acompañado a Rhaena a su habitación y nos quedamos hablando hasta que ya se hizo tarde y yo debía volver a mi habitación, por lo que despedí y me dirigí a mi habitación, en el camino tenia que pasar por la puerta de Aemond, no planeaba encontrarme con Daenys saliendo de su habitación a estas horas, por lo que detuve mis pasos haciendo que ella notara mi presencia.