Capítulo 37

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Wen Chengyao levantó lentamente una de sus cejas y sintió que la actitud de Jun Qingyu por su respuesta no era del todo correcta—¿No es él tu novio?

Jun Qingyu dijo—Por supuesto que no.

—Entonces, ¿ambos están casados?—Wen Chengyao dijo—Te ves bastante joven y te casaste tan pronto.

—......

Jun Qingyu se sorprendió con el circuito cerebral de Wen Chengyao.

Wen Chengyao podía sentir el silencio de Jun Qingyu a través de su máscara. Hizo una pausa—¿Ustedes dos no están casados? ¿Y no son novios...? Entonces, ¿cuál es su relación?

Wen Chengyao creía que era muy preciso al juzgar a las personas. La atmósfera entre los dos era muy diferente a la de los amigos comunes, no encajaba del todo si decía que eran miembros de la misma familia.

Como resultado, ¿el resultado de su ataque de especulación fue realmente incorrecto?

Jun Qingyu dijo—¿Por qué te preocupas por nuestra relación?

Jun Qingyu ya no le prestó atención y bajó la cabeza para comer su naranja. Wen Chengyao no preguntó más; no pudo evitar pensar en este asunto internamente.

¿Cuál era su relación...?

Por lo que parece, su relación era entre una sirenita y un dueño, pero eso no parecía correcto... las otras sirenitas no se llevaban así con sus dueños.

La razón fue que la sirenita estaba acostumbrada a tener intimidad con Fu Yuanchuan, y después de convertirse en humano, no se tomó este asunto en serio.

Wen Chengyao dijo—Pareces estar bastante confundido, ¿necesitas un mentor? Puedo iluminarte.

—No necesito un mentor—él resolvería un asunto tan trivial por su cuenta.

Wen Chengyao se encogió de hombros—Como desees. Si no aprovecha tan buena oportunidad, ¿dónde puede encontrar un mentor espiritual como yo?

—......—este pirata interestelar era bastante bueno halagándose a sí mismo.

Jun Qingyu no se molestó en prestarle atención y ordenó las cosas en la mesa. Se levantó y caminó hacia la hermana de Wen Chengyao.

Wen Chengyao lo vio salir y su mirada se deslizó inconscientemente hacia el botón rojo que Fu Yuanchuan había presionado antes.

Levantó las cejas y se dio la vuelta para seguir a Jun Qingyu.

Jun Qingyu guardó los platos sobre la mesa. Cuando se fueran por un tiempo, alguien vendría a verificar si robaron algo, por lo que no había necesidad de que él hiciera mucho.

Wen Chengyao preguntó—Mira la salud de mi hermana. ¿Cuánto tiempo le tomará recuperarse después de comer estas cosas?

—Depende de su situación—Jun Qingyu realmente no podía decirlo. No era un médico profesional, solo que la energía vital universal en el agua de manantial podría ayudar con la recuperación, pero realmente no tenía claro la duración—La constitución corporal de cada individuo es diferente y tiene una eficacia diferente para la absorción.

Jun Qingyu vio que Wen Chengyao no podía esperar a que su hermana se curara al momento siguiente, para poder llevarse a su hermana.

Guardó esos platos, colocándolos a un lado en una canasta.

Jun Qingyu dijo—No hay necesidad de apresurarse. Incluso si se cura, todavía tiene que quedarse unos días más para estabilizar su condición. Además, la gente común también puede acondicionar sus cuerpos con solo comer algunos postres míos. Tu hermana se está recuperando de una enfermedad grave, no hay nada de malo en comerlos por unos días más.

Transmigrado a la sirenita del jefe violentoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora